El timbre de mi teléfono anunciando la alarma me despertó, ví la hora y me pregunte por qué razón tenía que levantarme tan temprano.
Recordé que tenía que encontrarme con la rectora sobre el asunto de la materia que faltaba, carajo, no puedo creerlo, tratando de evitar la materia que me hacía dormir termine encerrado en la misma situación.
Me levanté aturdido y me dirigí a la ducha, el agua fría borro cualquier rastro de sueño que quedará en mi cuerpo.
Salí del baño y me vestí con lo primero que encontré, unos jeans y una sudadera de capucha.
Salí del departamento y llegando a la planta baja me encontré con Don José, un amable señor mayor que era el conserje del edificio.
-Buenos días Don José- Saludé, Don José levantó la vista de su periódico y me sonrió.
-Joven Mike, buenos días- Saco algo debajo de su mesa y me lo tendió-Ayer no lo ví llegar por lo que no le dí su correspondencia
Lo tomé- Muchas gracias Señor José- Salí del edificio hacia el estacionamiento, subí al auto y lance la correspondencia al asiento trasero.
Salí a prisa encaminandome a la universidad, Teddy Picker sonaba en el estéreo acompañando mi camino, hasta que la llamada entrante de mi representante pausa la música.
-Ahora que- respondo
-Pensé que te habrías dormido, por eso llamé
Hice un sonido de indignación-¿Me crees capaz?
Jacob hace un sonido divertido, se que debe estar negando con la cabeza- Bueno, solo quería saber si ibas camino a la escuela.
-Ya voy señor desconfiado- Me burlé
Jacob algunas veces puede ser bastante odioso, pero se preocupa por mi y mi carrera, he llegado a considerarlo como un padre, aunque solo me lleve 6 años de diferencia.
Corto la llamada cuando llego al estacionamiento de la universidad, me estaciono en el lugar común donde lo hago cuando vengo a clases.
Al bajar del auto atraigo las miradas de las personas que se encuentran llegando al igual que yo a la escuela a altas horas de la madrugada.
Me encamino a prisa a la oficina de la rectora, la secretaria ya se encuentra ahí en su escritorio, a pesar de que es muy temprano, Jesús, ¿siquiera irá a su casa?
-Hola Anita, buenos días- Anita me mira y se sonroja como siempre lo hace
-Hola joven Mike, buenos días- Se arregla sus lentes en su rostro- La rectora ya te está esperando
Toco la puerta, escucho un adelante y abro adentrándome a la oficina. La rectora está sentada detrás de su escritorio con su típica sonrisa amable en el rostro, como ya mencioné anteriormente, está mujer se comporta de manera extraña cuando me ve, demasiado amable, incomodo.
-Mike, gracias por venir- Cruza sus piernas- Sientate muchacho, tenemos mucho de que hablar
Me siento en la silla frente al escritorio, y miro alrededor- Vine porque Jacob me pidió que viniera
-Oh si, verás no has cursado Literatura- Pone cara de pena falsa- Eso podría atrasar tu graduación muchacho
-Nadie me dijo que era obligatorio- Me defiendo
Siempre trataba de evitar la materia, no era de mis favoritas, era una materia muy aburrida.
-Bueno, tal vez debiste leer más tu plan de estudio- Rie falsamente
-Me dijo sobre un tutor
-Oh si, podemos coordinar tutorías- abre su laptop y comienza a ver algunas cosas- Por lo menos tres veces por semana, por dos horas
Jesús
-Rectora, como usted sabe, trabajo y cuento con muy poco tiempo- No es mentira, realmente no tengo mucho tiempo libre, comúnmente me llaman dos días antes de grabar y tengo que estar allí a la hora y dia que se necesita
-No es algo que se pueda negociar- Habla seria- Te llevaras muy con tu tutor
-¿Puedo negociar los horarios?
-Tendrías que ponerte de acuerdo con tu tutor- Toma unas hojas y me las tiende- Ahí están los horarios y los libros que vas a necesitar, te verá siempre en la biblioteca
Tomo las hojas y observo, la primera tutoría es el día de hoy, dentro de...
2 horas, fantástico
-Está bien, gracias- Sin darle tiempo para decir más salgo de la oficina
Me dirijo hacia la cafetería a desayunar, el levantarme tan temprano ha impedido que comiera algo, este cuerpo no se mantiene solo.
Me siento en una de las mesas a comer mi desayuno, un sándwich de pollo con jugo de naranja. Puedo sentir las miradas en mi espalda, todos en la escuela me conocen y saben lo que hago.
Sí, TODOS
No excluyo a nadie, inclusive el personal de la escuela, todos lo saben
¿Me incomoda?
Para nada, es satisfactorio ver a los que perjuran no ver porno, reconocerme por ello.
Me quedo ahí un rato hasta que ya es hora de la tutoría, me pongo de pie y me dirijo a la biblioteca.
Cuando entro, el silencio reconfortante me saluda, me dirijo a la zona de estudios y algunas mesas están ocupadas, recuerdo que la rectora nunca me dijo quién era mi tutor, hasta que veo a una mujer que hace señas hacia mí.
Era rubia y traía su cabello atado en una cola de caballo, me acerqué a la zona donde estaba sentada, tenia unos bonitos ojos azules y una nariz respingona. Era de complexión delgada, su ropa deportiva me decía que ese cuerpo era gracias al ejercicio.
A pesar de que se notaba que acababa de hacer ejercicio, no olía mal, para nada. Al contrario, me parece que huele muy bien, como a vainilla, delicioso...
-¿Vas a quedarte ahí parado viéndome como un raro?- Su voz... esa voz ¿Dónde la he oído antes? La miro con el ceño fruncido y ella me responde igual.
Al parecer, a alguien no le agrado.
Me siento frente a ella y le sonrío- Soy...
-No hace falta que me digas quien eres Marvin Jones- No demuestra ninguna emoción y eso me confunde- Toda la maldita escuela sabe quién eres, no necesitas presentarte
-¿Y tú cómo te llamas?- Le pregunto amistoso
-¿Importa? - Alza una ceja- Para mañana necesito que consigas los libros de la lista, no hay ningún problema ¿Verdad?
-Para nada
-Me interesa que empecemos lo más pronto posible- Abre un libro y me lo enseña- Necesito que leas este tema y hagas una síntesis.
-¿Tan pronto?- Frunzo el ceño molesto, quien se cree
-Sí, y si no te gusta siempre puedes recursar la materia- Cierra su libro de golpe, recoge sus cosas poniéndose de pie y sale de la biblioteca, dejándome como estúpido sentado en medio de la biblioteca.
¿Qué demonios?
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Porn Star
أدب المراهقين"Finges no conocerme, pero el historial eliminado religiosamente y las pestañas ocultas de tu computadora dicen lo contrario. Te horrorizas cada vez que escuchas la palabra PORNO en público, pero en tu cuarto gimes mientras me ves follando a una muj...