Amber: -Pensé que me llevarías a algo tipo alcatraz.
Cameron: -Aquí vivo yo, no tenía por que ser una mazmorra. Subirán las maletas, te enseñaré todo el apartamento.
Cameron caminó y yo lo seguí.
Cameron: -La cocina. - dijo señalando a una cocina amplia con una mesada justo en medio de esta.
Amber: -Dicen que en las cocinas le sientes más sabor.
Cameron no me dijo nada y siguió caminando
Cameron: -Esta es tu habitación - dijo serio, todo era rosa, nada lindo para mi gusto - Y por allá está la mía cruzando el pasillo.
Amber: -¿No hay puerta?- Él negó con la cabeza- Alguien se me va a cruzar en la noche... y no me agrada tanto rosa.
Caminé por el pequeño pasillo y llegué a su habitación. Era una habitación grande con una ventana que tenia vista a toda la ciudad, una cama de dos plazas o mas, todo perfectamente decorado con unos tonos leves de beige.
Me lancé a su cama.
Amber: -Tu cama está más cómoda.
Cameron: -Si quieres dormir ahí está bien yo dormiré en tu cama.
Amber: -Que rico se escuchó eso- reí.
Cameron dio media vuelta y se fue.
Amber: -¿Y este qué?- dije a mí misma.
Me levanté y me fui al living, ahí estaba Cameron.
Cameron: -Aquí no hay reglas, puedes hacer lo que quieras- dijo serio.
Amber: -¿Bromeas?
Cameron: -No. Si te doy reglas, las romperás antes que termine de decirlas.
Amber: -Bien.
Cameron: -Si tienes hambre ahí esta la cocina, si tienes sueño ahí esta el dormitorio, si quieres bañarte está el baño.
Amber: -¿Tú que harás?
Cameron: -Iré a bañarme- se fue a la habitación.
Ok, algo le pasaba a este, debía preguntárselo. Corrí tras él.
Amber: -¿Qué te pasa?
Cameron: -A mí nada.
Amber: -¿Por qué estás tan cortante?
Cameron: -Es como soy con las internas, cumplo mi trabajo como guardia y no como un ''amigo'' que tú creías que tenías.
Amber: -Está bien, iré a cenar- me fui.Narra Cameron:
Llegué con Amber a mi apartamento... mas bien a nuestro apartamento. No le impuse reglas porque sabía que de nada serviría imponerle cualquier cosa. Me porté distante con ella, aunque me fue muy difícil, moría por correr donde ella, abrazarla, besarla, tenerla conmigo, pero ella no sentía lo mismo por mí. Sabía que no valía la pena intentarlo porque ella nunca tomaría enserio nada.
Terminé de bañarme y me vestí, bajé a la cocina, ella estaba sentada comiendo unas papás fritas.
Cameron: -¿Terminaste?- ella asintió.
Amber: -¿Qué haremos ahora?
Cameron: -Lo que tú quieras.
Amber: -Bien- se levantó y se fue a la habitación yo me quedé preparándome algo para cenar, me senté y comí, a los minutos apareció Amber cubierta apenas con la pieza interior inferior, mis ojos se abrieron asombrados.
No sé si estaba así por la inmoralidad que estaba haciendo o porque su cuerpo era totalmente perfecto y me había hipnotizado.
Cameron: -¿Que haces así?
Amber: -Lo que yo quiera- dijo tranquila, abrió el refrigerador y sacó el sirope de chocolate, esto me olía mal.
Trataba de esquivar la mirada de su cuerpo pero mis ojos se resistían a ver otro lado.
Amber se acostó sobre la mesa en la que yo estaba y comenzó a dejarse caer encima el sirope con suavidad.
Cameron: -¡No hagas eso! ¡Vístete!
Amber: -¿Es una regla?
Cameron: -No, es una orden.
Amber: -No me quiero vestir.
Cameron: -¿Por qué lo haces?
Amber: -Porque yo quiero- sonrió.
Yo me levanté con mis pensamientos recordándomela desnuda y otro personaje más por allá abajo estaba reventando.
Entré a la habitación y me acosté boca abajo tratando de desvanecer mis pensamientos, a los minutos llegó Amber con un helado, se sentó a la par mía, yo la miré, ella comenzó a darle lamidas tentadoras.
Cameron: -¿Te gusta provocar a los hombres?
Amber: -No, sólo a ti- rió- Te pones gracioso.
Cameron: -No me parece gracioso.
Amber: -Pues lo es...iré a charlar con los vecinos- se fue.
Cameron: -No puedes salir.
Amber: -¿Qué?
Cameron: -Estarás encerrada aquí hasta que te recuperes.
Amber: -¡No estoy enferma! ¡Quiero salir!
Cameron: -Ya es tarde, deberías buscar como dormir.
Amber: -Lo que debes mandar a dormir es lo que tienes allá abajo que lo tienes más despierto y con ganas de parrandear que yo.
Cameron: -Tú no causas nada en mí.
Amber: -¿Ah no?- se lanzó sobre mí y me tiró a la cama. Merodeaba por mis labios y su mano recorría mi pantalón, desabrochó el botón y bajó el cierre, puso su mano en mi zona íntima, esta estaba caliente y muy ''alegre''- ¿Y qué es esto?
Cameron: -Quítate de encima por favor.
Amber: -Admite lo que siente.
Cameron: -No siento nada- me levanté- ve a dormirte.
Amber: -No quieres perderme de vista.
Cameron: -Retírate- ella se fue.
Me lancé a la cama y suspiré, no podía creer todo lo que provocaba en mí, nunca ninguna chica, ni siquiera Agustina podía hacerme sentir esto. Siempre tuve la fuerza para abstenerme de las chicas en el internado que se me ofrecían pero a Amber la deseaba desde siempre, con o sin ropa me incitaba a comérmela enterita.
Luego de unos minutos de que por mi mente recorrían los pensamientos más absurdos de hacerla mía sentí demasiado silencio y eso me asustó. Me levanté y la busqué en su habitación y no estaba, bajé rápido y tampoco estaba, no estaba en ningún lado, miré la puerta esta tenía una nota.
''Te dejo para que termines el trabajo que no me dejas hacer. Si sabes a lo que me refiero '' La puerta estaba abierta, corrí hacia abajo y la busqué en el pasillo, bajé hasta el lobby y al restaurante, ahí estaba tomando unas copas con un tipo.
Amber: -Es un cretino...Mira ahí viene- me señaló.
Cameron: -¿Qué haces aquí?
Amber: -Platicando con mi amigo Jack.
Cameron: -¿Quién es este?
Amber: -Es mi entretenimiento de esta noche- me dijo en el oído.
Cameron: -No tenías permitido salir, regresa ya mismo.
Amber: -Te dije que era un amargado- se tragó lo que quedaba de su copa.
Cameron: -¿Cómo saliste? La puerta estaba cerrada.
Amber: -Cameron, búscate una vida, toma- sirvió un poco de licor en la copa y me la ofreció.
Cameron: -Yo no tomo.
Amber: -¡Entonces báñate!- me lanzó el líquido y salió corriendo con el chico.
Amber: -Corre Jack, corre que nos pega- se burló.
Cameron: -Seguridad, tráiganla.
Los hombres de seguridad la tomaron y la subieron al apartamento, por supuesto ella iba pataleando.
Amber: -¡Eres un idiota, Cameron!
Una vez dentro la soltaron, cerraron la puerta y dos de ellos quedaron afuera para cuidar la puerta.
Cameron: -¿Que no te quedas quieta un minuto?
Amber: -¡¡Estoy aburrida aquí!!
Cameron: -Eso te ganas por portarte mal.
Amber: -Uy si, me carcome la culpa- se burló.
Cameron: -Ahora nos vamos a dormir- la tomé en mis hombros y la llevé a mi cama.
Amber: -¿Qué hacemos aquí?
Cameron: -Por esta noche, dormirás conmigo, no puedo dejarte sola ni un segundo, no te quedas quieta nunca.
Amber: -Ya te vi, picarón. Quieres tener una noche hot conmigo.
Cameron: -No digas tonterías.
Amber: -No me conformo con menos de 25.
Cameron: -¿25 qué?
Amber me guiñó el ojo y bajó la vista a mis pantalones.
Cameron: -¡Deja de pensar en esas cosas!
Amber: -Cuando lo hagas tú.
Cameron: -Yo no pienso en eso.
Amber: -¿Te han dicho que tienes una voz muy sexy?
Cameron: -Duérmete- me acosté a la par de ella y puso mi brazo sobre su cintura para que no se fuera, ella se volteó hacia mi quedando su cara a centímetros de la mía, ella sonreía malévola.
Amber: -¿Aparte de Agustina has tenido novia?
Cameron: -Si.
Amber: -Pobrecita, entiendo por que te dejo.
Cameron: -Ella no me dejó.
Amber: -¿La dejaste? No me digas que descubriste que era un travesti, eso explicaría tu aberración al sexo.
Cameron: -¡Que inmadura eres!
Amber: -Tengo 17.
Cameron: -A veces me dan ganas de arrancarte la cabeza.
Amber: -A mi también me dan ganas de arrancarte la...cabeza- bajó la vista a mis pantalones de nuevo.
Esta chica era increíble, como tenía esa mente para distorsionar cualquier información y volverla a su favor.
Cameron: -Duérmete- cerré mis ojos.
Amber: -¿Cómo era ella?
Cameron: -¿Quién?
Amber: -Tu ex novia.
Cameron: -¿Para qué quieres saber?
Amber: -¿Por qué terminaron?
Cameron: -No puedo contarte mi vida personal.
Amber: -Eres un amargo- se acercó a mí y me abrazó.
Cameron: -¿Por qué te interesa mi vida?
Amber: -Compartamos preguntas, yo te hago una y tu una a mí.
Cameron: -Ya te contesté una, ahora contéstamela tú.
Amber: -He tenido varios pero todos son unos idiotas.
Cameron: -Mejor durmamos.
Amber: -Cameron- se levantó y se sentó sobre mi cintura.
Cameron: -¿Qué haces?
Amber: -Juguemos.
Cameron: -¡¡Que!!
Amber: -Si, al caballito...voltéate y ándame a caballo.
Cameron: -No lo haré.
Amber: -Entonces tendré que hacerlo así.
Amber Comenzó a cabalgar sobre mi cintura, la verdad se miraba muy pervertido.
Cameron: -¡Deja de hacer eso!
Amber: -¿Por qué? ¡Es divertido! ¡Arre!- seguía.
Cameron: -¡Ya basta!
Amber: -No.
La tomé de la cintura y la puse debajo de mi para mantenerla quieta, nuestras respiraciones se juntaron.
Cameron: -Eres una niña muy mala.
Amber: -Y tú quieres serlo.
No podía evitar sentir su presencia, sus labios estaban demasiado cerca, no podía resistirlo, necesitaba besarla o moriría en el instante, nuestros rostros se iban acercando poco a poco...hasta que...
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Niña Mal
Fanfiction**Primer libro de la Saga de Niñas mal** Las fiestas, la ropa, los chicos, la fama, el dinero, la posición social y todos los demás placeres de los que puedo gozar. A mis cortos 17 años he vivido muchas cosas, nada malas por suerte. Padres millonar...