Guille
Decidí ir a ver a Isa, porque Andrea me llamo para decirme que ella me necesitaba, ella no había explicado más del tema, supuse el porqué de su controversia ella era amigo del español que le había el roto el corazón a mi princesa.
Corté la llamada con Andrea y puse mi auto en marcha y me dirigí hacia su casa, no sé porque no puedo sacar de mi mente que ese idiota le hizo algo, para mí era obvio, y solo quería una excusa para volverle a dar un puñetazo.
Al llegar a su casa, toco el timbre, y nadie abre, decido escribirle un mensaje.
Yo: ¿princesa estoy tocando tu puerta estas?
Se que está en su cuarto, puedo ver la luz encendida, pero no quiero que se sienta presionada a recibirme, sé que cuando Isa necesita espacio, lo mejor es dejarla sola.
Ella ve mi mensaje y se tarda unos segundos en responder.
Princesa: voy.
Espero impaciente en la puerta y ella abre.
Puedo notar en su cara, que ha estado llorando, tiene los ojos rojos e hinchados, entro y cierro la puerta.
— Princesa... ¿qué pasa? —digo limpiando una lagrima que corre por su mejilla. Odio verla así de mal, y más cuando sé que ese idiota español le hizo algo.
Ella se hunde en mi cuello y siento que sus lágrimas mojan mi polera, noto como me tenso y digo
—Dime que ese idiota no te ha hecho nada, porque voy directo a su casa a partirle la cara.
—Solo necesito que me des un abrazo.
Dicho esto, la estrecho en mis brazos, me encanta tenerla abrazada, pero no en esta situación, lo único que quiero es ir a partirle la cara a ese imbécil, conseguir que se largue y consolarla hasta que se enamore de mí, porque había algo que tenía claro, ella no me amaba, pero yo podía enamorarla, dedicar mi vida a ella, a mimarla, a hacerla mía para que olvide sus caricias, pero él había vuelto, y eso me ponía las cosas difíciles, y aunque ahora sabía que había arruinado todo de nuevo con ella, no me gustaba verla así, la amaba, estaba enamorado de ella desde hace demasiado, y prefería verla feliz, aunque eso indicase que estuviese feliz con alguien más, pero si fuese por mí, ojala no fuese con él.
Se queda hundida en mi cuello por unos minutos y luego nos ubicamos en su sillón.
—¿Quieres hablar de ello? — le pregunto sin separarla de mi cuerpo, esto se siente jodidamente bien.
—existe la posibilidad de que este embarazada... De ahí los mareos y mi desmayo.
Yo solo escuche hasta la parte de embarazada. La palabra daba vueltas en mi cabeza.
Embarazada...
Embarazada...
Formaría una familia con él, tendría un pequeño niño, un bebe que compartiría y uniría por siempre su vida con la del hombre que ahora la había lastimado...
—Guille—
—Si sigue, estoy escuchando. —dije mientras acariciaba su pelo
—Él piensa que, si estoy embarazada, mi hijo puede ser tuyo, sabe que pase una semana en tu casa. —dijo sin que sus lágrimas cesaran.
Me aparte de ella, para poder darle mi apoyo.
—Si es que estas embarazada, sabes que yo siempre estaré para ti. —dije mirando sus ojos—quizás no como el padre, pero puedo ser el tío regalón. — dije de todo corazón, sabiendo que no me importaría criar un hijo de Isa, y que en algún futuro me llamara padre, pero estaba seguro de que esto no sería así de fácil, sabía que él estaría ahí, porque había visto como la miraba, sabía que la quería, que quizás solo reacciono mal.
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Más de ti © [+18] #wattys2020 (Completa)
Novela JuvenilSinopsis Que harías si te rompen el corazón y la única persona en la que te puedes refugiarte es un completo extraño. Isabel sufre una decepción amorosa y se resguarda en los brazos de Cesar Grayson ... un millonario mujeriego que llego a Chile de...