Bang Bangtan| Reacciones

Cincuenta y Cinco| Taehyung

Insomnia.

TaeHyung.

No puedo dormir por más que sienta mis párpados pesados así que abro los ojos y la miro ahí.
Esta en la silla junto al umbral de la puerta.

Tiene el cabello rojizo cayendo a los lados de sus hombros, sin embargo dos mechones se interponen frente a sus ojos. Sé cuanto le disgusta eso así que me paro de la cama y me dirijo a ella y con mis dedos me deshago de los juguetones rizos provocándole una pequeña carcajada debido a las cosquillas.

—Te extrañé—susurro cerquita.

No habla, solo me atrae a su cuerpo y no dudo en pasar mis manos por su cintura aferrándola a mi cuerpo. Nos quedamos unos minutos así hasta que se deshace de mi agarre.

No me doy cuenta de las lágrimas que se derraman por mis mejillas hasta que sus frías manos se encargan de limpiarlas con dulzura.

—Tranquilo, Tae—susurra divertida—no debes llorar, estoy aquí, ¿acaso te habías olvidado de mi?

Niego.

—Te tardaste mucho en regresar, ¿dónde estabas?—cuestionó imprudente, ella pone un dedo sobre mis labios.

—No importaba dónde estaba—se encarga de responder—lo importante es que estoy aquí y que te amo.

Las lágrimas regresan provocando una lluvia torrencial, Haneul me amarra con sus delgados brazos de nuevo.

—Jamás me iré de nuevo, Tae, siempre estaré a tu lado.

Siento su sonrisa detrás de mi nuca, provoca que mis labios se curven.

Pero entonces me deshago de su agarre esta vez y la miro. Observó como las líneas de sangre enmarcan su mandíbula, los moretones comienzan a aparecer en sus piernas.

—Me duele la cabeza, Tae—dice incómoda.

Y cuando se voltea puedo observar el gran golpe en su cabeza, trato de parar la herida pero mis manos no son capaces. Siento como trata de frenar mis gritos de ayuda, pero no ayuda.

Los doctores irrumpen la habitación separándome de ella.

—¡No, suéltenme!—pido—se está muriendo, déjenme ayudarla—suplico esta vez—por favor, por favor.

Pero los doctores son sordos y los enfermeros han llegado con aquella inyección que me hace olvidarla.

Antes de volverme a dormir la miro en el umbral de la puerta, con sus labios forma un "te amo eternamente".

Los médicos hayan las pastillas de las últimas dos semanas debajo de mi diario.

Y le respondo con un murmullo "También te amo".

Quizá no es muy entendible, así que se los podría explicar si así lo desean. Este shoot está inspirado en la canción "Insomnia" de el grupo coreano "The Rose", uno de los más talentosos.

Espero puedan escuchar su arte.