Todos en la limusina soltaron una carcajada, incluso el chofer.
Amber: -¡Cameron pero que cosas dices!
Cameron: -¡Las cosas que me haces decir!- estaba muy enojado.
Amber: -Jamás pensé que dirías eso, nunca me lo imaginé- miré a Caro, ella asintió.
Cameron: -¿Te puedes poner la camisa de una buena vez?
Amber: -Claro- me la puse -¿Dónde están mis padres?
Cameron: -Están en el aeropuerto.
Amber: -¡Excelente!
Llegamos al aeropuerto y si, ahí estaban mis padres.
Robert: -Amber Elizabeth Stone huyes de casa, te subes al auto de un desconocido, se lo robas, lo chocas, te vas a un hotel de lesbianas y te haces pasar por una, vienes casi desnuda y arrastras a Caro en todo esto ¡Estoy tan decepcionado de ti!
Amber: -Bueno comparado con las demás cosas que he hecho no deberías estarlo- sonreí fingiendo inocencia.
Nathaly: -No podemos creer que tus locuras hayan llegado hasta este extremo.
Amber: -Bueno pero yo tengo una muy buena razón de por qué no quiero ir a ese internado.
Robert: -La parranda no es una buena razón.
Amber: -No me refiero a eso.
Cameron me miraba curioso, no sabía con qué iba a salir ahora.
Cameron: -¿Y qué es?
Amber: -Cameron me acosa sexualmente.
Cameron: -¡¡Qué!!
Robert: -Amber No estés inventando calumnias.
Amber: -¿Calumnias? ¿Le creen más a este igualado que a mí?
Nathaly: -Sabemos como eres, inventarías cualquier cosa por no ir.
Amber: -Tienen razón pero esto es enserio ¿Verdad Caro?
Caro: -Así es señora, incluso tenemos una prueba de ello.
Amber: -Lo mismo que te ayudó a encontrarnos te hundirá...el teléfono de Caro- le susurré a Cameron.
Caro sacó su teléfono.
**GRABACIÓN**
Cameron: -Me tienes excitado- susurró.
Amber: -¿Qué dijiste? No te escuché
Cameron: -¡¡Que me tienes excitado, maldita sea!!
**FIN DE LA GRABACION**
Robert: -¡Cameron Dallas! ¿Qué es esto?
Cameron: -N-n-no es lo que creen.
Nathaly: -Es tu voz, claro que lo es.
Caro: -Si, y miren la hora que sale en la grabación, es de hace unos minutos.
Amber: -Lo ves papi, tengo mucho miedo de él- dije con voz de niña.
Robert: -No podemos creer lo que has dicho...con el prestigio que tienes se va al suelo.
Cameron: -Les juro que no es cierto, todo fue una trampa.
Amber: -Cameron, enserio estoy asustada- fingí llanto y me hice la desmayada.
Robert: -¡Amber!
Toda la atención se centró en mí. Mis papás y Cameron me rodearon. Caro salió corriendo, era parte de nuestro plan.
Me levantaron del suelo.
Robert: -¿Cómo te sientes?
Amber: -Mal, veo todo borroso.
Cameron: -¡Cuentos!
Amber: -¿Caro estás ahí amiga?
Nathaly: -¡Carolina! ¿Dónde está?
Cameron: -¡Huyó!
Amber: -¿A dónde? Mami, ve a buscarla con Cameron por favor.
Nathaly: -Tiene razón, debemos hallarla... sus padres nos dejaron a cargo.
Cameron y mi madre se fueron a buscar a Caro, como lo supuse, todo me estaba saliendo de acuerdo como lo planeé...hace dos minutos.
Amber: -Papá, necesito ir al baño.
Robert: -Claro, te acompaño.
Amber: -Si, papi.
Nos fuimos al baño, una vez que entré me miré al espejo.
Amber: -Crédulos- sonreí.
Caro: -Demasiado- salió de una caseta. Ambas miramos al espejo y sonreímos.
Amber: -Debemos deshacernos de mi padre antes que mi mamá entre aquí.
Caro: -Entonces, aligérate.
Amber: -Tiraste el celular a la basura como te dije ¿No?
Caro: -Si...claro que lo hice.
Amber: -Bien- me asomé por la puerta del baño, mi padre estaba afuera esperándome, no se fiaba de mí, pero sabía que no era más inteligente que yo- Papi.
Robert: -¿Qué pasa?
Amber: -Tengo un problema.
Robert: -¿Qué pasa, princesa?
Amber: -Me acaba de venir el mes, me manché por completo ¿Me puedes conseguir ya sabes...eso?
Robert: -Claro, no te muevas, ya regreso- se fue. Rodeé mis ojos y volví a entrar.
Amber: -Padres, se ponen tan tontos con las cosas femeninas.
Caro: -Salgamos de aquí- rió.
Corrimos fuera del baño hasta llegar a una puerta del servicio.
Amber: -No nos podemos quedar aqui, nos hallarán.
Caro: -Pero no si somos trabajadoras- señaló unos uniformes del servicio.
Nos pusimos los uniformes y tomamos un par de trapeadores, también nos recogimos el cabello y lo ocultamos en unas gorras. Nos perdimos en el enorme aeropuerto.
Pasaban las horas y nosotras andábamos de fugitivas en el lugar.
Caro: -¡Ahi está tu padre!
Amber: -Hora de actuar- nos acostamos en una banqueta y comenzamos a fingir llanto hasta que mi padre se fue.
Caro: -¿Qué haremos? No tengo mi teléfono y tampoco tenemos dinero para salir de aquí.
Amber: -Tengo una idea.
Nos fuimos hacia un escritorio.
Recepcionista: -¿Qué se les ofrece?
Amber: -Necesitamos un taxi.
Recepcionista: -El servicio de taxis es exclusivo para los clientes del aeropuerto.
Y nosotras andábamos vestidas de empleadas.
Amber: -Maldita recepcionista, mandanos un taxi o te arrepentirás- estaba realmente agitada.
La seguridad llegó de inmediato.
Recepcionista: -Muéstrenle a estas señoritas la salida.
Amber: -Mira, zorra tú no nos dices si nos vamos o no- le di una patada a la mujer.
Caro lanzó una carcajada.
Los de seguridad nos sacaron y nos amenazaron en no volver a entrar. Nos prohibieron la entrada por completo.
Afuera del aeropuerto:
Cameron: -¡Las tengo!- apareció por detrás.
Caro: -Uy que miedo.
Amber: -Si, Cameron nos tienes ¿Qué haremos ahora?- dije sarcástica.
Cameron: -¿Por qué el sarcasmo?
Amber: -¡Por nada! Ya pasó el vuelo.
Cameron: -Sus padres comprarán otro boleto.
Caro: -Bien.
Cameron: -¿Qué les pasa? ¿Por qué se dejaron atrapar? ¿Q-q-qué sucede? ¿Por qué andan vestidas así?
Amber: -Por nada- sonreímos.
Cameron: -Como sea, vengan conmigo- nos tomó de los brazos y llegamos a la puerta.
Seguridad: -Alto ahí.
Cameron: -¿Disculpe?
Seguridad: -No pueden pasar.
Cameron: -¿Cómo? ¿Por qué?
Seguridad: -Usted si, ellas no.
Cameron: -¡¡Qué!!
Seguridad: -Por favor retírense- nos dijo.
Amber: -Con gusto- dimos media vuelta.
Cameron: -¡No! Ellas van a entrar.
Seguridad: -Tienen prohibida la entrada a este aeropuerto, por favor aléjese o lo arresto.
Cameron: -¡Increíble!
Llegaron mis padres.
Nathaly: -¿Qué pasa?
Robert: -¿Dónde te metiste? Ya te traje lo que necesitas.
Cameron: -¿Y aún se lo cree?
Nathaly: -¡Como sea! Van a tomar ese vuelo.
Caro: -No podemos.
Cameron: -Les prohibieron la entrada al aeropuerto.
Nathaly: -¿Por qué?
Seguridad: -Agresión al personal.
Robert: -¡Esto es increíble! ¡Nathaly toma sus maletas y vámonos!
Caro y yo sonreímos.
Amber: -¿A casa?
Robert: -Si.
Nathaly: -No cantes victoria, tenemos un avión privado.
Amber: -¿Aún iré a ese asqueroso internado?
Robert: -Sin duda.
Cameron rió malévolo.
Entramos a la limusina y nos fuimos a casa, fueron a dejar a Caro y luego llegamos a la mansión.
Robert: -Lo primero, cambiarás de habitación, dormirás en una de servicio ya que parece que te gusta tanto.
Amber: -¿Del servicio? ¡Que asco!
Robert: -Si, una que no tenga ventanas. Y Cameron te vigilará toda la noche, mañana en la mañana te vas al internado.
Amber: -¡Que mierda!
Nathaly: -¡Ya basta de ese vocabulario! Vete a tu nueva habitación, Cameron guíala.
Cameron me tomó del brazo y me llevó a una habitación del servicio, ya era de noche, había sido un día terrible, estaba cansada así que me recosté en la cama. Cameron estaba ahí y vigilaba cada uno de mis movimientos. Habían pasado unas tres horas, estaba aburrida y el sueño se me había desvanecido.
Amber: -¿Qué no duermes?
Cameron: -Me da miedo hasta parpadear.
Amber: -Ya pasaron más de tres horas aquí encerrado ¿Hagamos algo divertido no crees?
Cameron: -Para que digas que te acoso sexualmente.
Amber: -¡Es la verdad!
Cameron: -Eso no es cierto.
Amber: -Al menos te excito- reí.
Cameron: -No vuelvas a mencionar eso.
Amber: -¿Sabes qué? Esta ropa me incomoda me la cambiaré... más vale que no te voltees, podría escaparme- dije sarcástica.
Me levanté y me quité la ropa hasta quedar en ropa interior.
Cameron miraba hacia el piso.
Amber: -Tengo hambre ¿Me puedes traer algo de comer?
Cameron tomó un comunicador y pidió comida.
Amber: -Pero que desconfiado- di una carcajada....¿No vas a hablarme?
Cameron: -¿Qué quieres que te diga?
Amber: -Ven a sentarte aquí por lo menos vamos a platicar que me muero de aburrimiento.
Cameron caminó y se sentó en una silla al lado de la cama.
Amber: -No violo, toda acción realizada por mí en la cama es de carácter voluntario y de mutuo acuerdo.
Cameron: -¿Hablaremos de sexo?
Amber: -No...hay algo mejor.
Cameron: -¿Fiestas, alcohol, drogas? Aunque creía que tu tema favorito era el sexo.
Amber: -Pues te equivocaste- me acosté boca arriba y miré al techo- ese no es.
Cameron: -¿Y cuál es?
Amber: -No me tomarás enserio.
Cameron: -¿Pastelería?
Amber: -¡No seas tonto! Aunque no lo creas...me gusta mucho la criminología.
Cameron: -¿Estudiarte a ti misma?- bromeó. Yo lo miré seria- Lo siento, pensé que bromeabas.
Amber: -Pues no, no bromeo, es lo que me gusta pero mis padres quieren que me meta en el mundo de las finanzas.
Cameron: -¿Nunca les has dicho nada?
Amber: -De nada serviría- me senté- ¿Cameron tú que edad tienes?
Cameron: -¿Para qué quieres saberlo?
Amber: -La verdad no te ves anciano y llevas mucha responsabilidad sobre ti. Nada más mírate, eres guardia principal en el mejor reformatorio de Chino Hills y hasta te contratan particularmente.
Cameron: -Tengo 22 años...y soy eso porque mis padres son los directores del internado.
Amber: -Nepotismo, ahora entiendo- me tiré al colchón de espaldas.
Cameron: -Nada de eso- se levantó y se sentó en la cama a la par mía- tuve que ganarme ese trabajo.
Amber: -¿Cómo?
Cameron: -Mis padres no querían que lo hiciera porque pensaban que alguna chica podría convencerme de dejarla salir.
Amber: -¿Y qué hiciste?
Cameron: -Empecé desde abajo a los 15 años, luego les fui demostrando poco a poco que podía hacerlo.
Amber: -¿Y te gusta lo que haces?
Cameron: -Hasta hace unas horas si- ambos reímos.
Amber: -Soy un huracán.
Cameron: -¿Por qué no quieres ir al internado?
Amber: -¿Y lo preguntas? Dormir temprano, comer basura, acatar órdenes- hice cara de asco.
Cameron: -No puedes ir por la vida haciendo lo que quieres, siempre habrán reglas y gente que nos ordene.
Amber: -Lo sé pero...no lo sé....nunca he pensado en la posibilidad de no ser como soy.
Cameron: -¿Y por qué no la piensas?- tomó mi mejilla.
Amber: -¿Enserio te excito?
Cameron: -¡Nunca tomas nada enserio!
Di una carcajada.
Amber: -Sólo estoy jugando, es que...no lo sé...eres...
Cameron: -¿Soy...?
En ese instante llegó la comida, tenía mucha hambre.
Amber: -Cameron ¿Tienes novia?
Cameron: -No tengo tiempo para una.
Amber: -¿Nunca te ha gustado alguna chica en el internado?
Cameron: -Si, pero...no tanto como para sacrificar mi trabajo.
Amber: -¿Cómo se llama?
Cameron: -No puedo decirte, estarás con ella y ella no lo puede saber
Amber: -Sé leer expresiones sabes, y de todos modos me daré cuenta.
Cameron: -Se llama Agustina.
Amber: -¿Agustina? ¿y por qué te gusta?
Cameron: -No lo sé, no sé si me gusta. Es que ella ha sido muy atenta conmigo, se me aparece en todos lados y creo que no sé...que me llama un poco la atención.
Amber: -¿Más que yo?- me levanté y me senté sobre sus piernas.
Cameron: -¿Por qué haces esto?- dijo nervioso.
Amber: -Respóndeme.
Cameron: -¿Estás celosa?
Amber: -Los celos son muestra de inseguridad... jamás dudo de mí misma ni de lo que puedo lograr.
Cameron: -¿Qué quieres lograr?
Amber: -Nada...olvídalo, a ti ya te gusta otra- me quité y me recosté de nuevo, le di la espalda.
Cameron: -P-p-pero dije que tal vez no me gustaba- yo sonreí. Sabía que si yo no le interesaba iba a mostrar indiferencia pero si yo le interesaba iba hacer lo contrario.
Amber: -¿Te gusta o no?- me volteé.
Cameron: -Creo que no- se acercó y se recostó a la par mía.
Amber: -Está bien- me volteé.
Cameron: -¿Y tú?
Amber: -¿Yo qué?
Cameron: -¿Te gusta alguien?
Amber: -Si.
Cameron: -¿Quién?
Amber: -Un cretino que me quiere domar y no puede- lo miré.
Cameron sonrió.
Cameron: -¿Lo conozco?
Amber: -Buenas noches, Dallas- sonreí y cerré mis ojos. Sentí los labios de Cameron en mi mejilla.

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Niña Mal
Fanfic**Primer libro de la Saga de Niñas mal** Las fiestas, la ropa, los chicos, la fama, el dinero, la posición social y todos los demás placeres de los que puedo gozar. A mis cortos 17 años he vivido muchas cosas, nada malas por suerte. Padres millonar...