//Ramé// - [2yeon]

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Nayeon

Caminaba directo a la universidad, me había levantado más temprano de lo normal pues mi mejor amiga, Seungyeon, dijo que tenía algo muy importante que decirme y que llegara temprano, así que, aquí me ven, a las 7:45 de la mañana cuando yo usualmente llego rozando las 8:25. Me adentré a la moderna e increíble Universidad de Seúl, claramente internacional y prestigiosa, o eso aparentaba. Obviamente que para estar en este lugar tendrías que ser el hijo gilipollas de un lameculos multimillonario o bien ser pobre y becado.

Yo soy la segunda.

Cuando me adentre de lleno al edificio, empecé a caminar por todo el campus intentando llegar a "nuestro lugar" compartido, no era nada fuera de lo común, era un pequeño espacio del patio trasero , prácticamente abandonado, pero con un frondoso árbol que para nosotras daba una muy confortable sombra durante los fríos días.

Sinceramente no sé qué sería de mi vida sin Seungyeon, ella me ha ayudado bastante a mí y a mi familia incluyendo a mi madre, quien prácticamente la adora y siempre me recuerda que la lleve a casa a cenar. Ella estudia derecho en un grado mayor que yo, es tan inteligente y apasionada que en su primer año ya tenía un trabajo en un bufete de abogados reconocido, también ayudo a mi familia en una de nuestras tantas crisis financieras, que fue cuando el banco quiso quitarle el negocio a mi padre, del cual viven ellos, por algunas deudas insignificantes. Por eso le debemos mucho a Seungyeon.

Digamos que ella tampoco la ha tenido fácil en la vida, claro es millonaria, pero debido a eso sus padres murieron quedando completamente sola a sus 16 años, cuando me contó eso, casi pude sentir cuanto había sufrido, debido a su mirada, en ella solo se reflejaba dolor y nostalgia, arrepentimiento y tristeza. Ese día toco mi corazón como nunca antes alguien lo había hecho, eso nos volvió más cercanas, las dos teníamos problemas, pero también nos teníamos a nosotras.

Creí saber todo sobre ella, hasta hoy, fue por eso que cuando me dijo que tenía que decirme algo importante y desconocido, la intriga y la emoción me ganaron, no dormí mucho pensando en que si lo que me diría sería bueno o malo, tenían presente que era un asunto serio.

Pero de todos modos ya estoy aquí y lo descubriría pronto.

Me senté en aquella banca bajo el árbol y la espere, no fueron muchos minutos después cuando sentí una mano en mi hombro, alertándome.

– ¡Uh! ¡Seungyeon! ¡No me asustes así!

–Lo siento Nayeon –dijo riendo–

– No te perdono –dije cruzando mis brazos y frunciendo mi ceño–

–Sabes que si haces caras te vuelves más vieja –me respondió entre risas–

–No seré más vieja que tú, tienes 24 deberías estar jubilándote...

– ¡Hey! ¡Sigo joven!

– Vamos si eres la más vieja de tu clase...

– Si pero porque tuve que tomarme unos años para volver a la universidad y lo sabes Nabongs –me dijo mientras se sentaba a mi lado sonriente como siempre–

–Si bueno, lo que tú digas ancianita

– Vamos que vas por mi camino –empezó a reír de nuevo–

– ¿¡Disculpa!? ¡Óyeme no! Yo soy joven... apenas tengo 20 añitos –dije mirando mis uñas–

– ¡Va! sigues siendo vieja

–Si yo soy vieja, tú eres un fósil

Comenzamos a reír a carcajadas, así era siempre que estaba con ella, todo dejaba de existir y solo era nuestro mundo, libre de preocupaciones, angustias o problemas, era perfecto, con ella a mi lado y su sonrisa.

–Bueno ancianita, ¿qué era lo que me querías decir? –Su expresión cambió, empezó a jugar con sus dedos, se puso muy nerviosa y tensa –

–Si... sobre eso...

– ¿Es algo malo? -dije con preocupación-

– ¿Que? ¡No! Nono, nono, nada de eso

– ¿Entonces?...

–Veras Nayeon es difícil para mí decirlo... –rasco su nuca como solía hacer cuando se consumía en nervios–

–Seungyeon –le tomé la mano– puedes confiar en mí

–No es eso tampoco...

–Cualquier cosa que me digas no afectara mi perspectiva hacía ti, lo prometo...

– ¿Lo prometes? –asentí–

–Nada cambiara

Después de eso tomo mis dos manos entre las de ellas, se veía asustada y con duda pero dejó escapar un suspiro y tomo valor.

–Im Nayeon

– ¿Si?

–Estoy...enamorada de ti