La vida de Amelia siempre fue muy normal, hasta que aparecieron chicos en su vida, era muy enamoradiza, había sufrido mucho por amor a sus 18 tomo una decisión y cinco años después pudo cumplir su deseo, viajar por el mundo... el amor es como el des...
- Yoongi... - exclamo la chica separando su rostro de aquel perfecto beso.
- Amelia - dijo el aun sintiendo el sabor de los labios de la muchacha.
- No podemos hacer esto Yoongi, yo me iré, yo... no quiero lastimarte, tu lo dijiste ya haz pasado muchos malos ratos por este, tipo de cosas, no me gustaría ser la que provoque mas aun - el chico se recostó en la arena y observo le cielo.
- ¿Porque todos creen que pueden decidir quien me lastima? - dijo serio y con un poco de melancolía.
- ¿Todos? - la chica solo se puso un poco triste y siguió observando las estrellas - ¿Yoongi tu no tienes miedo de sufrir por amor?, yo me iré no estaré para siempre, y seria muy malo que nosotros, no solo tu también yo, sintiéramos algo mas fuerte seria doloroso para ambos.
- Basta Amelia... no es necesario que sigas, yo lo siento fue solo un impulso, eres una chica hermosa, simpática, no se fue un impulso ya te dije - dijo mostrando una sonrisa a la chica - pero no puedes negar que te gusto - puso una sonrisa coqueta, la chica comenzó a reír y el comenzó a hacerle cosquillas.
- No Yoongi, no por favor soy muy cosquillosa - reía y rodaba en la arena a causa de las cosquillas el se detuvo y se puso de pie.
- ¿Entonces que?, me gustas te gusto pero no habrá nada entre nosotros aaaa - suspiro con una poco de tristeza en su rostro - yo sabia que no tenia que volver a creer en el amor - dijo poniendo sus manos en su rostro de forma muy graciosa simulando que lloraba, como lo haría un niño pequeño
- Yoongi eres muy guapo, encontraras a una chica que te quiera, y que bueno que ya creas en el amor eso es... muy dulce, vamos ayúdame a pararme, deberíamos irnos - estiro sus brazos.
- Si fueras mi novia te ayudaría pero... - alzo ambas manos, la chica se paro, el comenzó a correr ya que ella trataba de darle un golpe.
- En algún momento te atrapare Min Yoongi - gritaba ya que el chico se encontraba muy lejos de ser atrapado, Amelia tropezó cayendo sobre la arena, su boca estaba llena de ella, Yoongi se asusto cuando vio que ya no lo seguía y estaba en el suelo, volvió corriendo y se acerco.
- Amelia estas bien - ella levanto su rostro escupiendo la arena, el trato de aguantar la risa pero no lo logro - ven te ayudo a pararte - dijo riendo al mismo tiempo - ella solo escupía arena y miraba con enojo a Yoongi.
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- ¿Que tal un beso ahora mesero? - dijo con el ceño fruncido.
- Enserio - dijo abrazándola por la cintura.
- Eres un tonto Min Yoongi - comenzó a dar pequeños golpes de puño en el pecho del chico.
Cuando se detuvo el solo la observaba con una sonrisa enorme en su rostro, comenzó suavemente a sacudir su rostro y cabello, había quedado realmente sucia con la arena.
- Bien, ahora si puede que nos dejen subir a un taxi, vamos - tomo la mano de Amelia y comenzaron a caminar hacia a carretera donde no paraban de pasar vehículos - Taxi.
Ambos subieron al taxi y Yoongi le dio las indicaciones al conductor, Amelia apoyo su cabeza en el pecho de Yoongi y el comenzó a dar pequeñas caricias alrededor de su cuello, hombro y hasta sus orejas, provocando escalofríos mas de una vez en el cuerpo de la chica, ella intentaba que el no las notara pero para su mala suerte sus piernas tiritaban cada vez que el movía su mano de arriba a abajo recorriendo su cuello.
- ¿Tienes frió? - dijo tomando la barbilla de Amelia, haciendo que sus ojos quedaran a la misma altura.
- Un poco - pego su vista en los labios de Yoongi y solo lamió un poco sus labios - pero no te preocupes el viaje no es muy largo - ambos se quedaron así por un rato solo se miraban y reían silenciosamente.
Después de un rato el taxi paro frente al hotel de Amelia, ambos jóvenes se bajaron y se despidieron cordialmente del conductor.
- Eso estuvo muy loco ¿no? - dijo ella tambaleándose un poco aun y tratando de poner sus pies de puntitas.
- Estuvo mas que loco, fue... bochornoso, bailas como una profesional y yo pues... solo bailo - ambos rieron.
- Ey lo haces bien, eres un mentiroso habías dicho que prácticamente eras un maniquí y lo haces muy bien... - se pauso y miro el suelo - ¿Como te iras a tu casa? ya es tarde puede ser peligroso, hay un sofá en mi habitación si quieres... - fue interrumpida.
- Creo que eso no seria nada productivo para evitar sufrimiento Amelia - rió burlescamente, la chica se sonrojo recordando su profunda conversación de la playa.
- Okey, te doy la razón esta vez - acompaño en la risa a Yoongi con un poco de vergüenza y arrepentimiento por haber invitado a Yoongi a "dormir con ella" - iré a dormir, fue un largo día, descansa ¿amigo? - dijo apuntando al joven el asintió con sus labios apretado - ve con cuidado, y directo a casa.
- ¿Es una orden? - se acerco a Amelia - porque si lo es no la cumpliré, recuerda que soy un chico problemático... - se acerco aun mas a ella quedando apenas treinta centímetros de distancia entre ambos - Adiós americana - se acerco a su rostro y le dejo un cálido beso y la mejilla cerca de la comisura de sus labios... - descansa.
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- Adiós - Amelia se giro en su sitio y comenzó a encaminarse en dirección a la puerta del hotel.
Estaba con su corazón a mil, no podía creer lo que había pasado, había rechazado al chico mas lindo de todo el mundo, al mas dulce, al mas guapo estaba en cierto grado arrepentida, pero en el fondo sabia que era lo correcto, en esos días logro tener cierto aprecio por el y cuando ella tuviera que marcharse para continuar sus viajes el quedaría a la deriva, tenia que ser honesta con ella misma no dejaría sus viajes por un chico al que apenas conocía, sabia que si seguía por aquel camino podría enamorarse de el pero no quería, no podía.
Avanzo hasta llegar al ascensor y no había notado que alguien la observaba desde la recepción, Jungkook.
- Te gusta - dijo con una risa enorme en su cara, tan enorme que sus blancos dientes se veían por completo, Amelia rodó sus ojos y rió negando con su cabeza, el ascensor se cerro.
La chica llego a su habitación se quito toda su ropa que aun seguía un poco sucia con arena y tomo una larga ducha, había sido un día lleno de emociones y lindos momentos, necesitaba descansar, durmió y probablemente soñó con el guapo chico que la había besado esa noche...
