El noruego al notar lo perturbado que estaba el menor simplemente carraspeo su garganta y del bolsillo derecho de sus pantalones saco una navaja para con esta comenzar a retirar las cuerdas de las muñecas y pies del de cuencas.
Tord: Bien, sígueme.– Ordenó, se puso de pie y comenzó a caminar hacia la salida.—
El de cuencas al estar libre, se levantó de golpe sintiendo un gran mareo y dolor en su cabeza por el golpe que le había dado el de cuernos anteriormente. Tambaleante, comenzó a correr hacia el de noruego con la intención de golpearlo, era ahora o nunca, pero a pocos centímetros de dar el golpe una descarga eléctrica recorrió todo su cuerpo, provocando que este callera al suelo.
El noruego al escuchar la corriente se dio vuelta para observar al menor retorcerse de dolor.
Tord: ¡Oh!, ¿No te lo dije?– Hablo fingiendo impresión.– Si tratas de hacerme algún tipo de daño el modo de defensa que tengo se activa y te provoca una descarga eléctrica.– Anuncio.—
El de sudadera roja se colocó de rodillas justo enfrente del de azul y con una sonrisa de oreja a oreja tomo fuertemente la mandíbula del otro.
Tord: Deberías saber que si yo inventé esto, por obvias razones, no se me va a escapar ningún detalle.– Hablo con tono serio.– Así que trata que no vuelva a suceder.– Soltó bruscamente al menor y nuevamente se levantó.– Bueno, a menos que quieras volver a sentir más descargas como esa, claro.– Su tono de voz cambio a uno sarcástico.—
El menor simplemente chisto, sin duda aquel tipo era invencible, con pocas fuerzas se sento de nuevo sobre el suelo y sentía como poco a poco aquel dolor provocado por las corrientes eléctricas desaparecían, miro sus manos, sucias por el polvo que aquel lugar tenía, sentía demasiada impotencia y por eso mismo las apretó, las apretó tan fuerte que sentía como sus propias uñas eran enterradas en sus palmas, se estaba sientiendo demasiado inútil.
Pero, ¿que más le quedaba?, Nunca lo habían preparado para situaciones como está, nunca se hubiera imaginado que estaría en esa situación y suponía que sus padres tampoco, siempre había sido protegido, llevándolo a la escuela su chófer y regresando de la misma forma, y en ocasiones, siendo ya casí adulto, el mismo en su propio auto.
Nunca hubiera imaginado que en aquellos rumbos, en esos vecidarios tan tranquilos, viviera un loco inventor y desquiciado en busca de un hombre para hacer quien sabe que cosas. Al pensar en eso trago duro, no sabía que le esperaba por delante pero tenía que encontrar la manera de sobrevivir y por lo menos notificarle a su Nana que estaba bien, no quería preocuparla.
Suspiro y se levantó del sueño, al menos ahora no estaba atado y podría caminar, eso era mejor a estar encerrado en aquel lugar lleno de polvo, obscuro y para terminar atado.
Comenzó a caminar hacia la salida de aquella habitación, al salir se encontró con un pasillo que dirigía a otras habitaciones. Noto como el se encontraba en la última y al inicio de aquel corredor habían unas puertas que parecían ser de un elevador, dónde se encontraba esperándolo el noruego.
Con nerviosmo comenzó a caminar hacia él y al llegar este presionó el botón para que las puertas se abrieran, una vez lo hicieron, ambos entraron. Observó en total 6 botones, ellos se encontraban en el quinto piso, segundo piso bajo tierra, lo cual le había sorprendido, aquella casa tenía demasiada profundidad al parecer.
Tord: Te mostraré lo básico, los demás lugares no son importantes para ti.– Comento mientras el ascensor subía, una vez las puertas se abrieron, ambos salieron de ahí.—
Thomas observó la casa, era linda, parecía una casa normal, cualquiera que entrara ahí no tendría ni idea que en ella vivía un desquiciado. La voz con asento noruego interrumpió sus pensamientos de nuevo.
Tord: Ven.– Ordeno y comenzó a caminar, sinedo seguido por el menor.– Está será tu habitación, podrás estar aquí mientras nos vamos.– Dijo y abrió la puerta de la habitación.
En la habitación no había mucho, tenía una cama matrimonial, un escritorio y su closet. No estaba decorada obviamente como la suya y era más pequeña, pero igual está tenía su propio baño, se veía cómoda.
Tord: En el closet hay ropa, toma una ducha y luego te mostraré lo demás.– Ordeno nuevamente y salió de la habitación cerrando la puerta a sus espaldas.—
Tom nuevamente suspiro, se miro a si mismo y noto que su ropa estaba muy sucia, en la antigua habitación no había luz y no lo había notado, se sintio incómodo de inmediato.
Sin más camino hacia el closet y noto la ropa que había ahí, esperaba por lo menos que fuera de su talla, comenzó a buscar y lo único que le quedaba era una camiseta negra junto a unos pantalones grises.
Tomo las prendas junto con la ropa interior y camino hacia el cuarto de baño, una vez dentro comenzó a retirar sus prendas, dejándolas en un pequeño cesto y entro a la ducha, abrió la llave y dejo que las gotas de agua tibia recorrieran su cuerpo. Sintió un pequeño ardor al sentir como estás caían en su herida, tocó aquella parte de su cabeza y comenzó a sobarla para que el dolor disminuyera.
La sensación del agua reclrrer su cuerpo le recordó al baño que tomo justo esa mañana, quien diría que en unas horas no estaría en casa. Cerro los ojos y trato de tranquilizarse, comenzó a ducharse y una vez termino salió de ahí.
Tomo una de las toallas que estaban en el estante y seco su cuerpo, se vistió y salió de aquella habitación.
Con pasos lentos se dirigió hacia la cama y dejo caer su cuerpo boca abajo en ella, su cabeza aún le dolía, su cuerpo estaba débil y comenzaba a tener hambre. Sus ojos se cerraban y al notarlo los abría al instante, no debía quedarse dormido, debía de estar alerta.
Tuvo una lucha interna consigo mismo pero al final el sueño y cansancio termino venciendolo, sin más quedó profundamente dormido.
.
.
.
.
.
.
.
🏁𝕿𝖔𝖒_𝕽𝖎𝖉𝖌𝖊𝖜𝖊𝖑𝖑_09🏁
ESTÁS LEYENDO
❌Secuestrado❌ ❤TordTom💙 (EN EDICIÓN)
Fanfic★• ・・・・★・・・ 🐻 ・・・★・・・・・★ Esta historia se centra en Tom Ridgewell, un joven universitario e hijo de un par de diseñadores famosos, los cuales no suelen estar con él por sus viajes de negocios. Fue creado por una de las empleadas más importantes de...