Capítulo 14

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Mi cuerpo tiembla como una gelatina, mi respiración es muy rápida y mi pulso totalmente acelerado.

La puerta de la biblioteca se vuelve a cerrar y oigo los pasos de nuestros secuestradores.

—¡Jiemma contrólate! —grita uno de su compañeros.

—Levy. —miro a Gajeel a los ojos cuando me llama.

—Violó a mi madre. Yo le hice la herida en la cara. —le susurro justo antes de sentir como me estiran del pelo para levantarme. Gajeel agarra mi cuerpo gritando.

Estoy asustada como la mierda pero me quedo aliviada cuando por las ventanas entran policías rompiéndolas. Jiemma en seguida coloca una pistola debajo de mi barbilla. Con disimulo meto la mano en mi bolsillo con cremallera buscando mi navaja. Los policías apuntan Jiemma detrás de nosotros.

––Suelta a la chica. ––dice uno de los policías pero solo podemos ver sus ojos rojos tiene puesto un casco y un trapo en la boca.

—No pienso soltar a mi seguro de vida. —dice Jiemma apretando el arma contra mi.

––Mata a la chica y te llevas un balazo. Suéltala y vivirás es fácil de entender. —dice el otro policía, lleva el mismo uniforme que su compañero y solo puedo ver sus ojos azules. Sus voces me suenan conocidas.

––No voy a volver a la cárcel. Antes me llevo a esta zorra por delante. ––en seguida escucho un disparo.

––Blanco abatido, repito. Blanco abatido. —dice uno de los policías.

Al mirar hacia fuera veo a un policía en el techo de un edificio con un rifle. Siento humedad en la oreja y al tocarla me encuentro con la sustancia roja.

No soy de las que se desmayan por una gotita de sangre en su oreja pero si me impactó saber que había una persona muerta a mis espaldas. Sin embargo ahí estaba de nuevo mi lugar seguro.

Me abraza por la espalda sin dejarme girarme hacia el cadáver. Con su ayuda logro salir del instituto. Cuando llego hasta mi moto me desahogo de sus brazos.

––Tenemos que ser interrogados por la policía, Levy. ––dice Gajeel a mis espaldas mientras me alejo sacando las llaves de mi moto.

La arranco y me da igual estar rodeada de policías sin llevar casco. Me dirijo hacia la puerta cuando veo que unos policías se ponen en medio para que no pase aumento la velocidad de forma progresiva manteniéndome sobre una rueda. Cuando cruzo la puerta coloco la rueda en el asfalto y al girar para dirigirme al primer semáforo veo como lanzan una especie de líquido a mis pies para que las ruedas resbalen. Sin embargo solo hace que resbale mi rueda de atrás que puedo controlar de maravilla apoyando mi pie izquierdo.

Conduzco pasando todos los semáforos en rojo hasta llegar al acantilado. Me siento en mi banco preferido. Apoyo mis codos en mis rodillas al inclinarme hacia adelante y veo como mis manos tiemblan.

Todo lo que ha pasado me ha impactado. Todos los recuerdos removidos hacen que mis murallas caigan estrepitosamente.

Entonces sucede.

Una lágrima resbala por mi mejilla.

Luego otra.

Otra.

Y a esa otra le siguen miles más.

Mis lágrimas empapan el césped. Saco la navaja y la miro sin parar. No pude defenderme, estaba paralizada del miedo de que ese bastardo me tocará. El día de la carrera con Jellal estaba asustada pero lo de hoy fue diferente, fue una sensación inexplicable y aterradora.

Giro la cabeza y me encuentro con la figura casi invisible de mi padre. Y este es el secreto de este lugar no puedo dejar de venir porque no es la primera vez que veo o imagino a mi padre.

––La princesa suelta la armadura de hierro. ––comenta mirando al cielo con una sonrisa en sus finos labios.

––Las princesas guerreras también podemos hundirnos. ––digo abriendo la navaja coloco mi dedo índice sobre la punta y giro la navaja sobre él.–– Soy tan débil.

––Creo que la gente se reiría de tu concepto de debilidad. ––siento como gira su cuerpo hacia mí pero yo no estoy preparada para mirarlo a los ojos.–– Levy. ––como siempre hace su intento para que lo mire, pero sabemos que eso no va a pasar.–– ¿Qué es la debilidad?

––Llorar, mostrarse vulnerable y ser ayudado. ––contesto automáticamente sin pensarlo mucho concentrada en la navaja.

––Llevo meses escuchando la misma respuesta. ––dice con cierto tono de decepción.–– Y sigues sin tener la respuesta correcta.

––Llevo meses esperando que te rindas y me lo digas. ––confieso cerrando la navaja y la aprieto en mi puño.–– Llevo meses esperando que vengas a mi lado de nuevo.

Lágrimas vuelven a salir de forma descontrolada.

––Sabes que eso es imposible. ––contesta con un tono.

––¿¡Por qué!? ––exclamo con fuerza levantándome del banco.

––Porque estoy muerto. ––justo entonces lo miro a los ojos y vuelve a desaparecer.

Lanzo la navaja contra el césped y grito a todo pulmón al compás de mis lágrimas mis rodillas incapaces de sostenerme caen hacia el suelo.

Golpeo con fuerza el suelo, mientras mis lágrimas parecen regar el verde césped. Me hallo ante mí realidad.

Estoy sola.

No sé en qué momento me moví del lugar. Pero al abrir los ojos me encuentro en la habitación a la que empiezo acostumbrarme. Me siento en la cama y siento pinchazos en la cabeza.

Me levanto de la cómoda cama y me doy cuenta que solo llevo una camiseta negra de chico que me llega al muslo. Antes de que llegue a la puerta Gajeel entra por esta.

––¿Com––su ronca voz me interrumpe.

––Te encontré semiinconsciente en el acantilado. ––me pasa por un lado y se sienta en la cama.–– Creo que me debes respuestas.

Voy a culpar a mi mal momento en el que todavía no tengo mis murallas alzadas para mantener a la gente a raya de mi vida y mis sentimientos.

Me siento en la moqueta que tiene por suelo con las piernas cruzadas como un indio.

––Todo empezó....

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¡Hola mis queridos lectores!

¿Qué tal? ¿Les gustó? ¡Levy ha llorado! 😨 ¡Levy va a contarle todo! ¿Qué es la debilidad? ¿Alguien coincide con Levy?

Respecto a las actualizaciones serán una por semana. Sí escribo en una semana dos capítulos más serán dos todo depende de mí tiempo (que es inexistente)

Saludos y besos de Noa-chan

Chicos vs ChicasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora