Niña Mal

37

Amber: -¡Déjame en paz!
Cameron: -Cállate o te va peor.
Cameron me metió en una habitación y me ató las manos.
Cameron: -¿Tú pediste esto?- tomó una caja, la abrió y la dejó caer. De esta salió una serpiente. La serpiente de Stif era muy inofensiva, era del tipo que siempre había tomado, se caracterizaban por no atacar, pero la que salía de la caja era una cobra.
Amber: - Cameron, eso es una cobra ¡Son venenosas!
Cameron: -Si, como tú.
Amber: - Cameron no me hagas esto, yo... yo te juro que todo esto no fue a propósito.
Cameron: -Nada de lo que digas me hará cambiar de opinión.
Amber: -Por favor.
Cameron: -Adiós- dio la vuelta.
Amber: -Espera...
Cameron: -¿Qué?-
Amber: -No me importa. Que me muerda la cobra, que sufra el resto de mi vida, que llore, que pague por todo lo que he hecho. Sólo quiero estar contigo, es todo lo que deseo. Llanto, dolor, tristeza, no me importa pasarlas por ti. Sé que me he equivocado y pagaré cualquier precio por el amor que siento por ti.
Cameron: -¿El qué?- se volteó.
Amber: -Amor- dije cabizbaja.
Cameron: -Osea que tú...
Amber: -Te amo.
La cara de Cameron cambió por completo, se llenó de luz, sus ojos brillaban y una sonrisa se dibujó en su rostro.
Cameron: -¿Hablas enserio?
Amber: -Nunca he hablado tan enserio- una lágrima rodó por mi mejilla.
Cameron se acercó a mí, me haló de la mano y me sacó de la habitación dejando a la serpiente dentro. Me llevó a mi habitación y ahí dentro me abrazó y comenzó a llorar.
Cameron: -Soy un idiota- me miró los brazos, estaban llenos de moretones- Perdóname, por favor perdóname.
Amber: -Si, Cameron, si- lo abracé- ¿Te casarás con Agustina?
Cameron: -No. Todo fue un plan para que fingiera que viviremos juntos.
Amber: -Por favor, no te vuelvas a separar de mí.
Cameron: -No lo haré.
Amber: -¿Dónde están las demás?
Cameron: -Todas las internas están abajo limpiando el desorden.
Amber: -¿Debo hacerlo yo también?
Cameron: -No- sonrió- Tú y yo seremos un poco egoístas esta noche- me besó y me recostó sobre la cama.
Amber: -No, Cameron. No puedo hacer esto ahorita, Agustina y tú acaban de...
Cameron: -Lo siento. Perdóname, enserio.
Amber: -Sólo no hablemos del tema ¿Si?
Cameron: -Si ¿Estás cansada?
Amber: -Mucho.
Cameron: -Duérmete, estaré aquí a la par tuya.
Amber: -¿Dormirás conmigo?
Cameron: -No. Debo ir a vigilar a las internas mientras trabajan, pero tú duérmete.
Amber: - Cameron, perdóname por lo de tu madre, traté de evitarlo pero las cosas me salieron mal.
Cameron: -Está bien. Mi papá me llamó hace una hora, me dijo que mi mamá estaba bien y que sólo fue un susto.
Amber: -Eso espero.
Cameron: -Buenas noches.
Cerré mis ojos y me dormí por completo. Al amanecer, Cameron ya no estaba a mi lado.
Caro: -Estoy muerta de cansancio.
Sol: -Muero de resaca.
Amber: -¿Estaba tan pesado?
Sol: -Mira nada más ¿Dónde estuviste anoche que no nos ayudaste?
Amber: -Ni lo mencionen, yo sufrí más que ustedes.
La puerta se abrió.
Cameron: -Debido a lo de anoche, no tendrán en todo el día. Podrán bajar a comer cuando quieran e ir a cualquier parte del internado que quieran- me sonrió y se fue.
Shar: -Wow ¿Lo vi de buen humor después de lo de anoche?
Caro: -¿Qué hiciste con él? ¿Se reconciliaron?
Amber: -Si, así es.
Luego de unos minutos bajamos a desayunar, todas morían de resaca y cansancio. Agustina me miraba y reía burlándose. Yo le sonreí descaradamente, eso la confundía.
Cameron entró y me saludó con un beso en los labios, a Agustina se le caía la cara. Cameron se sentó con nosotras y comenzamos a desayunar.
Cameron: -¿Cómo va la cruda?
Sol: -Estamos por morir.
Cameron: -Hoy las sacaré de aquí.
Todas: -¿Qué?
Cameron: -Iremos al centro de Chno Hills de compras.
Amber: -¿Es enserio?
Cameron: -Si, les presentaré a unos amigos.
Amber: -¿Amigos?
Cameron: -Así es. Tengo amigos- me dio un beso en la punta de la nariz.
Sol: -¡¡Gracias!! Llevo siete meses encerrada aquí.
Nos levantamos, nos alistamos y salimos en el auto de Cameron. Llegamos al centro de Chino Hills.
Cameron: -Bueno chicas, se me juntan un socan que se van a subir unos amigos- todas rieron- ¿Por qué se ríen?
Amber: -Socar es sinónimo de fajar.
Cameron: -Debo conseguirme un diccionario de morbo.
Se subieron unos amigos de Cameron, muy guapos por cierto. Las cargaron. Íbamos Sol, Caro y Shar en la parte trasera junto con los tres amigos de Cameron y yo adelante por supuesto.
Amber: -¿Dónde vamos?
Cameron: -¿Dónde quieres ir, princesa?
Amber: -A un centro comercial.
Llegamos a un centro comercial y entramos a las tiendas.
Cameron: -Bueno; él es Carter, Jacob y Sam.
Todas saludamos.
Cameron: -¿Van a comprar ropa?
Sol: -Pensé que a los hombres les aburrían comprar ropa.
Cameron: -Bueno, no si nos modelan lencería.
Amber: -¿Ves? Ya estás aprendiendo el morbo.
Sam: -Bueno ¿Van o no?
Caro: -Claro.
Entrábamos y salíamos del probador, les hicimos una pasarela, Cameron siempre obligaba a taparse los ojos a los chicos cuando yo salía.
Luego nos fuimos al cine y vimos una película. Todos nos conocimos muy bien, nos hicimos muy amigos. Especialmente porque todos encontraron una conexión. Sol con Sam, Caro con Jacob y Shar con Carter.
Luego de horas de divertirnos regresamos al internado.
Subimos a la habitación, Cameron se fue a su habitación.
Sol: -Estuvo increíble, me divertí como nunca.
Caro: -Y eso que no tomamos ni una gota de alcohol.
Sol: -Ahora que lo pienso, tienes razón.
Shar: -¿Amber no tienes algo que contarnos?
Caro: -¡Si! Lo de anoche.
Amber: -Está bien, vengan.
Todas nos reunimos en mi cama y les comencé a contar.
Amber: -Ayer Cameron me encerró y me ató a una silla y... lo hizo con Agustina frente a mis ojos.
Shar: -¿Qué?
Sol: -Maldito idiota ¿Y así andas tan amorosa con él?
Amber: -Déjenme terminar.
Caro: -Ellos se quieren, son felices juntos.
Shar: -Pero eso fue una brutalidad.
Amber: -¡Déjenme hablar!
Sol: -¡Pues habla de una vez!
Amber: -Luego me encerró con una cobra en una habitación, la que trajo el idiota homosexual de Paolo. Tuve que decirle que lo amo para que me dejara salir sino ese animal me hubiese matado.
Sol: -¿Entonces sólo lo dijiste para que te soltara?
Amber: -Claro que sí, yo no lo amo, menos después de lo que me hizo.
Caro: -Pensé que lo querrías más si te hacía sufrir.
Amber: -Te equivocas, Caro. Una cosa es que lo extrañe por no tenerlo, pero que me trate como basura me hace aborrecerlo.
Sol: -Y tienes mucha razón yo que tú lo castro.
Amber: -¿Y por qué crees que ando tan amorosa con él? Ése imbécil no tiene idea de lo que le viene. El muy maldito va a pagar por lo que me hizo, me hizo llorar y presenciar la asquerosidad más grande de mi vida, me asustó con la maldita serpiente... bueno, va a llorar lágrimas de sangre por lo que me hizo. Va a suplicarme por hacerlo sufrir tanto, va a saber lo que es dolor, ése infeliz me las va a pagar muy caro y con crecer. Primero debo hacerme la muy amorosa y enamorarlo lo más que pueda, y luego lo haré pagar por todo lo que me hizo anoche. Va a desear no haberme conocido nunca, se los juro.