CAPÍTULO 18

3.6K 322 164
                                    

-Gracias, pero dile...

-Gracias y ya, te juro que no está envenenado, Pino. ¿Puedo llamarte así?- el cretino de pelo rubio se acercó hasta donde estaba con una sonrisa de oreja a oreja, la chica al verlo huyó despavorida.

-Am... No, Dipper y ya...- respondí seriamente.

-Bueno, Dipper, tómalo por favor, es una cortesía de mi parte, mientras conversamos un poco...- dijo para sentarse en el asiento junto a mi, enseguida fruncí el ceño.

-¿Y de que quieres hablar, Viktor?- respondí intentando que no sonará grosero, pero fue bastante difícil modular mi tono de voz tratándose de este idiota.

El interpelado sonrió bajando la mirada, como si se disculpara, fruncí aún más el ceño, esta vez, confundido, era la primera vez que veía semejante gesto en él.

-Yo... Bueno... Mabel me contó que estabas extrañamente distante después de lo de...- carraspeó un poco la garganta para aclararse antes de continuar, un gesto curioso. -De lo de mi pequeña broma... No creí que fuera a hacerte sentir mal, lo siento.

"Esperame... ¿Que!"

Enseguida mis ojos se abrieron como platos, el cretino se estaba disculpando conmigo... Al principio no supe cómo reaccionar.

-Asi que... Solo era una broma....- mencioné, sintiéndome un poco más enfadado.

-Si, lo siento mucho...- se quedó un momento callado, le dió un sorbo a su vaso y luego continuó. -Sonará a excusa, y probablemente lo es, pero siempre me he llevado pesado con la gente que me agrada. Los Ingleses somos muy ajenos al contacto físico, así que no podía hacer este tipo de bromas pesadas-. Otro sorbo al vaso. -Sabia que los americanos eran menos prejuiciosos en ese aspecto, y al ver la oportunidad no me pude resistir, si te soy sincero-. Me miró entonces, sonriendo aún apenado, como si incluso esa sonrisa me pidiera disculpas, de pronto todo rastro de enojo quedó pisado por cierta compasión nacida de su torpe excusa.

-Bueno, pues habemos americanos que detestamos el contacto físico de gente que no conocemos...- respondí, y sin darme cuenta le di un largo trago al vaso.

"Si muero envenenando quiero hacer directamente responsable a Viktor".

Para mí fortuna (o desgracia), no mori, incluso me pareció que el sabor de aquella desconocida bebida resultaba delicioso y refrescante.

-Esta bien, de nuevo, lo siento... No te prometo no volverlo a hacer, soy una persona bastante terca, pero haré lo posible por mantenerme al margen... ¿Está bien?- me extendió una mano, como para cerrar la promesa. Alargue la mía para tomar la suya, con cierta inseguridad, apenas roce sus dedos cuando él retiro la mano. -Solo si prometes tú también una cosa...

Inmediatamente lo mire con desconfianza, ¿Que demonios pretendía ahora este hombre? Suspiré con cierta resignación.

-Dime...

-Solo... No tienes porqué ser tan cruel conmigo, ¿Entiendes? Sé que no te agrado, es evidente la manera en que me rechazas... Pero creo que no me haz dado la oportunidad si quiera, te estás apresurando a juzgarme sin saber nada de mi, y eso me molesta-. Y de verdad parecía molesto cuando lo dijo. -Tu familia de verdad me agrada, son buenas personas... Tú también me agradas, así que... Solo quiero que no me juzgues sin conocerme, si quieres no seas mi amigo, pero al menos... Dame la oportunidad de no quedar como una basura...

De pronto me sentí mal; Viktor, por mucho que me pesara admitirlo, tenía algo de razón, me estaba precipitando a juzgarlo solamente porque se llevaba muy bien con Ford y el resto de mi familia...

Si No Esta Prohibido No Es Divertido (Bill X Dipper)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora