Sex Pact •KookTae•

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Mi cuerpo se quedaba sin aire al sentir como chocaba con el suyo, no podía creer lo que estábamos apuntó de hacer.

-Jungkook, espera. -Intente decir entre jadeos.

-No me digas que te estas arrepintiendo de esto.

-Claro que no idiota. -Mire su rostro por unos segundos, el estaba sudando y los mechones de cabello mojado caían en su frente haciendo que luzca demasiado caliente. - Necesito recuperar un poco de aire.

Ambos reimos y calmamos nuestras respiraciones irregulares. Estábamos apuntó de lograr eso que tanto habíamos deseado, de cierta forma me alegraba que fuera con el. Que el fuera el primero en tomarme y yo fuera el primero en probarlo.

-¿Listo? -Me pregunto, abrió mis piernas y me sostuvo por los muslos. Yo sólo asenti y cerré los ojos, no estaba preparado para lo que sea que sentiria a continuación.

Lo sentí hundirse lentamente en mi mientras soltaba un gemido por la sensación. Yo me sujetaba de las sábanas apretando mis ojos y aguantando la respiración por un segundo.

Su lentitud era tortuosa y yo solo quería sentirlo dentro mío por completo, empuje mis caderas haciendo que su miembro golpeara profundo en mi, quitando un gemido de ambos.

-T..taehyung, no hagas eso.. -Dijo entre suaves jadeos.

Entonces volvió a salir lentamente, para luego entrar de nuevo en mi sacandome un fuerte gemido de nuevo, Dios la sensación era demasiado abrumadora para ambos, podía notar que el apenas aguantaba.

-Jungkook.. - Gemi tomando sus muslos y empujandolos más cerca de mi, necesitaba más de el. Su cuerpo se retorcio encima del mío y me embistió con fuerza a la par que sostenía mis piernas. -Asi.. - Dije cuando porfin me sentía satisfecho, mis gemidos no tardaron mucho en salir.

El empujó de nuevo en la misma posición, ambos lanzamos más gemidos por el placer, de pronto yo ya me había olvidado de lo que estábamos haciendo y la vergüenza abandonó mi cuerpo, lo único que buscaba era mi placer y el suyo.

Con eso en mente, moví mis caderas de nuevo, buscando más gozo. El respondió positivamente al moverse conmigo, acoplando nuestros movimientos. La habitación se inundaba en el morboso sonido de nuestras piel chocar mas nuestros gemidos.

Jungkook solto mis piernas y se sujeto por mis hombros, apretandolos con fuerza a medida que el ritmo de sus embestidas aumentaban y por más que fuera un simple tacto, mi cuerpo quemo por completo al sentirlo tan cerca mío. Se aferró a mis hombros mientras gemia como loco a mi lado, yo estaba por desmayarme ahi mismo.

Me pregunté que estaría mirando el idiota con esa expresión llena de deseo que se traia. Derrepente se lamio los labios viendo hacia abajo y no aguante la curiosidad bajando inmediatamente mi cabeza para ver que miraba con tanto anhelo.

Me encontre con mi roja erección haciendo un desastre por todo mi abdomen, gotas de líquido pre seminal por todas partes y se movía debido a la forma tan animal en que Jungkook me estaba haciendo suyo.

Su agarre en mis hombros se hizo más fuerte, lo mire a los ojos y sentí que no era el mismo de siempre. Sus ojos gritaban deseo y me sentí como una presa apuntó de ser devorada.

Una de sus manos abandonó mi hombro y fue directo hasta mi pene, masturbandolo con fuerza. Gemi fuerte mientras mi cuerpo temblaba debajo del suyo.

-Ya.. ya casi. -Dijo el ahogado en gemidos, yo solo cerré mis ojos disfrutando los últimos segundos en que duraría, Jungkook me estaba llevando al límite.

Cuando porfin sentí el éxtasis viajar por todo mi cuerpo, mi espalda se arqueo haciéndome chocar con su pecho, algo se removió en mi ante la sensación de nuestras pieles desnudas tocarse y gemi con fuerza mientras me venía en sus manos.

Segundos después Jungkook se vino dentro de mi, si pudiera hacer un retrato de la expresión que puso mientras se venía, lo haría y lo guardaría en mi memoria para siempre. Su boca se había quedado entreabierta mientras cerraba los ojos y apretaba mis hombros con fuerza dejando salir un gemido demasiado agudo.

Luego de un rato en el que pudimos recuperar nuestras respiraciones, el me soltó y nuestros rostros se encontraron. Ambos sonreimos como estúpidos, el se dejo caer a mi lado y dio un largo suspiro.

-Fue increible. -Dijo luego de un rato. - No te lastime, ¿Verdad? -Negue con la cabeza y luego el asintio.

-Bueno.. Tal vez un poco en los hombros.

El solto una risa mientras pasaba su mano por mi hombro derecho y lo acariciaba. Mi cuerpo salto ante su mano, no estaba acostumbrado a que Jungkook me tocara o diera cariño, aun asi se sintió bien.

Luego de un rato, vi como el sueño habia vencido al idiota y se quedo dormido con su brazo encima de mi hombro, quise sacarlo de ahi pero algo en mi me dijo que no lo hiciera. Cerré mis ojos y pensé en todo lo que habia acabado de pasar.

¿Como seria nuestra relación a partir de ahora? No sentía como si nada hubiera cambiado, seguíamos siendo el y yo pero en una version más.. caliente. La verdad era que sólo eramos dos desesperados y ambos eramos la mejor opción para el otro.

Agradecí internamente que sus padres estuvieran de viaje por unas semanas, nos daría la libertad de seguir con nuestro trato por un tiempo. Sus padres eran muy buenas personas, pero desde que conozco a Jungkook se que nunca han sido personas que pasan mucho tiempo en casa. Jungkook nunca se mostro afectado ante eso, pero siempre note que a veces el buscaba la atención de ellos cuando eramos mas pequeños.

Y lo entiendo totalmente, cuando eramos pequeños y mis padres peleaban, el era mi único hogar. Recuerdo pasar casi toda mi infancia en esta casa, jugando con Jungkook mientras que su madre nos hacia batidos de banana. De no haber sido por Jungkook y su familia, no se que hubiera pasado conmigo.

Cuando mi madre porfin dejo a mi padre, aun asi ella no pasaba mucho tiempo conmigo, se la pasaba viajando y cumpliendo trabajos en otra ciudad, por eso siempre pase la mayoría del tiempo al lado de Jungkook. Ambos siempre nos dimos compañía cuando nuestras familias nos abandonaban, creo que esa es la razon por la que nos hicimos tan unidos y existe tanta confianza entre nosotros.

Recordé aquella noche en que yo habia aparecido en su ventana y el me habia ayudado a treparla. Cuando porfin entre, el noto que yo estaba muriendo de fiebre. Primero me regaño por no avisarle antes y luego me cuidó toda la noche hasta que me senti mejor.

Tambien recorde las miles de veces que vendo mis rodillas por caerme tanto cuando aprendiamos a usar la bicicleta, claro que el lo habia logrado primero.

No se por que estaba recordando todo esto en este momento, teniéndolo al lado mio luego de tener sexo, roncando como un animal.

Sonreí viendo su cara aplastada en la almohada, Dios yo queria demasiado a este idiota.

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