Capítulo cuatro.

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Alexia Mc'Mahon.

Él.

¡Dios!, Que hombre más guapo.

Mientras Liam me saluda no puedo dejar de mirarlo.
Sus ojos verdes están clavados de manera imnotizante sobre los míos. Tiene una abundante cabellera azabache que cae de forma rebelde sobre su frente.

Su porte es muy imponente, el traje que usa marca de una forma muy sensual sus músculos, se denota todos los pectorales de su pecho. Con torpeza le llegó hasta la altura de sus hombros.

Estoy babeando.

Siento mi corazón precipitarse y bombear con fuerza en mi pecho, y mi cuerpo se siente activo en muchos lugares.

Liam carraspea a mi lado, desvío la mirada para verlo.
—Alexia, él es Alek Diatlov. —presenta al hombre que ha robado mi aliento—. Alek, ella es Alexia Mc'Mahon.

Se acerca más a mí, invadiendo mi espacio personal y embriagandome con la escencia que trasmite.

—Que gusto me da conocerte Alexia. —masculla mi nombre de una forma tan seductora, que me encuentro hecha un manojo de nervios.

—Igualmente señor Diatlov. —él carraspea un poco y me corrige.

—Solo llámame Alek. —comenta tomando mi mano y dejando un dulce beso, pero en ese acto sus dientes raspan mi carne.

Siento como mis pezones están levemente fruncidos sobre la delicada tela de mi vestido.
Asiento sin encontrar mi voz, o las palabras adecuadas.

—¿Siéntate?. —dice Liam, hago lo que me pide—. ¿Cómo ha estado todo por aquí?.

—Todo surge de manera normal. —le digo dándole una sonrisa—. ¿Estás de vacaciones en este ocasión?.

—Solo serán unos días. —menciona—. Tengo que volver a Roma.

Liam es uno de los clientes frecuentes que el club tiene, lleva más de un año y medio frecuentando Capri, a solicitado a varias de las chicas como acompañamiento en las fiestas.

Compañía y quizá sexo.
En fin, no estoy relacionada con esos temas.

Cada vez que Liam viene, mantenemos una conversación amena y divertida. Aunque Lombardi lo ha colocado como cliente potencial, y a uno de los que pueda ofrecerme para mí primera experiencia sexual.

No le voy a los hombres mayores, por qué Liam ronda entre los 50 años.

—Me alegro por ti. —le digo con una sonrisa.

—¿Llevas mucho tiempo aquí?. —pregunta Alek, lo que me hace desviar mi mirada para ver esos tentadores ojos verdes.

—Dos años. —le digo—. ¿Primera vez en Capri?.

—Sí, fue un pequeño viaje que decidí hacer. —me comenta con voz ronca—. Además, Capri es un lugar muy hermoso.

—Lo es. —concuerdo con él—. A tenido un muy buen gusto al escoger este destino.

—Siempre he tenido buenos gustos. —y con ello me dedica un guiño.

<<Controlate Alexia.>>
Me obligó a mi misma a recomponer mi postura, muerdo mi labio, por que con esa simple acción, siento mis bragas mojadas.

¡Joder!.

—Iré a buscar alguna bebida. —dice Liam levantándose de su asiento, nos dedica una mirada divertida, supongo que hasta él ha sentido la tensión que se crea en nuestro ambiente.

Dama de Seducción |TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora