CRISTALES

Capitulo VI: El comienzo de una verdad

Al llegar a donde estaban las inscripciones Laira y Leyna esperaron a su amigo sentadas en una barda cercana, la amiga de la albina como siempre estaba hablando y hablando sin parar los mismos temas de siempre, chicos y cosas de sus clases de estilista.

- ¿Tú crees? Yo creo que me tiene mala fe.

Hizo un puchero a lo que Leyna solo rió.

- No te lo tomes tan a pecho Lai, tal vez solo lo hace para ayudarte.

Comento Leyna restándole importancia viendo como Thero se acercaba a ellas.

- Bien, soy el 5° en pasar. Deseen me suerte cuando vaya.

Ríe y se pone en medio de ellas abrazándolas.

- ¡Ay! Thero no hagas eso me despeinas.

Se quejo Laira quitando el brazo de Thero, Leyna solo los miro sonriendo, sabia que se querían y esa era su forma de demostrarlo, un tanto extraña si, pero así eran ellos.

Cuando el concurso empezó Leyna estuvo maravillada por los trucos que los chicos hacían, se intentaban lucir claramente para las chicas las cuales hacían expresiones de asombro por cada truco. Leyna rodó los ojos hasta que vio a una chica que se le hizo conocida concursando, justo era la concursante que iba antes de su amigo. Cuando la vio patinando quedo asombrada y más cuando vio que era la hermana de Liam así que rápidamente lo busco con la mirada, encontrándolo en el lugar aplaudiendo a su hermana.

- Esto no puede ser ¿enserio?

Reprocho Leyna cruzándose de brazos.

- ¿Qué pasa Leyna?

Preguntó Thero mirándola.

- ¿Acaso me lo voy a estar encontrando a donde quiera que vaya?

Leyna frunce el ceño mirando en dirección a Liam, Thero mira en la misma dirección.

- Oh ya veo. ¿Ese no es el chico del otro día?

Laira asiente viendo al mismo lugar.

- Sí, si es el de la fiesta. ¡Vamos a hablarme!

Laira tomo a Leyna del brazo para acercarse pero Leyna se resistió.

- Lai no, pensara que lo estamos siguiendo o algo, además pronto pasara Thero.

En la bocina se escucho la voz de un hombre el cual llamaba a Thero a la pista, entonces Leyna y Laira lo apoyaban con gritos y aplausos. Después del concurso nombraron a los 3 puestos ganadores. Thero fue el segundo lugar. Estaban aplaudiendo a los ganadores cuando Leyna sintió una mano en su hombro, se volteo y miro a Liam.

- Hola Moon, que sorpresa verte por aquí ¿vienes a ver a alguien?

Sus ojos tuvieron ese rosa nuevamente y las preguntas inundaron su cabeza. Ese chico le daba mucha curiosidad.

- ¿Ah? Sí, mi mejor amigo, es el segundo lugar

Señalo atrás de sí, dándole una pequeña sonrisa al chico el cual pareció devolverle la sonrisa apenas perceptible.

- Ya veo, fue muy bueno. Sus trucos impecables, se nota que le gusta.

Leyna asintió y volvió su mirada a donde se supone estaban sus amigos, pero no los vio. Maldijo por lo bajo al saber que la habían dejado a propósito sola con él.

- Te dejaron ¿cierto?

Soltó una pequeña risa y se puso serio de nuevo.

- Sí, eso parece ser. Pero me las pagaran.

Algo le hizo darse cuenta que Liam no se había apartado después de ver el tono en sus ojos.

- ¿Quieres que te acompañe a buscarlos?

Sugirió un tanto relajado mientras comenzaban a caminar, entre tanta gente habían empujones y en uno de ellos llego un chico e intento arrebatar la pequeña cartera de Leyna de sus manos, forcejearon y Liam al darse cuenta cambio su tono de ojos a azules con gris, solo acerco toco una mano del ladrón y le dio un toque eléctrico el chico se alejo pero saco una navaja intento atacarlo pero lo esquivo, Leyna intento interferir, sus ojos se tornaron rojos y sus manos se envolvieron en llamas, el chico se asusto, soltó el arma y huyo, sus ojos volvieron pero aun con el tono rosado que ya era característico de ella cuando estaba cerca de Liam.

- Lo sabía.

Fue lo único que Liam dijo, Leyna le miro y se dio cuenta que el ladrón lo hirió.

- Vamos, tenemos que curarte.

- ¡No! Tenemos que hablar.

Hablo Liam intentando cubrirse la cortada en el brazo.

- Hablaremos mientras te este curando ¿vale?

El rostro serio de Leyna dio a entender que era su ultima oferta, Liam asintió y comenzó a caminar, por suerte la casa de Leyna no estaba tan lejos si tomaban un atajo. Al llegar entraron y rápidamente Leyna sacó todo para curarlo.

- Bien, dime desde cuándo tienes eso.

Pregunto Liam.

- Ah, no amigo. Primero dime tú ¿me has estado siguiendo? Porque te encuentro siempre en donde yo voy.

Hablo esta vez Leyna con el rostro serio mientras limpiaba la herida, se escucho un quejido proveniente de Liam.

- Esta bien. Te diré...