Nota de autor:
¿TeamHarry o TeamV?*
Harry no le importa el comentario cliché de su vida, tampoco le importa estar en el escalón más alto de la Torre, disfrutando de la riqueza que fue cosechada y originaria de otro hombre. Con el pasar de los últimos años, tuvo que aprender a que la vida no es para nada dulce o suave, convertirse en lo que sería el resto de su vida fue la única manera de sobrevivir.Cuando Leah bajó junto con su prometido, Bess estaba esperando sola en la entrada del hotel, llevaba puesta una gabardina café claro, vaqueros flojos y de talle alto, enrollados en la parte de abajo, un par de Converse y medias coloridas notorias, una camisa de botones blanca y su cabello atado en una media coleta, era corto. Su estilo incluso había cambiado. Su mirada, todo en ella.
Harry y Leeah visten un conjunto de pareja Gucci de la colección Cambridge de invierno. Mientras Kim lleva un traje incompleto y su gabardina negra. El mismo asiente educado hacia Bess, en cuanto puede distinguirla. Ella lleva una bufanda colorida en su cuello y una sonrisa leve.
—Buenos días, señor Lee, Señor y Señora —Bess no hace contacto visual con Harry—. Es hora de ir a la Universidad e iniciar.
Bess extiende los cafés hacia los demás, y ella se queda con un té frío y la caja de pastel que tiene en sus mano libre. El recuerdo de ella comiendo aquellas porquerías llenas de grasas, hace a Harry desviar la mirada hacia Kim e iniciar una charla sobre negocios en Alemania. Leeah de su parte, se dedica a caminar y teclear en su móvil con demasiada rapidez, mientras Bess camina hacia su propio auto, justo al lado del chofer personal de Harry y Leeah.
—¿Dónde está Downell? —cuestiona Kim, una vez que casi llegan a los autos. Bess lo observa por encima de hombro.
—V tiene que atender asuntos demasiado temprano los jueves —explica y toma un sorbo de su bebida—. Iremos a al entrada de su sala. Él tiene que haber atendido sus asuntos y apuesto a que preparó la sala para dar inicio a la entrevista con Harry.
—No, no. Quiero hablar hoy —Harry lo dice, Leeah deja de teclear y observa un punto fijo, el corazón le ha dado un salto increíblemente doloroso y poco común. Bess parece tomarlo del modo que es—. La entrevista no está programada para dar inicio este día.
—Lo está, señor —Kim le da un par de toques a su tablet y muestra la pantalla hacia su jefe con tranquilidad—. No debemos de perder tiempo. Hablé en la madrugada con Besshle y resulta que pudimos llegar a acuerdos.
—¿Sin mi consentimiento?
Bess observa hacia otra dirección, la forma en la que Harry lo ha dicho ha sido completamente irritante. Kim Min Go no hace nada más que bloquear el aparato electrónico y acomodar sus gafas, lleva su pared guantes negros.
—Hablamos de esto antes de venir —Kim advierte, es mínimamente perceptible su amenaza, pero Harry llega a recibir muy bien su mensaje—. Además, debemos recordar que esto está bien agendado. Besshle es, prácticamente mi...
—Orientadora, ayudante o secretaria. Como desee llamarme —Bess habla cuando Kim parece buscar la palabra correcta. Al decir eso, Leeah suspira.
—Harry, visitaré un restaurante con algunos viejos amigos. Nos vemos en el almuerzo —es lo único que dice la futura señora Downell, antes de besar los labios del magnate y caminar hacia otra dirección. Ella no está para juegos infantiles, desea un respiro y aborrece los temas de negocios y demás.
—Entonces, iré en mi auto. Nos vemos en menos de diez minutos —Sonríe la fémina, antes de dar media vuelta y abrir la puerta del auto.
El camino hacia la universidad es demasiado corto. Mientras Harry no deja de atender llamadas y Kim también, ambos parecen demasiado absortos en negocios que requieren de su atención. No notan el accidente que atrasa el viaje por media hora, tampoco les importa instalarse en la realidad nuevamente. Últimamente su vida eran los negocios, era la única manera de mantener su puesto y distraer su mente de los alrededores. No lo molesta, es como si finalmente se hubiese acostumbrado a las llamadas a negociantes extranjeros, una vida llena de lujos y una falsa identidad. Es por su esfuerzo que ahora mismo huele a Chanel y lleva el último conjunto Gucci de invierno.
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HIDDEN
Novela JuvenilHarry es un joven que ha sentenciado su vida a un control absoluto por parte de la familia más rica del país. Sólo necesita seguir las reglas del juego y adaptarse, pero nada parece salir bien cuando conoce a su nueva vecina y esta arruina sus plane...