Bang Bangtan| Reacciones

Treinta y Ocho|Hoseok

Dedicado especialmente para la persona que me enseñó a aquellas personas que son la estructura y cimientos de mis alas, Meme7uu7. Lamento la tardanza, te amo.

—¿Cuándo le dirás qué lo quieres?—pronuncio YoonGi dirigiéndose al otro lado de la habitación

—¿Uh?, ¿De qué hablas, Min?—cuestionas sorprendida de no ver cuando llego hasta ti el chico de cabellos menta

Chasquea la lengua mientras rueda sus ojos. Hace un espacio para el junto a ti en el pequeño sofá.

—Todos pueden notarlo, cielo. Supongo que hasta el lo puede notar. Podemos notar tu mirada triste al ver como Hoseok está tan cerca de Jisoo siempre—suspira—podemos notar cómo estás tan triste que incluso esta noche sea así.

—Calla, YoonGi.

—No—mueve su cabeza desaprobado—debes decirle cuánto lo quieres, cuánto te lastima que la noche de tu fiesta de cumpleaños este con ella—se voltea a mirarte—debes decirle que hoy quieres estar con él y nada más.

—¿Acaso me equivoco?

—Yo...—titubeas—no es eso

Volteas a ver al chico de sonrisa perfecta riendo con Jisoo, el lo toma rodeando su cuello con sus largos brazos.

—No es eso—dices mientras sales de la habitación.

Lo menos que querías ahora era ver como Jisoo besaba a Hoseok frente a ti quebrando todo lo que eras.

Al salir te sientas en el columpio más cercano. Miras al cielo, la Luna luce tan bella que estás a punto de llorar. Por ella y por ti.

—¿Haneul-ssi?

Haneul divisó los cabellos castaños de Hoseok que brillaban con la luz de la Luna.
Su sonrisa adornaba hoyuelos a las esquinas de sus labios.

Hoseok se sienta a lado de ella
—¿Qué haces acá? Hace mucho frío, deberías entrar.
—Entra tu, yo necesito un poco de aire fresco.
—Es eso o estás tratando de esquivar algo
–Haneul voltea a mirarlo–¿Qué?, ¿De qué hablas?

—Nada.

El rasca su cabeza pensando si decirlo o no. Las palabras queman tanto que tiene miedo de sacarlas a relucir. Sabe quién es ella, sabe que Haneul no hablara si él no lo hace y piensa.

Piensa en lo que dijo YoonGi cuando Hoseok se confesó.
"¿Que de malo tiene arriesgarse?"

Hoseok voltea a ver la Luna, Haneul mira al Sol. Haneul mira a Hoseok.

—Cuando era pequeño me preguntaba porque el Sol y la Luna nunca salían al mismo tiempo.
Me preguntaba...Porque si uno existía en aquel momento, el otro no podía existir con el.

Haneul no habla, solamente escucha aquella ronca voz gracias a el aire frío de la casi media noche.

—Entonces le pregunté a mi madre que era lo que realmente sucedía. Y me explicó.
Me dijo que la primera vez que ambos se vieron se perdieron en el otro, hasta que Dios llego.
Quizá fue por su brillo tan apantallante de ambos que no podían estar juntos, alguien decidió que la Luna iluminados la noche, y el Sol el día por lo que estarían separados por siempre.

Hoseok se acerca a ella. Se quita la chamarra y se la cede para que Haneul deje de titiritar. Ella agradece en voz bajita.

—Se decidió que ningún amor sería del todo imposible, ni siquiera el de ellos dos que tan infelices eran por no estar juntos.
Así que cada cierto tiempo se juntan, se abrazan por unos momentos y se dejan ir con la esperanza de que algún día volverán a estar juntos.

—Wow, ¿Cómo sabes eso?
—¿Por qué no me dejas estar contigo?

Hablaron al unisono.

Hoseok ya no podía arrepentirse de haber dicho aquellas palabras. Haneul no entendía que estaba sucediendo.

—¿Por qué cuando yo llego tú te vas?, ¿Por qué por más que quiera estar contigo no me dejas?, ¿Por qué?

Haneul pensó en Jisoo, en aquel tiempo en el que era su amiga, en cuando Haneul le dijo cuanto quería a el castaño y un poco después Jisoo se acerco a Hoseok sin importarle su amiga.

—Eres aquella Luna, Haneul. Cada vez que estás ausente trato de estar para ti, trato de brillar para ti, trato de hacerte saber que te necesito siempre. Trato y trato y tú no te das cuenta.

—Yo...

—No, olvídalo. Yo, me tengo que ir—dijo antes de ponerse más nervioso.

—Espera, Hobi—Haneul se incorpora y le toma el brazo obligándolo a verla.
—Yo nunca pensé que dijeras eso estando en una relación con Jisoo. Es lindo y lo agradezco pero no me lastimes de este modo.

—¿Eh?, ¿Relación con quién?. No estoy en ningún nada con nadie.

—Entonces...

—Crei que podía ser una buena amiga, y qué tal vez me acercaría un poco más a ti.

—Pero a ella le gustas—Bajo la cabeza.

—Pero a la que quiero es a ti—dijo cambiando la palabra—lo único que no se es si es recíproco... Quizá las ilusiones sean falsas. Quizá no soy suficiente, no se, he estado pensando tanto...

—¿Cómo puedes decir eso, Hoseok?—dijo golpeando si brazo.

—Auch.

—¿Cómo alguien no puede amarte sabiendo que eres el Sol? Cuando estoy junto a ti me siento mejor, iluminas mis días destinados a ser grices, me llenas de luz con tu felicidad. Soy simplemente la Luna, que aparece cuando todo está comenzando a oscurecer, ¿Qué de importante tiene eso?

Hoseok toma sus hombros y la acerca a su pecho. Pasa ambos brazos alrededor de su cuerpo y acerca su boca al oído de ella.

—Sin la luna, ¿Para que existiría el Sol?

Y la retira.

Haneul lo jala de nuevo, está vez besándolo en los labios. Hoseok no se mueve ni respira, espera el primer movimiento de ella que no parece llegar y entonces el la amarra un poquitín más cerca.

Nada existe, más que el Sol y la Luna danzando.

—Te quiero tanto, Han.
—Te quiero Hobi.

—Y ahora, ¿Qué haremos?—pregunto ella sin abandonar el cuerpo del chico.
—No lo sé, pero no te separes de mí. No quiero que suceda un simple eclipse, realmente te necesito.

Haneul sonríe sin que el lo sepa. Sintiéndose liberada por haberlo intentado. Hoseok por haberse arriesgado.

—¿Hoseokkie?, cariño...
—Mhm.
—Gracias por estar hoy aquí.