Capítulo 7

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Los días comenzaron a pasar rápidamente y poco a poco Alonso e Isadora avanzaban con el portal, decidieron hacerlo dentro de la habitación de huéspedes ya que de esa manera Mara no se daría cuenta. Hicieron el círculo, la estrella y los “garabatos” logrando abrir el portal, una extraña luz provino del círculo y Alonso decidió comprobar que funcionaba entrando en el mismo. Un par de minutos después de haber entrado, regresó con una sonrisa en su rostro.

-Lo lograste-dijo en tono triunfante chocando las manos con Isadora en el aire.

En eso entraron tres hombres altos, musculosos y muy apuestos salieron del portal seguidos por una mujer muy bella que se colocó al lado de uno de ellos, apenas entraron los otros dos se acercaron a Isadora y le dieron un beso en la mejilla, uno de cada lado.

-Ciao bella donna[1]-dijeron ambos que se pararon uno a cada lado de ella. Isadora seguía sorprendida por lo que habían hecho y dirijo la mirada a Alonso quien sonreía junto a la pareja del otro lado de la habitación.

-Te los voy a presentar-dijo Alonso aún sonriendo -Ellos son Oscar y Diana…-continuó, la pareja le brindo una pequeña inclinación con la cabeza. -Y a tu lado tienes a Mateo…-dijo haciendo una pausa.

Uno de ellos, él de ojos azules se acercó a ella tomándole la mano derecha y dándole un pequeño beso en la misma -Encantado en conocerte-dijo mostrando su sonrisa. Escuchó la voz de Alonso que decía -Y Lenni-el otro, que tenía los ojos de un tono miel, se acercó y tomó su mano izquierda e hizo exactamente lo mismo que Mateo. Isadora notó que los dos continuaban agarrándole las manos, se ruborizó por la forma en la que seguían sonriendo y apartó sus manos de las de ellos. Alonso se acercó a ellos y les dijo algo que no entendió, luego ambos pidieron disculpas por lo que habían hecho y Alonso le mandó a buscar a Amaya.

Unos minutos después Isadora llegó donde Amaya y le llevó a la habitación donde Alonso les presentó a todos, pero de alguna extraña manera no le hicieron lo mismo que a Isadora. Después hicieron una pequeña reunión y resultó ser que todos eran guerreros de parte de Alonso que estarían vigilándolas a las tres, pero en especial a Amaya porque lo más probable era que Dagon mandara a demonios tras ellas. Pero Amaya no dejaba de pensar en otra cosa y fue cuando se dio cuenta de que podía poner sus pensamientos en otras personas, escuchaba a Alonso lo cual hizo que se diera cuenta de lo anterior. “No tienes que tener miedo,  no dejaremos que te suceda nada…y por otro lado te ves mil veces mejor que ellos” ella dirijo su mirada hacia él. Alonso entrelazo su mano con la de ella lo cual hizo que se relajara un poco, había estado pensando en demonios que le atacaban y por otro lado en como se veían todos, parecían dioses griegos o al menos era como si algo divino saliera de ellos y eso le hacía sentirse un poco inferior. “Eres hermosa, para mí, y eso me basta” escuchó decir de los pensamientos de él.

Al final terminaron que ellos ocuparían esa habitación y no quisieron contarle a Mara, especialmente Oscar que resultó ser su protector, para que ella no se asustase.

-Isadora puedes practicar magia con Mateo y Lenni, obviamente cuando tengas tiempo-dijo Alonso tranquilamente. Amaya no supo que había pasado antes de que ella entrara a la habitación pero le sorprendió mucho la reacción de los tres Isadora con una sonrisa de “venganza” y Mateo junto Lenni completamente incrédulos.

-Me estas diciendo esto en serio-dijo Isadora pasando su mirada de Alonso a Mateo, a su derecha, y luego a Lenni, a su izquierda.

-¡No le hagas hacer eso!-reclamó Mateo.

-¡Por los dioses, mírale la mirada! Está planeando algo malvado contra nosotros-continuó Lenni. Alonso continuó firme ante la decisión que acababa de tomar.

-Ella necesita practicar, la magia no es cosa de un día y ustedes lo saben-dijo Alonso.

-Pero…-reclamaron los dos.

The Protectors: Book 1 - AmayaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora