El Secreto de Estado

Capítulo Dieciséis

El día que entré a la mansión del senador Henderson para rescatar a Lexie, Iñaki se separó de Taison para volver a la base a buscar a Parker, eso era lo que todos sabíamos, pero, al parecer, Iñaki había omitido decirnos una parte muy importante, cuando iba camino a la base se le ocurrió ponerle un rastreador al vehículo en el que andaba Esquivel con su compañero.

_ ¿Entonces podemos ver a donde se mueve el desertor?_ preguntó el coronel. El pelirrojo se limitó a asentir con la cabeza, se dio media vuelta y corrió a la carpa en busca de su laptop. Unos segundos después, ya estaba de vuelta y comenzó a teclear frenéticamente en ella.

_ Descarten a la casa blanca_ empezó a decir Tyler_ La computadora con la que bloquee las cámaras de seguridad era del señor Henderson, la saqué de la maleta de uno de los guardaespaldas que iban a visitarme a toda hora. Son mucho musculo y poco cerebro jamás podrían secuestrar a alguien.

_ Pues ahí es donde esta_ dijo Iñaki.

_ Probablemente papá convocó a una reunión por mi verdadera desaparición_ habló otra vez el niño.

_ ¿Y por qué no nos llamó a nosotros si somos los supuestos encargados de tu rescate?_ pregunto Liam.

_ Porque todo es parte de un plan, señor James, nos hizo creer que Tyler estaba desaparecido cuando él lo tenía encerrado, ahora como podría explicar que en realidad si desapareció_ dijo el coronel mirando al peli azul como si fuera lo más obvio del mundo, que en realidad si lo era.

_ Pon atención, Liam_ dijo Harrington regañando a su hermano.

_ Como sea, yo puedo hacer un programa para unir los datos y saber qué lugar frecuenta más Esquivel_ dijo Liam.

De inmediato Iñaki le pasó la computadora al chico para que hiciera su trabajo. Mientras tanto, Cristian se despedía de nosotros, Parker le dio un número para que estuviera en contacto con nosotros a través de un teléfono de largo alcance cuando pasara la frontera y estuviera en un lugar seguro.

_ Lo encontré_ dijo Liam mirando la computadora, todos nos pusimos detrás de el para ver la pantalla. En ella había un mapa de la ciudad con puntos de diferentes colores señalando ligares específicos.

_ Los lugares que más ha visitado en las últimas semanas han sido la casa blanca, la mansión Henderson y el capitolio_ dijo Liam.

_ Tenemos un ganador_ dijo Lexie sonriendo al saber que vería a su padre pronto.

_ Partiremos al anochecer, vayan a comer algo nos veremos en la fogata en un rato para hacer un plan ¿Iñaki puedes ir con Andrea a recoger algo de leña para el fuego?_ dijo el coronel.

_ Yo iré con él_ dijo Tyler poniéndose de pie.

_ ¿Cómo crees? Eres nuestro invitado_ dijo Harrington.

_ ¿Temen que me pase algo? ¡Por favor! Todos tienen un trabajo aquí, quiero ayudar en algo, vamos cabeza de zanahoria_ dijo Tyler caminando hacia el bosque, a Iñaki no le causó tanta gracia el apodo que le puso el pequeño como a los demás. Mientras caminábamos hacia el comedor en busca de comida, Andrea me alcanzó y llamó mi atención:

_ Oliver, solo quería agradecerte por apoyarme ayer y hoy después de lo que pasó con Taison, sé que eran muy amigos y lamento mucho tu perdida.

_ No hay problema, recuerda que no fue tu culpa, fuiste muy valiente_ dije casi tartamudeando. Ella sonrió ante mi comentario y yo la imité. De repente Lexie apareció y la abrazó por detrás:

_ Muévanse, muero de hambre_ dijo sonriendo, Andrea volteó a verla y continuó su camino hacia el comedor_ ¿acaso interrumpí algo?_ volvió a hablar mi mejor amiga.

_ Nada aun_ dije girándome.

_ Oliv, a veces pienso que tu atractivo es más grande que tu inteligencia_ dijo la rubia caminando en reversa mientras me hablaba, se dio vuelta y salió corriendo hacia el comedor.

Cuando estaba por entrar al comedor escuché como alguien gritaba mi nombre, voltee a ver asustado y vi como Tyler salía del bosque y corría hacia mi dirección mientras se sostenía el brazo en el que le corría un hilo escarlata. Corrí hacia el para apresurar el encuentro y cuando lo tuve frente a mí retiré su pequeña mano del antebrazo dejando a la vista una profunda cortada de tamaño de una manzana:

_ ¡Harrington! ¡Ayuda!_ grité esperando la aparición de mis compañeros_ ¿Qué pasó?_ le pregunté al pequeño que apenas lograba respirar entrecortadamente.

_ Es...es...ESQUIVEL_ gritó frente a mí._ ¡Está con Iñaki, ayúdalo!

Mis ojos se abrieron como platos al pensar en el peligro que corríamos todos con el desertor cerca, justo al mismo tiempo que Harrington apareció detrás de mí, me levanté y salí corriendo hacia el bosque.

Salté varias raíces y troncos hasta visualizar una pila de leña, levanté la vista y Esquivel trataba de apuñalar a Iñaki con un puñal mientras peleaban. En un movimiento ágil Iñaki le golpeó la mano y Esquivel soltó al arma blanca hacia mi dirección, instantáneamente la recogí y al levantarme ambos me miraron sorprendidos, Esquivel trató de acercarse a mí pero Iñaki le hizo una zancadilla y cayó al suelo, me acerque a él y le amarré las manos con unas esposas que el mismo traía en la cintura.

_ Para ser uno de los malos, eres bastante lento_ dijo Iñaki caminando hacia nosotros.

_ Tuviste suerte de que Williams llegara, te hubiera rebanado la garganta_ dijo mirándonos con odio.

_ ¿Qué crees que pensará tu jefe cuando se dé cuenta que heriste a su hijo?_ dije empujándolo para que caminara. Su expresión cambió de inmediato y fue sustituida por el terror.

Al llegar a la base todos nos miraron sorprendidos y al reconocer a nuestro visitante Harrington fue el primero en lanzársele encima:

_ Desgraciado, tu y yo tenemos cosas que arreglar_ dijo agarrando su cabello y levantándole la cabeza para que lo mirara.

_ Es un gusto verte también Dominic, ¿Dónde está la gallina azul de tu hermano? Quisiera saludarlo._ dijo sonriendo macabramente. De inmediato, Harrington le dio un golpe en el estómago haciendo que se Esquivel tropezara y callera de rodillas.

_ ¡Capitán, deténgase!_ dijo el coronel abriéndose paso entre los demás, miró a Esquivel con pena y ordenó que lo lleváramos a su carpa.

Sería una noche larga, con nuevas revelaciones.