𝓪𝓽𝓽𝓪𝓬𝓴 ; 𝔃𝓲𝓪𝓵𝓵

attack; where are you, Shawn?

Ese ya no era Niall.

Sus ojos volvían a verse lilas otra vez y entonces Zayn supo que algo no estaba bien. Sabía que no se había vuelto loco cuando vio sus ojos en cuanto lo encontró y ahora esos ojos no se despegaban de él.

Su primer reflejo fue girarse hacia Devine con una expresión sombría.

─¿Qué mierda le hiciste?

No supo como su voz había salido tan segura, ni cuando algo saltó dentro del pecho del chico de ojos lilas en cuanto la escuchó.

Devine miraba a Niall cauteloso. Había escuchado a su padre decir que ellos eran más peligrosos cuando el color de sus ojos cambiaba.

Nunca había visto unos lilas.

Siempre eran rojos o casi negros.

¿Por qué?

El rubio veía a las dos siluetas con cautela.

¿Quienes eran?

La silueta más pequeña le fastidiaba. Su mirada le decía que le estaba estudiando, que buscaba su punto débil, que quería hacerle daño.

Eso no estaba bien.

Casi se le lanza encima ansioso de mostrar su linda dentadura sólo que sus ojos caen en el otro chico.

Sus lindos ojos preocupados le hicieron detenerse y girar su cabeza hacia el lado con curiosidad.

Él le gustaba.

Él no lo miraba con hostilidad o miedo.

Lo miraba con admiración y anhelo.

Eso le hizo sentirse bien.

Así que se acercó y rozó sus dedos contra su mejilla. El chico era cálido.

¿Por qué él era frío?

No quería ser así.

No.

Entonces algo hizo click en sus recuerdos y miró al otro con hostilidad.

─Tú querías que Niall se alejara de él ¿no es así?

Josh le miró confundido, pero él en un segundo tomó al moreno del brazo y lo alejó a miles de metros de allí.

─Vendré pronto.

Soltó antes de volver con Josh.

No quería que le fuera testigo de lo que estaba a punto de realizar.

Josh le vio con terror mientras sacaba sus blanquesinos y mortíferos colmillos.

Él había estado bien.

Ahí, dormido y escondido dentro de Niall.

Pero estos malditos tenían que hacerle despertar y él amaba mucho dormir.

Él no necesitaba sangre.

Él se alimentaba de la felicidad de Niall. De esa linda y cálida sensación que llenaba su pecho.

Y Niall sólo se sentía así cuando estaba con Zayn.

─Tú querías que Niall se alejara de Zayn, pero no pudiste. Tú los separaste pero ya se jodió todo.

─¡Cállate! ¡Niall es mío, tú eres mío!

Gruñó y aunque se abalanzó contra el menor, un solo empujón bastó para verlo por los aires.

─Niall no es tuyo, yo tampoco. Niall no te quiso, no te quiere y no te querrá.

Josh estaba temblando de ira.