final.

2K 310 142
                                    

Al volver ambos del mini viaje, el cual había sido genial, entramos en mi apartamento porque Jaebum decía que no le apetecía irse tan pronto al suyo. Quería estar un rato más conmigo para luego por la noche marcharse, y claramente yo no tenía problema con eso, estaba encantado de que él quisiese quedarse más tiempo a mi lado, por lo que acepté.

Al llegar a mi habitación y abrir la puerta para entrar y soltar mi pequeña maleta, me quedé perplejo al ver lo que había dentro de esta.

No, no podía ser esto verdad, era imposible. Debía tratarse de mi imaginación jugando con mis sentimientos porque no me lo podía creer.

Jaebum llegó a mi lado y su expresión fue la misma que la mía, tampoco podía creerlo. Y es que era normal que ambos reaccionásemos así, porque en ningún momento nos habríamos esperado esto.

¿Qué hacía Jaebumie en mi habitación? ¿Cómo había llegado hasta aquí si su tiempo finalizó hace meses? ¿BamBam lo había comprado de nuevo? ¿Acaso eso se podía hacer?

Antes de poder formular alguna de mis preguntas, acorté los pocos pasos de distancia que nos separaban y le abracé con fuerza. Nunca creí que iba a poder hacerlo de nuevo.

Él me correspondió y me sentí igual de bien que hacía unos meses atrás donde cada día lo tenía junto a mí siempre haciéndome compañía.

Después de unos minutos donde no me despegaba de su cuerpo, él tuvo que hacer un pequeño esfuerzo para que me separase. Luego de eso, Jaebum se acercó a él y también le dio un abrazo. El suyo duró mucho menos, yo era más intenso.

-¿Q-Qué haces aquí?

No iba a preocuparme por cómo había entrado en mi apartamento, pero sí necesitaba saber el por qué estaba de vuelta aquí.

-Cuando los androides y sus dueños tienen una promesa pendiente o los androides tienen un deseo muy grande que quieren que sus dueños cumplan, vuelven cuando eso está a punto de cumplirse o se ha cumplido. No he venido para quedarme, eso no es posible, pero sí he venido para ver mi deseo haciéndose realidad.

La sorpresa llegó una vez más a mi rostro, ¿en serio los androides podían volver por eso? Era increíble.

-¿Por qué nunca me lo dijiste? -le reclamé.
-Quería darte una pequeña sorpresa. -aclaró.

Y vaya que sí lo fue, incluso la mejor en comparación con todas las que tuve cuando era más pequeño.

-Estoy muy feliz de que estés aquí. -sonreí.
-Yo también, pero me tengo que ir en breve. -avisó. -Mi deseo... ¿Recuerdas cuál es?

Claro que lo recordaba, cada vez que tuvo oportunidad me repitió que deseaba que estuviese con Jaebum, que él era mi hombre ideal y que no me iba a arrepentir si acababa siendo su novio. Y bueno, debía reconocer que tuvo toda la razón, Jaebum era el chico que quería en mi vida. Él me hacía sentir completamente querido y me amaba con total sinceridad. Gracias a él era más feliz y me alegraba demasiado haberle conocido, fue una de las mejores cosas que me pudieron pasar.

-Sí, lo recuerdo muy bien. -asentí.

Jaebumie pasó su vista de mí a Jaebum y luego volvió a mirarme. Sus labios se estiraron y curvaron para mostrar una brillante sonrisa llena de ilusión. El hecho de saber que Jaebum y yo teníamos algo especial lo llenaba de alegría, él sabía que estando a su lado iba a estar bien.

-Entonces, si estoy aquí es porque ya sois novios, ¿verdad? -preguntó con esperanza.

Antes de poder responder, Jaebum se adelantó.

-Bueno, todavía no somos novios, pero la verdad es que tenía intención de pedírselo muy pronto. -confesó.

Agaché la mirada al escuchar lo que acababa de decir y sonreí disimuladamente.

Sorpresa inesperada [2Jae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora