Agente 00 [Eunhae] EN EDICIÓN

Capítulo 4

Al despertar a la mañana siguiente me encontré un poco confundido, no había notado en que momento y a qué hora me dormí pero me había levantado temprano, eran casi las seis de la mañana, por lo cual tenía tiempo de sobra para bañarme y desayunar algo antes de ir a la escuela.

A las siete y media salí de mi casa y cinco minutos antes de las ocho ya me encontraba en la entrada de la escuela, cuando me encontré con Siwon.

- ¡Donghae, buenos días!

- Buenos días - le respondí con una sonrisa. El me quedo viendo y comento:

- Todavía no entiendo porque no quieres venir conmigo en mi carro si vivimos a unas casas de distancia.

- Ya dije, no quiero causarte ningún problema, siempre me levanto tarde y no quiero que te veas afectado por mi culpa - le dije mientras subíamos las escaleras de la entrada y nos adentrábamos a la escuela.

- Tu nunca serás un problema Donghae - me agarró de los hombros y me miró - Nunca.

Nos quedamos viendo a los ojos por unos segundos, suficientes para darme cuenta que Siwon era un muy buen amigo, me sentí agradecido.

Le sonreí. El bajó sus manos y se puso a un lado mío para que siguiéramos caminando por el pasillo hacía nuestros respectivos salones.

- Gracias... ah!

Por no estar prestando atención por donde caminaba choque con un chico, provocando que perdiera el equilibrio igual que yo y se cayera.

- ¡Lo siento! - le pedí disculpas al mismo tiempo que le extendía una mano para ayudarle a pararse - Perdón, fue mi culpa, no estaba viendo mi camino.

- N-No, e-es mi culpa por no ver por donde iba - levantó la mirada y pude ver de quién se trataba.

Lee Sungmin, iba en mi salón pero era muy tímido y reservado, por lo que no tenía amigos y no hablaba con nadie. No quitaba el hecho de que hubiera personas que lo consideraban lindo y hayan tratado de acercarse sin ningún éxito.

Yo seguí de pie con la mano extendida, él decide ignorar este hecho y apoyándose con sus manos en el suelo se levantó, hizo una ligera reverencia y se fue corriendo.

Me quede viéndolo hasta que desapareció por uno de los pasillos.

- Eso fue raro.

Yo solo encogí mis hombros para no darle tanta importancia y seguí mi camino hacía el salón donde tendría mi primera clase del día.

Al llegar, el salón se encontraba casi vacío. Faltaba nada para las ocho, pero estaba seguro que en poco tiempo llegarían todos los demás. Así que me senté y crucé los brazos sobre la mesa para poder colocar mi cabeza y cerrar mis ojos por un rato.

Me encontraba como en el limbo, entre estar despierto y estar dormido. Podía escuchar el ruido del salón y así darme cuenta como poco a poco fueron llegando mis compañeros.

Hasta que llegó un momento en donde sentí una ligera molestia en la punta de mi nariz que logró hacer que abra mis ojos, cuando recorrí mi mirada por todo el salón pude ver como HyukJae se sentaba en su asiento y veía por la ventana a los alumnos que llegaban tarde.

No duré mucho tiempo viéndolo ya que justo entró el maestro y empezó la clase.

***

Después de varias horas seguidas de profesores hablando, temas aburridos y compañeros fastidiosos, llegó el descanso de veinte minutos.

Por lo que me dirigí a la cafetería que como siempre estaba llena a su tope. Por suerte aunque todas las mesas estuvieran llenas la fila para comprar la comida estaba corta así que no lo pensé mucho y me formé.
Compré mi almuerzo y un yogurt y justo en ese momento recibí un mensaje.