Alexandra, una vampira en una manada.
Se resignó a su vida permaneciendo alejada y callada.
Hasta que cosas cambian inexplicablemente.
Su hermana asesinada, su hermano vuelve, a quien conoce desde pequeña se transforma.
Todo cambia, pero su vida ti...
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—¿Sabes que usarás esta noche? — pregunta Allison.
Dejo de mirar mi nevera para prestarle atención a la llamada.
—¿Hablas de mi pijama para dormir? — devuelvo la pregunta.
—Por favor, Lydia tiene su fiesta de cumpleaños y lo sabes—
—Te he dicho dos veces que no me importa y no iré— aclaro —Además es luna llena, no sé si lo notas, pero me pongo casi del color del papel—
—Es extraño, pero nadie en Beacon Hills parece notarlo, has pasado años siendo así, no pongas excusas ¿vestido o jeans? —
—No iré— insisto.
Luego de dos insistencias más, aceptó. En realidad, fue una llamada solo para ser insistente. Miro nuevamente el celular cuando empieza a sonar.
—¿Vienes a mi fiesta? — escucho a Lydia.
—No— suelto en duda —¿Cómo diablos tienes mi número? —
—Tengo el número de todos— aclara —Espero verte aquí, todos van a estar—
—Entonces no me necesitas allí, pero igual gracias por la invitación— corto la llamada.
Bufo ante mi agradecimiento a Lydia Martin, es una extraña sensación. Simplemente es raro que ella me invite o hable.
Vuelvo a mi nevera porque ahora creo que la luna hace que me dé hambre. Dejo la bolsa a un lado cuando el celular vuelve a sonar, la idea de ponerlo en silencio es tentadora.
¿Desde cuándo soy tan popular?
—¿Qué? — hablo.
—¿Por qué siempre usas ese tono conmigo? — escucho a Stiles.
—Lo siento, es que...— suspiro —Lo lamento—
—La luna te irrita, lo sé—
—Bueno ¿Qué sucede? —
—Tengo como 15 regalos diferentes, si fueras una pelirroja atractiva que tiene una vida social activa ¿Qué te gustaría de regalo? —
—Voy a colgar, Stiles—
—Ayúdame— pide.
—No sé qué le agrada a ella—
—¿Qué le darás tú? — pregunta.
—Yo no iré— digo por quinta vez este día.
—¿Qué? ¿Por qué? —
—¿En serio necesitas una respuesta? — suspiro —¿Algo más? —
