Ext II: ¿Dejarte ir?

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2 años después de la partida de Yoongi

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2 años después de la partida de Yoongi.

Seokjin se encontraba en su oficina tratando de poder concentrarse en su trabajo.

Pero no podía, ahí estaba el recuerdo de su pequeño Yoongi. No había mensajes, no había llamadas...

¿Me olvido?

Las veces que Seokjin lo contactaba era rechazado.

¿Soy una molestia?

Trataba de sobrecargarse de trabajo para distraerse pero no podía... Cada pequeña cosa lo hacía pensar en Yoongi.

¿Es hora de dejarte ir?

Su pecho dolió de solo pensar en eso. Suspiro y decidió darse un respiro.

~ ♡ ~

Estaba frente a la barra de el bar que solía frecuentar. Viendo a la nada.

—¡Amigo! ¿Esperaste mucho?— Pregunto un dulce chico bajito.

—Jimin, tanto tiempo.— Seokjin abrazo a su pequeño amigo.

Ambos tomaron asiento y ordenaron nuevas bebidas.

—¿Por qué ese deseo de verme tan de pronto?— Pregunto él más pequeño.

Seokjin le sonrió tristemente.

—¿Esta todo bien?— Pregunto Jimin preocupado.

—Ya no sé... Es sólo que lo extraño mucho, ¿qué debería hacer?

Jimin sabía un poco de aquella historia.

—Todo va a estar bien, él volverá pronto.— Jimin trato de animarlo.

—El rechaza mis llamadas, no contesta mis cartas, incluso en navidad, año nuevo y nuestros cumpleaños no hubo respuesta... ¿Me olvidó?

Jimin ya no sabía que más palabras de aliento darle a su amigo.

—¿Debería dejarlo ir? Es así ¿No?

Lagrimas recorrieron sus mejillas, no soportaba la idea de que Yoongi ya no lo quisiera.

—¿A caso nunca podré estar con él?

Jimin no dijo nada, no sabía de que manera consolar a su amigo.

—Lo siento Jinnie— Susurro Jimin mientras lo abrazaba y Seokjin sollozaba.

•┈୨♡୧┈•

—¿Seguro no quieres que te lleve a tu casa?

—No, prefiero caminar, estoy mejor en verdad.

Jimin no estaba muy seguro pero no dijo nada más.

—Nos vemos luego, ve con cuidado por favor.

—Tú igual Jimin, gracias por venir.

Jimin arranco su auto y Seokjin abandono el lugar hasta perderlo de vista.

Camino por las iluminadas calles de Seoul, era una noche fría y el cielo estaba despejado.

¿Debo dejarte ir?

—Hyung, ¿estás bien?— Dijo un pequeño niño jalando el abrigo de Seokjin para llamar su atención.

—Oh pequeño, ¿estás solo? ¿y tus padres?— Dijo Seokjin secando sus lagrimas y sorbiendo su nariz mientras flexionaba sus rodillas para estar a la altura del niño.

—Hyung, yo te pregunté primero, ¿Estás bien?

Seokjin sonrió y negó con la cabeza.

El niño hizo un puchero de tristeza.

—¿Te duele la pancita hyung?

—No, me duele aquí.— Seokjin toco su corazón.

El niño miro confundido pero no dijo nada.

—También duele ahí cuando pienso en papá, mamá dijo que fue al cielo.— Dijo con inocencia él pequeño niño.

Seokjin acarició la cabeza del pequeño.

—¡Oh hyung! ¿Extrañas a alguien?

—Así es pequeño...

—¿También se fue al cielo?— Pregunto con sorpresa él niño.

—No, pero es un ángel.

—Mi mamá dice que papá es un ángel que nos cuida desde él cielo.

—Así es pequeño, así que pórtate bien y estudia mucho, ¿sí?

—¡Sí! Pero entonces... ¿Por qué lo extrañas?

Seokjin no sabía que decir, ¿cómo hablaba de amor con un niño de 5 años?

—Ahh... Yo, es que él es especial y creo que me olvidó.

Como dolía decirlo.

—¿Lo amas?

Seokjin miró sorprendido al niño.

—Si lo amas no dudes de él hyung, mamá dice que cuando amas a alguien debes confiar siempre.

—¡Binnie aquí estás!— Grito una mujer llorando abrazando al pequeño niño.

—¡Mami!— Grito riendo él niño.

—Gracias, encontraste a mi hijo.— Decía la mujer mientras hacia reverencias a Seokjin.

—No, su hijo me encontró a mi, gracias pequeño.— Seokjin acaricio los cabellos del niño y se despidió.

Salió corriendo a un lugar dónde aún podía sentir la presencia de Yoongi.

Llego al mirador donde salió por primavera vez con Yoongi. Recuperando la respiración observo las luces de la ciudad.

—¡Yoongi... No importa cuanto tardes yo te voy a esperar, yo no te voy a olvidar incluso si tu lo haces!— Grito a todo pulmón viendo como salía humo de su boca por el frío.

Miro al cielo y sonrió.

Yo te voy a esperar... Pero por favor ya no tardes... No sabes cuanto te extraño...

... Simplemente yo no puedo dejarte ir.

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