Hay que apelar a la esencia de tu alma

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I. Hay que apelar a la esencia de tu alma.


Muchas veces oí su nombre de la boca de Leeca, pero en el momento en que me crucé con él, no asocié que ese recuerdo y ese tipo eran exactamente la misma persona, hasta que Kuro me preguntó por Tsukishima.

—Este tipo puede ser un problema para Kuro si su intención con Leeca es ir más allá de la amistad—pensó el rubio, realizando un movimiento para confundir a sus oponentes, mientras Leeca lo observaba desde la banca.

—¿Qué sucede? —consultó Oyuki, al percatarse de que su amiga no dejaba de observar atentamente los movimientos del armador de Nekoma.

—Es extraño. Kenma está analizando más de lo normal, en particular a uno de los chicos—comentó, sin darse cuenta de que Kuroo la había estado observando por unos instantes.

—Eso lo prueba, no puedo equivocarme. Ese tipo es por quién Leeca lloró cuando llegó a Tokio—pensó, cambiando la expresión de su rostro por una más seria de lo normal.

—Kuroo no se da cuenta, pero está mucho más interesado de lo que cree. He estado con él desde que éramos niños, y sé cuándo realmente algo le importa—pensó, para luego ver por un instante a Leeca—Sé que suelo no ser notado por los demás, pero estoy seguro de que ella se da cuenta de lo que estoy haciendo ahora.

En ese momento, Hinata intentó inútilmente volver a utilizar su técnica, la que ya había sido bloqueada durante el partido. Ante lo ocurrido, Tsukishima observó al entrenador, ya que le parecía raro que no sustituyera al bloqueador de Karasuno.

—¿Quieres saber por qué no cambio a Hinata? —consultó el rubio—Es simple, porque él no ha perdido la voluntad de jugar. No va a rendirse aún con todo lo que ha sucedido—explicó calmadamente, viendo que Hinata había intentado utilizar su técnica, pero esta vez abriendo sus ojos.

Lamentablemente, solo por escasos centímetros no logró su objetivo, y el primer set fue para Nekoma. Después del descanso, Karasuno siguió con sus ataques, para lograr que el bloqueador central lograra realizar su técnica con los ojos abiertos.

—Hinata, intenta ver todo con más perspectiva, relájate—recomendó el capitán de Karasuno, haciendo que el joven comprendiera y viera una jugada de Inuoka, la cual fue detenida parcialmente por Hinata.

Al ganar ese punto, la rotación cambió nuevamente, dejando ver a Kuroo frente a Hinata. Eso no pasó desapercibido para Oyuki, que no tardó en comentárselo a Leeca.

—Mira, ahora Hinata está frente a Kuroo—comentó animada, dándose cuenta de que su amiga parecía sumamente concentrada en el partido.

—Vaya, los dos tienen diferencia de más de veinte centímetros de estatura, muchas felicidades, pequeñín—comentó Kuroo, logrando que Hinata se molestara ante su comentario.

—Tiene un carácter retorcido, parece ser tu patrón, Leeca—comentó divertida, esperando una reacción por parte de Leeca.

—¿Patrón? ¿de qué hablas? —consultó la de ojos ambarinos, que parecía no entender lo que Oyuki le estaba diciendo.

—¿No te ha gustado nunca Tsukishima? —preguntó directamente, la futura líbero de Karasuno—Digo, siempre me hablabas de él cuando jugábamos el año pasado—acotó la de ojos verdes.

—Kei es mi amigo—aclaró un poco sonrojada—Como si él se fuera a fijar en una chica común como yo—agregó, sonriendo de lado.

—Suena más a resignación que a convicción—replicó rápidamente, al ver que sus palabras iban más allá.

~Just be friends~[Haikyuu!!]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora