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Caro: -¡¡Que!!
Sol: -Obvio que te gusta porque haces todo eso con él.
Caro: -Sol, a Amber nunca le ha gustado nadie en su vida.
Sol: -Ya entiendo...tienes miedo a...
Amber: -¡¡No lo digas!!
Sol: -O es que ya estás..
Amber: -¡Sol, cállate!
Sol: -Enamorada.
Amber: -¡¡No!! Jamas digas eso, yo no me enamoro ¡Nunca! ¿Comprendes? Esto es sólo un juego, sólo lo necesito para destruirle la vida a Agustina y para poder salir de aquí.
Sol: -Como digas, corazoncito.
Caro: -Debemos bajar, tenemos una práctica de modales.
Amber: -Ash.
Bajamos al gran salón, se me retorcían las tripas de hambre, y peor aún, la bilis se me derramó al ver a Agustina. Cameron entró a los segundos.
Cameron: -Buenas...tardes- me miró.
Amber: -¿Cameron da la clase?
Sol: -Si.
Cameron: -Primero que nada se acerca la gran cena con los empresarios que donan a la institución. Eso significa que deben aprender para las nuevas internas y recordar para las antiguas las reglas del protocolo de eventos. Para eso necesito dos voluntarias. Una nueva interna y una antigua.
Todas levantaron las manos, excepto yo.
Cameron: -Caro y...Agustina-ambas se levantaron y se pararon a la par de Cameron- Ahora, hay reglas básicas de comunicación en eventos sociales. La primera es las reglas de etiqueta en la mesa.
Sol: -¿En la mesa? Mejor en la cama- todas rieron.
Cameron: -Sol, deja de juntarte con Amber- bromeó.
Agustina: -¿Podemos comenzar?
Cameron: -Si- acercó dos sillas- Caro, siéntate- se sentó.
Agustina: -Eso no se hace así.
Cameron: -¿Quién da la clase? ¿Tú o yo?
Amber: -Sóbate que eso dolió.
Agustina: -¿Por qué no le dices nada a ella?
Cameron: -Agustina, por favor. Muéstrale a Caro como se debe sentar.
Agustina: -Primero, no se deja caer como si fueras un saco de papas, te sientas con delicadeza y sin hacer un alboroto.
Amber: -Caro, te estás equivocando, no hagas tanto ruido. Es sentarse no simular a Agustina en las noches con las verduras- si, todos rieron.
Cameron: -Amber, por favor- dijo tragándose la risa.
Agustina: -¿Es todo lo que le dirás?
Cameron: -Continuemos con la clase por favor. Siéntense. Otra cosa, cuando se trata de eventos, hay que recordar que estamos ala vista de la gente y que no hay que concentrarse sólo en meterse los bocados a la boca.
Amber: -O en el caso de Agustina en la entrepierna- risas y más risas.
Agustina: -Esto no te lo permitiré, estúpida- se levantó.
Cameron: -Agustina, siéntate. ¿Podemos seguir con la clase? Mantengan sus hermosos piquitos cerrados, por favor. Sigamos, no se debe hacer señas a las personas del otro extremo de la mesa.
Agustina: -Es lo que Amber menos cumplirá con sus amigas.
Cameron: -Otra cosa, mientras se come no se habla de muertes ni accidentes, ni nada parecido.
Amber: -¿Los fajes van incluídos?- más risas.
Agustina: -¡Cameron haz algo!
Cameron: -Agustina siéntate, llamas más la atención tú que nadie.
Agustina: -¡¡Es que no entiendo porque la proteges!!
Amber: -Porque me ama estupida.
Agustina: -En tus sueños, Cameron es sólo mío.
La puerta se abrió.
Directora: -¿Qué es ese alboroto que se oye hasta en mi oficina?
Cameron: -Nada, madre. Sólo hacemos dinámica la clases ¿No Agustina?
Agustina: -Así es- se sentó disconforme.
Directora: -Bien- se fue.
Cameron: -Sigamos. Si ven que han manchado al que tiene a la par, excúsense por el incidente y ofrezca su servilleta para que se limpie, en vez de hacerlo ustedes, así se evitan equivocadas interpretaciones.
Amber: -¿Ya oíste Agustina? No derramen nada sobre el pantalón de Cameron.
Así duró toda la clase. Cameron no me decía nada pero si regañaba a Agustina cuando hablaba, esto lo estaba disfrutando a montones.
Luego de esa clase tuvimos una practica de Tenis, luego nos dejaron regresar a las habitaciones, Cameron llegó, yo estaba acostada en mi cama.
Cameron: -¿Cómo estás?- me acostó sobre mi sin dejar recaer su peso y me besó.
Amber: -Bien, mejor ahora- sonreí.
Cameron: -Te traje comida, sé que no has comido desde ayer, no sé como sobreviviste en el tenis.
Amber: -Shar me regaló un chocolate.
Cameron: -Toma- me dio una hamburguesa que traía en un empaque.
Amber: -Gracias- me la comí.
Cameron: -Te ves hermosa con la boca llena- me dio un ligero beso en la punta de los labios.
Amber: -¿Quieres hamburguesa de mi boca?
Cameron: -De ti me como lo que sea- sentí la vista de las chicas sobre nosotros.
Amber: -¿Se les perdió algo?
Shar: -Perdón, es que se ven tan lindos.
Caro: -Me da náuseas.
Sol: -Igualmente, comiendo delante de los que tienen hambre.
Caro: -Bajemos a ver alguna película.
Sol: -Todas son de la historia de Londres y cosas así.
Caro: -Es mejor que estar viendo transfusión de saliva y otros líquidos.
Shar: -Que asco.
Las tres salieron.
Cameron: -Si que te aman.
Amber: -Lo sé.
Cameron: -Te traje algo más- me dio un collar que tenia la palabra "LOVE" escrita.
Amber: -Está hermoso ¿Cómo lo conseguiste?
Cameron: -Me le escapé a mi madre mientras tú estaban en tenis y pude comprarlo.
Amber: -Gracias- lo abracé. Cameron me lo puso... el collar.
Cameron: -¿Irás a dormir conmigo esta noche?
Amber: -Esté bien. Dos golpes en la puerta es la señal.
Pasaron las horas, terminamos la cena y nos dirigimos a las habitaciones, Cameron llegó a la revisión.
Cameron: -Duérmanse ya, y tú vámonos- me levanté.
Caro: -Usen protección.
Salimos de la recámara.
Cameron: -Ve a mi habitación, debo revisar la habitación de aquí.
Fui a la habitación de Cameron pero me encontré a Agustina en el camino.
Agustina: -¿Dónde vas?
Amber: -A fajar con Cameron, adiós- reí y entré a la habitación. A los minutos llegó Cameron.
Cameron: -Que raro que estés con ropa.
Amber: -Me encontré a Agustina de camino acá. Le dije que iba a fajar contigo y lo más seguro es que venga con tu madre en unos minutos.
Cameron: -¿Qué y qué vamos a hacer?
Amber: -Lo tengo cubierto- sonó la puerta.
Directora: -Cameron ¡Abreme!
Cameron me miró aterrado, yo le hice señas para que abra. Él abrió, entró la directora con Agustina.
Agustina: -¡Le dije! ¡Le dije que estaría aquí!
Directora: -Cameron , explícame porque está Amber aquí.
Amber: -Agustina, me dijiste que Cameron estaba inconsciente y que no podía respirar pero sólo estaba dormido ¿por qué decías que le pasaba algo?
Agustina: -¿Qué?
Directora: -¿Agustina te dijo que Cameron estaba inconsciente?
Amber: -Si, me la encontré mientras iba a la cocina por un vaso de leche, ella venía saliendo de esta habitación y me dijo que Cameron estaba mal.
Directora: -Agustina.
Agustina: -¡Eso no es cierto!
Directora: -¿Cameron ?
Cameron: -Yo estaba dormido y de la nada Amber me despertó preguntándome si estaba bien.
Directora: -Agustina, a tu habitación, que esto no se repita, igual tú Amber.
Salí junto con Agustina y la directora, entré a mi habitación pero a los minutos llegó Cameron a rescatarme.
Pasaban los días, las semanas y Cameron cada día dormía conmigo en su habitación. Cada día le hacía la vida imposible a Agustina mostrándome con Cameron. Él y yo huíamos de vez en cuando al centro de Chino Hills o simplemente a ver las estrellas. Me sentía tan a gusto con su compañía, llegó el momento que sólo quería estar con él, añoraba los minutos junto a él, y me le pasaba pensando en Cameron los momentos de su ausencia. Él era muy tierno y cariñoso conmigo, nunca nadie me había tratado así.
Pasaron tres meses y yo me encontraba con Cameron a punto de dormir.
Cameron: -Necesito contarte algunas cosas.
Amber: -Dime- lo abrazaba.
Cameron: -Mi madre está enferma- me miró.
Amber: -¿Qué tiene?
Cameron: -Cáncer terminal... sólo le quedan unos meses de vida- unas lagrimas cayeron por sus mejillas
Amber: -¡¡Que!! ¿Es enserio?
Cameron: -Nunca jugaría con algo así, Amber ¿Qué voy a hacer cuando ella se vaya?- lloraba en mi pecho.
Amber: -Ay, Cameron. No sé que decirte. No soy buena en dar aliento.
Cameron: -Sólo tenerte conmigo me da aliento, gracias por estar conmigo y quererme de verdad.
Amber: -Si- dije insegura.
Cameron: -Mi madre me ha pedido una cosa.... quiere que esté con Agustina.
Amber: -¿¡¡Que!!?
Cameron: -Me pidió que le propusiera matrimonio este fin de semana en la cena con los donantes del internado.
Amber: -¿Y qué haras?
Cameron: -Es mi madre...y es su último deseo, no tengo otra más que cumplirle.
Amber: -¿Te vas a casar con Agustina? Arruinarás tu vida.
Cameron: -No tengo alternativa.
Amber: -Entonces...¿Tú y yo?
Cameron: -Esta noche...es la última vez que estaremos juntos.

Niña MalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora