[NamJin] ¿Una familia?

• T R I G É S I M O S E X T O •

¡Buenas mañanas-tardes-noches! ¿Cómo se encuentran? ¡Espero que muy bien!:
Últimamente la escritora de este fanfic se aparece mucho en los comienzos y finales de los capítulos, qué pesada es... ¿no es cierto? 😂.
Cuestión, mi cartelito muy obvio y yo les venimos a advertir que...

(Es color violeta porque a mi me encanta este color, ¿entendido? 😂).

Ya saben lo que se viene... ¡saludos y buena suerte!

~Feliz aniversario.~

12 de enero.

Seok-Jin y Nam-Joon llegaron antes de lo previsto al hotel pero su habitación ya estaba lista para ellos. Así que una vez dentro de la misma dejaron su pequeña maleta a un lado y le dieron una rápida mirada a la habitación la cual estaba decorada con tonos rojos, blancos y colores crema. Además de tener espejos muy lujosos que hacían ver aquella habitación de hotel mucho más amplia.
Seok-Jin se tiró en la cama disfrutando de la comodidad que esta traía, era tan suave y cálida que juraría que ahí podría invernar unos veinte siglos para recomponer todas sus horas de sueño perdidas. Nam-Joon mientras tanto, inspeccionó todo de cerca y luego vio a su novio tirado boca abajo a la cama y se tiró a su lado abrazándolo, cerrando sus ojos deseando descansar mucho tiempo a su lado.

El de cabello oscuro observó la hora notando que eran las 08:59 AM  y que ya debían hacer su primera llamada a su amigo para ver que su pequeño bebé de tres años se encontraba en perfecto estado o que, al menos, se encontraba un poco mejor después de lo que había ocurrido aquella madrugada. —Debemos llamar a Steve. —Murmuró con cierta voz ronca arrastrándose por la cómoda cama matrimonial sentándose sobre las almohadas apoyando su espalda sobre la cabecera. —Ven, Joonie. Hablemos con nuestro Jung-Kookie. —Sonrió Jin acariciando los cabellos platinados de su pareja quien asintió con una leve sonrisa.

[...]

—Ya lo oyeron, está saludable y feliz. Muy bien cuidado por el tío Steve. —Se hizo un leve silencio en la llamada. —Por si quieren parte del comunicado ahora en un rato volveremos al departamento a dejar la compra y después iremos a por la tropa. ¡Así que ni se les ocurra llamarme por las siguientes cuatro horas! —Alertó subiendo el tono. —Ahora disfruten la soledad que no tienen hace meses y sacien sus necesidades como corresponden. —Steve cortó la llamada sin siquiera dejar que la pareja pudiese hablar, dejó sus palabras en la boca.

Un mal sabor de boca abordó en ellos y Jin tiró su teléfono móvil en la mesa de noche observando muy de cerca a su pareja. —¿Y ahora qué? Me siento muy vacío Joonie, ¡esto es muy extraño! —Lloriqueó. —¡No es justo! ¡Debería volver a llamarlo! ¿Quién se cree qué es para decirme que no puedo llamarlo en las siguientes cuatro horas? —Suspiró. —¡En cuatro horas podrían tener un accidente, Jung-Kookie podría levantar fiebre o tornarse súper insoportable tanto que Steve ya no lo aguante y se quiera ir! ¡Voy a lla... —Sus labios se vieron apresados por los labios de su pareja tranquilizándolo. Seok-Jin algo confundido se dejó llevar por aquel beso tan suave y le siguió el juego dejándose llevar nuevamente por los movimientos suaves y sensuales, se separaron por micro-segundos regalándose mutuamente una sonrisa antes de continuar.