diez.

2K 343 275
                                    

-¡Es el día! ¡Es el día!

Jaebumie estaba dando vueltas y saltos por el apartamento muy emocionado y contento. Ya había llegado el día de encontrarnos con Jaebum, algo que nunca creí que podría llegar a suceder pero que hoy mismo se iba a cumplir.

Jaebum estaba muy inquieto y ansioso, deseando de que llegase la hora para poder irnos y llegar al lugar donde habíamos quedado con ese chico. Por mi parte, no estaba tan emocionado, pero sí un poco nervioso. Iba a ser muy raro presentarme ante él con su hermano gemelo androide, porque este tipo de cosas no ocurrían diariamente o con frecuencia. Aunque me calmaba bastante el saber que no tenía ningún problema con que yo tuviese al androide que era idéntico a él.

-Sí, ya sé que hoy es el día. ¿Puedes calmarte?

Ya me estaba cansando un poquito que estuviese de un lado para el otro como si fuese el mejor día de su vida.

-¡Tienes que entender mi felicidad, Youngjae! -paró enfrente de mí y agarró mis hombros.
-¡Y la entiendo! Pero tampoco es para tanto. -rodé los ojos.
-Para ti no, pero para mí significa mucho. -replicó.
-Parece que lo quieres más a él que a mí. -hice un puchero y me crucé de brazos.

La sonrisa tan grande que tenía en su rostro se apagó y me miró con seriedad.

-No digas eso, a la única persona que amo es a ti.

Sus brazos rodearon mi cuerpo y me abrazó.

-Nadie puede estar por encima de ti, es imposible.

Sonreí disimuladamente por su respuesta y le devolví el abrazo. Tenía muy claro que él solo me amaba a mí, pero estaba tan pesado con Jaebum que necesité un poco de atención.

Besé su mejilla antes de deshacer el abrazo y él me sonrió.

-Ponte guapo, en poco tiempo nos vamos.

...

Y ese poco tiempo pasó realmente rápido. Por lo que ahora estábamos llegando a la cafetería donde nos encontraríamos con el chico que tanto deseaba ver mi androide.

Mientras más cerca estábamos, más deseaba que todo saliese bien y que fuese un chico agradable, porque la impresión que me dio en su directo de Instagram, no fue tan buena. No me gustaban las personas antipáticas, poco pacientes y desinteresadas. Y por lo que pude apreciar en ese directo, él era ese tipo de persona. Así que no tenía ni idea de cómo íbamos a llevarnos.

Nos quedaba demasiado poco para llegar al lugar, incluso lo podíamos ver de frente. Mi corazón empezó a latir con rapidez y más aún cuando mi amigo habló.

-Está allí. -dijo mientras miraba al frente con una sonrisa.

Volví a fijarme, pero no le vi. Fruncí el ceño e iba a preguntarle que dónde estaba el chico, hasta que apareció de imprevisto frente a nosotros.

Los ojos del chico fueron directos hacia mi androide y se quedó atónito al verle. Lo comprendía bastante bien, porque si a mí me hubiese pasado habría reaccionado igual.

Se quedaron quietos mirándose con detenimiento, todavía no saliendo del asombro. Hasta que mi amigo se acercó a su gemelo y le abrazó de una manera muy inesperada, aunque el abrazo fue correspondido.

Yo me quedé a un lado mientras hacía disimuladamente una foto, porque este recuerdo debía quedar para siempre guardado.

Cuando ambos se separaron y se dirigieron algunas palabras, Jaebum se percató de mi presencia e hizo una reverencia.

-Perdón por no haberte saludado. Ya sabes, soy Im Jaebum. -sonrió. -Encantado de conocerte.
-Choi Youngjae. -devolví el educado gesto. -Encantado.

Sorpresa inesperada [2Jae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora