Código Lyoko : La resurrección del mal

Capítulo 13 - Una sorpresa inesperada

- William... ¿Qué es eso? -le pregunté mientras me ponía en posición de alerta.

Algo parecido a una cucaracha o garrapata se encontraba delante nuestra, inmóvil. Era muy rara, tenía una cabeza de color amarillo que poseía un gran símbolo negro, unas patas pequeñas de color gris y algo similar a una lente de color rojo en la parte inferior de su cabeza. William se puso en guardia con su espada y se puso un tanto nervioso.

- No puede ser... Ese... Ese es uno de los monstruos de... XANA. -dijo mientras le temblaban las manos y la voz.

Entonces, sin pensármelo, moví los brazos hacia los lados, los dos látigos hicieron su aparición y pasado 1 segundo, se electrificaron gracias a la carga eléctrica de los dos generadores de mi armadura. Fue entonces cuando la lente del monstruo se iluminó y nos disparó un rayo de energía, con la mala suerte que al estar yo pendiente de que a William no le pasase nada, me dio a mí y del impacto, me tiró al suelo. Siendo sincero, dolía mucho, pero aunque doliese, si te tiran o te caes, te levantas y eso fue lo que hice. Me levanté, corrí hacia el monstruo, cargué uno de mis látigos con energía, le di al monstruo y lo destruí. William bajó la espada y se acercó hacia mí.

- ¿Estás bien? -me preguntó preocupado.

- Si... O eso creo. ¿Por qué te has quedado seco en cuanto lo has visto? -le dije con curiosidad.

- La verdadera pregunta es... ¿Por qué estaba ahí? Se supone que XANA fue destruido en su momento... -se quedó pensando William.

En ese momento, una voz que provenía de alguna parte, habló y me dio un buen susto. Era una voz que podría reconocer fácilmente, la voz de Jeremie.

- ¡William! ¿Qué está pasando? -preguntó.

- ¿Jeremie? Yo... Esto... ¡Que sorpresa! -dijo William bastante preocupado.

- No te hagas el loco William, ahora mismo nos vais a dar una explicación de que está pasando aquí, ¡Rematerialización! -dijo Jeremie con un tono de enfado y nos empezamos a desvirtualizar William y yo.

En cuanto el proceso terminó, aparecí en el escáner de nuevo con la compuerta cerrada, y mientras un sonido de descompresión hacia su aparición, la compuerta se abrió y ahí estaban, Odd, Ulrich y Yumi, entonces les dirigí una mirada siniestra y malvada a la vez.

- Vaya vaya, mira a quien tenemos aquí. -dijo Odd cruzado de brazos.

Salí del escáner sin dejar de mirarles y en un intento de ir caminando hacia el ascensor, Ulrich me cortó el paso poniéndose delante mía.

- No irás a ningún sitio sin darnos una explicación, vamos. -dijo mientras los tres me rodeaban.

William, Ulrich, Odd, Yumi y yo nos metimos en el ascensor y ascendimos hasta el piso -1, hasta la sala del superordenador. En cuanto la puerta interior y la exterior se abrieron, pude observar que ahí estaban, Aelita y Jeremie, también de brazos cruzados esperándonos. Salimos del ascensor los 5 y las dos puertas del ascensor se cerraron.

- Tenéis muchas cosas que explicar. -dijo Jeremie frunciendo el ceño.

- ¿Qué queréis que os explique? ¿Qué le he contado lo de la fábrica, lo de XANA y lo de Lyoko? ¿A caso tu no se lo contaste a nadie Jeremie? ¿A caso cuando encendiste el superordenador por primera vez no se lo contaste a Ulrich? -le replicó William enfadado.

- ¡Eso no tiene nada que ver! ¡Ellos son mis amigos y por eso les conté el secreto! -Jeremie se levantó de la silla y se empezó a acercar a William alzando la voz.

- Pues perdona que te diga genio, él también es mi amigo, ¡Así que no me vengas con sandeces! -William también alzó la voz.

En ese momento me estaba hartando de tanto grito y tuve que intervenir, además, no me gustaban las formas con las que Jeremie hablaba a William. Entonces lo que hice fue, ponerme delante de William por si pasaba cualquier cosa y les dije lo que pensaba :

- Primero, no alcéis la voz, no hace falta hablar a grito limpio para que te hagan caso y segundo, si, William me contó lo del superordenador pero tu Jeremie, has dicho que se lo contaste a ellos porque eran tus amigos, entonces William tenía el mismo derecho que tú a contármelo porque yo soy su amigo.

- ¿Pero tú quién te crees que eres para opinar nada? -Jeremie me pegó un empujón.

En el momento después de retroceder, me acerqué a Jeremie a paso ligero, le agarré de la camiseta por la zona del pecho y le empujé contra la pared.

- Ni se te ocurra volver a tocarme. -le dije con un tono de enfado mientras le miraba fijamente a los ojos.

Jeremie quitó mis manos de su camiseta y se fue al superordenador directo. Sabía lo que iba a hacer por su expresión, entonces inmóvil le dije :

- ¿Vas a volver al pasado? -le dije con una mirada maléfica.

- ¿C-Como sabes tú lo de la vuelta al pasado? -me preguntó Jeremie preocupado.

- En cuanto William y yo llegamos a la fábrica, como él no sabía cómo programar el superordenador para realizar la virtualización, me puse a investigar por mi cuenta como se activaba el programa. En mi transcurso de investigación, encontré un programa llamado "vuelta al pasado" el cual le borra la memoria del momento vivido a una persona a menos de que la incluyas en las excepciones del mismo para que no se vea afectado. Lo modifiqué para William y para mí y de hecho, encripté el programa para que no hubieran más modificaciones sin antes superar el cortafuegos del propio superordenador.

- Esto... ¿Versión para tontos? -dijo Odd mientras se rascaba la cabeza.

- Lo que esta persona de aquí ha hecho, es modificar la vuelta al pasado para que no les afecte ni a él ni a William, y lo ha protegido para que nadie salvo el pueda entrar. -dijo Jeremie preocupado.

- Exacto, ah Jeremie... No te preocupes por el secreto de la fábrica, no se lo diré a nadie, no soy un bocazas como lo son muchas personas. William, ¿nos vamos? -le dirigí la pregunta a William.

- Si, vámonos. -me contestó con una sonrisa en la cara.

Entonces William y yo, nos metimos en el ascensor, les miré con la sonrisa maléfica y volvimos al colegio una vez terminado nuestro quehacer en la fábrica.