Frágil

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A veces las personas lloran

no porque sean débiles,

sino porque llevan mucho tiempo

siendo fuertes.

P.O.V Clarke Griffin

La llegada de Anya me mantuvo despierta casi toda la noche. Pensamientos sobre cómo había sido la tierra antes de nuestra llegada. ¿Cómo habrá sido vivir en paz? Seguramente la definición de paz para los salvajes no era como la nuestra, pero paz sigue siendo paz.

-Hola.- saludé entrando al laboratorio de mi madre. Ella me dedicó una sonrisa con la mirada clavada en en unos papeles.

-Buenos días, cariño. ¿Cómo amaneciste?- me preguntó.

-Como siempre, estuve pensando en lo que dijo la chica de la montaña. Eso de que la sangre llama la sangre.- expliqué, mi madre asintió.

-Hablé con ella esta mañana sobre el tal Heda. Mencionó algo sobre un espíritu que elige ciertas personas con...con sangre negra.- me dijo mi madre y levantó la mirada observándome por primera vez desde quehabía entrado al laboratorio.

-¿Gente como la salvaje que encontramos?- interrogué frunciendo el ceño.

-Exacto. Me pregunto si todos los salvajes que estaban allí tenían sangre negra.- comentó mi madre.

-¿Crees que los hombres de la montaña los tenían ahí precisamente por su sangre?- cuestioné cruzándome de brazos y frunciendo el ceño.

-Es una posiblidad. Anya mencionó que Heda es un espíritu poderoso y que únicamente podría resurgir en una persona con sangre negra. Quizás los hombres de la montaña querían conseguir que Heda perteneciese a su ejercito.- explicó Abby.

-Una forma de destruirnos de forma rápida.- admití.

-Lo que me intriga un poco son las alteraciones en el sistema de estas personas. Mira, la salvaje que tenemos algunos días presenta una alta cantidad de estrogeno en su sistema y además su temperatura corporal interna parece no verse afectada por cambios en la temperatura externa. Observa esto.- Me pidió mi madre mostrándome una hoja.

-Su amígdala cerebral percibe el acercamiento corporal como un tipo de amenaza. No importa que tan lenta o silenciosamente nos acerquemos a ella, reacciona con agresión o gruñidos. Se produce un cambio extraño en su sistema. Creo que se le ha entrenado desde hace años, no hay muestras de que se halla implantado nada en su cerebro. Mas bien creo que su comportamiento se ha alterado usando otros métodos.- me dijo mi madre volviendo a sujetar el papel.

-¿Comportamiento inducido entonces?- cuestioné.

-Es difícil modificar el comportamiento de los adultos. Es mas fácil moldear a los niños. Creo que ella ha estado bajo algún tipo de tratamiento desde pequeña.- respondió mi madre.

-Voy a ir verla.- avisé levantándome.

-Pike me dijo que llevaría acabo un estudio hoy. No interrumpas, no queremos que la asesine.- me recordó mi madre con una mirada severa.

Abandoné el laboratorio y me dirigí lo mas rápido que pude a la sala de observaciones. Inocentemente saludé a los guardias y coloqué el código en el panel de seguridad. Raven estaba sentada leyendo una revista con las piernas cruzadas.

-Hola, Rav.- saludé acercándome. Cuando miré a la cámara me tomó por sorpresa la imagen que me recibió.

-Hola rubia.- había respondido Rav, su voz era un susurro en la distancia.

La bella salvaje  (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora