Capítulo 16.

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El ángel bostezó, le habría gustado ir con Hoseok, se estaba aburriendo por no hacer nada. Sus superiores le habían dado una orden, encontrar a la hija de Asmodeo y llevarla con ellos, pero Jinhwan tenía otros planes. Supuso que la persona que buscaba no sabía quién era ni las habilidades que poseía, necesitaba advertirle que no debía confiar en nadie, tampoco en los otros ángeles.

—No puedo decirle a nadie, ni a Hoseok, si se enteran el plan fracasará. A partir de ahora seré un ángel fugitivo, dejaré que ellos me protejan, y después huiremos. Ariel, protégenos.—unió sus manos en un rezo.

—Jinhwan.—Hoseok apareció abriendo la puerta de la iglesia. Jinhwan se sobresaltó, por suerte no había escuchado nada.—Nos vamos, camina.

—¿A dónde?—preguntó extrañado, Hoseok parecía preocupado.

—Te llevaré a casa de una persona, estarás ahí hasta que podamos trasladarte a la casa que construirán. Descuida, los hombres de papá trabajan rápido.—el rubio le dio la espalda.—No te desvíes, oculta lo mejor que puedas tu presencia, iremos caminando desde aquí.

Jinhwan desvaneció sus alas y se acercó a Hoseok. Lo admitía, tenía cierto miedo, a pesar de que los ángeles podían volver arriba después de fallecer en la tierra, le daba temor ser estrangulado por Daios.

—Vamos.

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¿Que si le gustaba estaba mal?, ¿acaso le estaba pidiendo permiso o se lo anunciaba? Jooheon dejó escapar una risita, el hecho de que Changkyun le dijera eso lo dejó completamente rojo, pero eso no quitaba que el humano le resultara adorable. Se dejó caer en la cama, sentado a su lado.

—Está mal, Changkyun.—el nombrado agachó la mirada.—Pero no me molesta.

El rostro de Changkyun se iluminó volteando a verlo de nuevo.

—¿De verdad? Gracias, sé que eres un espíritu guardián y que no puedo estar contigo, pero mi corazón es terco, perdónalo.—Jooheon palmeó su cabeza haciendo que Changkyun se sonrojara. No podía seguir engañándolo con ese asunto, además, había comprendido que el humano le atraía no solo físicamente, quería protegerlo y pasar tiempo con él.

—Changkyun, yo en realidad no soy un guardián.—Changkyun no se inmutó, esperó a que continuara.—Soy un íncubo.

—¿De esos monstruos calenturientos?

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Hyungwon escuchó un ruido en su ventana, de un momento a otro apareció la figura de un chico joven y muy lindo, después Hoseok se dejó ver en el marco de la ventana. Hyungwon abrió levemente la boca, ¿ese era el ángel que tenía que cuidar?

Era bastante bonito, demasiado... lo miró de arriba abajo, ¿Hoseok tenía que protegerlo a él? Por un momento sintió celos, era tan bello, fácil podía enamorar a Hoseok... Se mordió la lengua esperando alejar esos pensamientos, Hoseok ya le había dicho que lo quería, ¿Por qué estaba dudando?

—Hyungwon, él es Jinhwan, es un ángel.—lo presentó Hoseok.

Hyungwon dio un paso hacia el invitado y le sonrió, ya basta de pensar en tonterías, no podía experimentar los celos en un momento como ese.

—Hola, soy Hyungwon, mucho gusto.

—El gusto es mío, Hyungwon, lamento molestar, no me quedaré por mucho tiempo.

—Quédate el tiempo necesario, me da mucho gusto poder ayudar en algo. Esta es mi habitación, si necesitas algo puedes pedírmelo, la cama es grande, supongo que no te molestará compartirla, o si quieres puedo dormir abajo...

That boy is a monster.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora