Crystal child [2018] Yoomin¡COMPLETO!

Capitulo 48

Park Jimin.

El sonido de espadas chocan sintiendo mis manos incluso arder al aplicar fuerza en cada estocada mientras trato de luchar percibiendo en cada choque de espadas la magia de Kyung, en cada choque no dejo de sentir el dolor de cada criatura que le quito a todos esos pobres unicornios, no era algo que podía evitar estaba concentrando su magia en cada golpe de su espada, pero un último choque de espadas me hace tener que caer de espaldas en cuanto miro ese rostro lleno de rabia querer empuñarme llevo una de mis manos en el suelo concentrando mi magia en la palma de mis manos, apretando los ojos esperando el golpe pero nunca llega al abrir los ojos es simplemente un gran bosque, no dejo escuchar la madera torcerse formando grandes árboles, en cuanto me pongo de pie miro a Kyung con la mano atorada en uno de los troncos junto la espada, rápidamente me pongo de pie para dar el golpe pero el estruendo de las ramas romperse se hace presente asiéndome retroceder y perderme de los propios árboles.

-¡Si crees que un maldito bosque me va a detener estas equivocado! –Lo escucho gruñir lejos de mí.

Al mantenerme lo suficiente lejos de él me escondo tras de un gran tronco de uno de los arboles centrando la magia en la planta de mis pies sintiendo una minuciosa cantidad de magia oscura en medio de la arena, era Kyung que se encontraba aun perdido en el bosque buscándome deshaciendo de los arbustos a cada paso que daba para buscarme.

Dejo de usar la magia teniendo en mente el punto exacto de su ubicación me las arreglo para tener que subir en una de las ramas del árbol tomar el arco y concentrar mi magia en el punto de la flecha me pongo en posición mirando en el blanco, al soltar la fecha cae directamente a él, observo como alrededor de su cuerpo comienza a formarse espina rodeando hasta caer al suelo.

-¿Enserio crees que hubiera sido tan idiota? –Lo escucho decir tras de mí sintiéndome ser detenido tomándome de los hombros.

-Estamos hablando de la misma criatura que creo todo ese ejército de Crystal. –Le recuerdo.- Es normal que tuvieras que usar un señuelo.

Primer asalto, debo de continuar.

Un quejido sale de su boca asiéndolo dejar de sujetarme de los hombros de un brinco salgo de esa rama rodando hasta tener que ponerme de pie observando a Kyung gruñendo al tener las manos llenas de enredaderas, en cuanto da un jalón las espinas desaparecen suficiente para que baje de la rama y me alcance, me sujeta del cuello asiéndome chocar contra el tronco del árbol soltando u puñetazo en mi estómago, pero el dolor es mínimo recordando las palabras del sabio Han.

-Sabes... ¡Te golpeare lo suficiente para tener que hacer desaparecer esa malditas molestias llegas a juegas enserio!

El suelta otro golpe asiéndome arquear la espalda mientras suelta una tras otro escuchando murmullos de terror en las gradas, pero en cuanto golpea de nuevo logro tomar su puño, asiendo retroceder lo suficiente a empujones para soltarme, en cuanto cae al suelo desenvaino mi espada apuñalándola en su pecho, en cuanto veo que atravesa mis manos se sienten temblar al verlo reír.

-Los Crystal son conocidos como las criaturas más fuertes por portar una gran armadura de cualquier mineral en cada centímetro de su cuerpo. –Él toma la cuchilla de la espada a puño retirándola simplemente quitándome poniéndose de pie enseñándome el pequeño rasguño que le hizo la espada.- En cuanto a ti, un pequeños Crystal Child que apenas esta siendo un adulto, tus posibilidades son tan pequeñas hermanito... Pero sabes tomo en cuenta esa gran valentía que tienes al enfrentarme.

El me da un empujón sujetándome del cuello miro las espinas que rodean sus manso pero en cuanta las espinas salen no parecen afectarle aun cuando tratan de enredar su mano.

-Me hiciste las cosas más fácil de lo que pensaba Jimin. –Menciona el con una sonrisa.- Después de tener el Clan de Crystal iría con mi siguiente objetivo el clan de alfas, incluso llegaría asesinarte para tener que casarme con ese tal Min Yoongi... En cuanto gane lo primero que haré es volverlo mi consorte.