Capítulo 8 - Un lugar muy peculiar

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Salimos de la habitación, dejamos el colegio y nos dirigimos al parque. William parecía muy preocupado, entonces intervine haciéndole una pregunta.

- ¿Estas bien?

- Si, no te preocupes. -me dijo William con tono de preocupación. 

En ese momento, llegamos a lo que parecía, la entrada a las alcantarillas. William se agachó, quitó la tapa y empezó a bajar las escaleras de ese lúgubre lugar. Sin pensármelo dos veces, le seguí, bajando por las mismas escaleras. Una vez abajo, nos encontramos cara a cara al lado de tres monopatines y dos patinetes, los cuales no les dirigí mas que una mirada insignificante.

- ¿A donde vamos? -le dije con un tono de intriga.

- Ahora lo verás por ti mismo. -contestó William con decisión

Tuvimos que andar un buen rato hasta llegar a otras escaleras, las cuales al subirlas, conducían a un puente. Llegamos a lo que parecía la entrada a una fábrica, la cual la recibían tres cuerdas que caían desde el techo. William y yo bajamos por esas cuerdas y me quedé unos instantes observando ese "Lobby" tan grande que nos rodeaba. No había mucho que ver, un antiguo ascensor, unas escaleras que daban a una planta inferior y un pasillo muy largo. 

- Por aquí -dijo William con un tono nervioso señalando al ascensor.

Presionó el botón para que el elevador subiera, nos montamos en el, William presionó el botón y comenzamos a descender. ¿Que me iba a encontrar? Desde luego mi cuerpo no poseía miedo, de hecho, estaba con ganas de conocer ese secreto que William pronto me enseñaría, entonces solté una sonrisa malvada a la vez que siniestra y esperé a llegar a nuestro destino.


Código Lyoko : La resurrección del malDonde viven las historias. Descúbrelo ahora