~ Trece ~

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A las 5 de la tarde Clarisse estaba en mi habitación ya vestida y tenía mi cama inundada de maquillajes y rizadoras de cabello.

Tenía miedo.

-Insisto, no quiero ir-, volví a decir por millonésima vez en el día sentándome en la cama sobre una paleta de sombras.

-¡Levántate, mujer! ¡Lo vas a quebrar!

Me levanté de mala gana y me crucé de brazos. Aunque protestara y alzara mi voz para no ir a un lugar al que la verdad no me placía ir, Clarisse no me escuchaba, y al parecer mamá tampoco lo hacía.

Inclusive Melody había exclamado: "que emoción Lili, ya quiero crecer para ir a fiestas".

Pero ese no era mi ambiente, ¿saben? Y preferiría un billón de veces que una ballena me comiera a estar en una fiesta.

Me había bañado y estaba vestida en un simple y fresco vestido azul veraniego, y Clarisse había insistido en que me pusiera tacones, ¿pueden creer tal atrocidad? Era una fiesta en la playa, no en un palacio elegante, así que en mis pies traía unas bonitas sandalias, (o al menos a mi me parecían bonitas).

-Liliana Summers, ¿puedes dejar de hacer gestos como un conejo enojado?- resopló molesta mi amiga pasando una brocha con polvo compacto sobre mi rostro.

-Me hace cosquillas y estoy enojada, ¿qué quieres que haga?

-Que dejes de hacerlo.

Voltee a ver el techo resoplando e intenté no mover ni un músculo de mi cara pero me era tan imposible con Clarisse pasando una y otra brocha llena de polvo sobre mi cara, cerca de mis ojos y nariz.

Y después comenzó a peinarme, con tantos jalones que por poco y pierdo la cabeza, y no, no literalmente.

-Listo Lili, mira que hermosa quedaste-, sonrió orgullosa de su trabajo y me dio espacio para verme en el espejo.

Y bueno, ¿qué puedo decirles? Era yo. Sólo que tenía las mejillas sonrosadas y mis labios brillaban, y mi cabello estaba casi como todos los días, ondulado pero esta vez lleno de florecitas azules, (que no sé de dónde las consiguió Clarisse, aunque claro, eran falsas).

-Me veo ridícula-, fue lo primero que dije. -Pero me gusta.

-Ya lo sé, ahora vámonos ya-, comenzó a saltar como un canguro y comencé a entrar en crisis.

Perdón por ser tan insegura, tan cobarde y tan asocial, pero es que...

-¿Por qué no juntamos todo esto primero?- propuse para posponer el tiempo señalando el desastre sobre la cama.

Obviamente se negó y me tomó de la mano arrastrándome escalones abajo. Nos despedimos de mamá y salimos rumbo a la fiesta.

Clarisse le había pedido prestado a su mamá un viejo auto que siempre estaba sedentario en su garage, pero aún seguía funcionando, o eso decía mi amiga quién hizo rugir el motor al encenderlo, el auto vibró y comenzó a andar con una pesada dificultad.

-Te dije que estaba como nuevo-, sonrió mi amiga emocionada y yo comencé a rezar para que no explotara con nosotras sobre él.

Ella comenzó a conducir tarareando canciones desconocidas para mí.

-Oye, ¿y quién está organizando la fiesta?- Se me ocurrió preguntar a último momento, como siempre.

Se tensó tras el volante y yo la miré arqueando una ceja. Suspiró y apretó los ojos por un segundo.

-Monique.

-¿¡Qué!?- Grité con horror, -¡detén el auto ahora mismo Clarisse! ¡Me voy a bajar! ¡Mala amiga! ¿Cómo se te ocurre llevarme a una fiesta de Monique? ¡Quiero volver a mi casa!

-¡Lili cálmate, por dios! No exageres, no es tan malo.

-Si no es tan malo, ¿por qué no me lo dijiste?

Me sentía como un dragón, sentía que mw salía fuego de la boca e incluso de los oídos, estaba furiosa, y asustada.

-Bueno, pensé que si te lo decía no querrías ir-, se excusó encogiendose de hombros y me aguanté las ganas de avalanzarme sobre ella y arrancarle la cabeza.

La amaba, era mi mejor amiga, ¿pero por qué era así la mayoría del tiempo?

-Clarisse, sabes la relación de odio mutuo que sentimos Monique y yo y...

-Y eso no tiene porque privarte de ir a fiestas, habrá tanta gente que ni siquiera creo que te topes con ella.

Bueno, por ese lado tenía razón.

-Pero Clarisse-, comencé a quejarme.

-Pero nada, iremos a esa fiesta, nos divertiremos y ni siquiera veremos a Monique, ¿de acuerdo? Todo saldrá bien.

¿Y saben que fue lo peor de todo?

Que le creí.

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