XII-El teléfono Violeta.

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°En alguna parte desconocida en Londres, Inglaterra.


La rubia se encontraba sentada en un pequeño sofá color vino.

Él sujeto de ojos color gris, abrió la puerta, entró, respiró profundamente y al pasar, cerró la puerta de manera delicada.

Sus pasos fueron pequeños, la duda entraba en su cuerpo. Por un momento se preguntó, cómo es que llegó ahí.

**- Tú amigo me dio una noticia hace unos días. Algo de lo que me pregunto, cómo es que nadie se dio cuenta.- mencionó la rubia  mientras le hacía señas al hombre, para que se sentara.

*- Discúlpeme no puedo entenderla. ¿Podría ser más específica?-comentó  dejando que la mujer lo observara directo a los ojos.

**-La mascota sigue con vida. Yo se lo dije, cuando una mascota le es fiel, uno se vuelve sentimental.-contestó mientras negaba con la cabeza.

*-¿Jones?-preguntó el hombre asombrado.

**-Sí querido. Me encantó la sorpresa.-comentó mientras sonreía.-Es perfecto.

*-¿En qué puedo ayudarle?-preguntó esta vez, mientras se sentaba.

**-En todo.-mencionó sonriendo mientras se levantaba y se acercaba a él.- Quiero que te ensucies las manos,  que tú estés dentro del juego. Quiero que  me hagas sonreír.- dijo mientras tocaba delicadamente la mejilla del hombre.

*- Haré todo lo que usted me pida.-mencionó mientras se acercaba más la rubia.

**- Estoy segura de que lo harás querido.- Comentó de manera tranquila.

Era completamente distinto, la mujer se estaba metiendo en tantos planes, tantas ideas, anhelaba con toda su alma jugar con ambos Sociópatas y verlos destruirse...

Al saber el paradero de la pequeña Jones, posiblemente el juego cambie de curso...

**
Mientras tanto en el Hospital BARTS.

--¡¿Pero que rayos fue eso?!-Exclamó John.

--Una Advertencia- contestó la Castaña, quién observaba al pequeño Holmes jugando con un celular.

-- ¿Cómo una persona puede correr con una bomba encima?- preguntó la Sra. Hudson.

-- Eran falsos.- comentó el Rizado.

-- ¿Falsos?- preguntó Kate.

-- Obviamente.-- contestó el pequeño Holmes, mientras John le contestaba un " Sherlock, por favor."

-- ¿Qué harías si en este momento te colocaran un chaleco lleno de explosivos?-le preguntó el Rizado a la mujer de cabello negro, quién se quedó pensando.

-- ¿Quedarse quieto, aterrorizado, nervioso sin tener una sola idea de qué hacer?- preguntó Alfred en voz baja, mientras la Castaña se acercaba a él.

-- Claro.- dijo el Rizado- Normalmente uno huye cuando sabe que está cerca de una bomba y sabe que posiblemente tiene tiempo para alejarse, sin embargo, cuando tienes una bomba encima, no correría por toda la Ciudad,  iniciará a pensar que sí realiza algún tipo de movimiento podría activarla.

-- Vaya, eso... Es cierto.- comentó la mujer de cabello negro quién se acercaba a Mary.

-- Y realmente eran dos hombres.- comentó la Castaña.

-- ¿Ahora de qué hablas?- le preguntó su amiga, mientras la Castaña observaba al Rizado quién seguía jugando con el teléfono. Y solo contestó con un, "Diles tú, dame el placer". Llamando la atención de todos en la habitación.

¿Sociópata? | Sherlock Holmes |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora