Chico De Las Pantuflas Mojadas |+18| [BxB] |TERMINADA|

|16|

[¿Aceptarlo?]
°
°
°
N/A: ¡Gracias a Reina-Sugar26 nuevamente por el dibujo!, me encanta cómo se esfuerzan por darme mi love ≥v≤) .
°
°
°

Bonnie:

Nunca en mi vida me había sentido tan feliz.

Había pasado ya medio año desde el día en que me reencontré con aquel chico de la librería, Bon, su nombre era tan increíble, mejor dicho estar a un lado de él me hacía sentir increíble a mí.

Era fabuloso que después de tanto tiempo me reencontrará con él, y Bon también me había confesado de que si se acordaba de mí y que se sentía de cierta manera feliz el volverme a ver, aunque nunca me quiso decir por qué ese día en la librería salió corriendo, solo me dijo que el llevaba estudiando en ese colegio desde primer grado pero que en la actualidad se encontraba estudiando en otro colegio, uno público.

Me llevó algo de tiempo saber la razón de aquel cambio de escuela, y se debía a que su madre había fallecido, y ahora su padre debía encargarse de todos los gastos por lo que prefirió ahorrar dinero al meterlo en una secundaria pública, me dijo que su madre era fanática de la música y la esgrima, razón número uno por las que él practicaba aquellas actividades.

–¡¿tienes 17 años?!– enserio no pude evitar gritar, aunque él tampoco se creía que yo fuera mayor que él.

–Lo sé, pero tampoco me creo que seas mayor que yo, siendo tan bajito.

–¡Oye! ¡No empieces!.

Me enteré que era menor que yo por un año, aún así veía injusto que él sea más alto que yo y más fuerte.

Era lindo saber que compartía tantos gustos parecidos con él, desde querer ser médicos, una loca afición a la ciencia ficción y gusto por la música y sobre todo por el instrumento de la guitarra.

–¡Debes enseñarme! ¡Eres tan bueno! – expresé entusiasta con solo escuchar como tocaba la guitarra, y su voz al cantar, era asombrosa, y sobre todo cuando lo escuchaba cantar esa peculiar canción a la cual él llamo 'Sueños De Verdad'.

Enserio que desde que empecé a ser su amigo mi seriedad había sido sepultada por mi alegría, alegría producida por él.

–Espera, Bonnie, decídete, o esgrima o música, no puedo ambas jejeje– me respondió nervioso.

–Mmn... ¡Las dos! ¡Además aún no te perdonó que me hayas dejado ganar ese día en esgrima! – lo amenacé.

Y es que no era para nada tonto como algunos creían, pues no tarde ni una semana en descubrir que me había dejado ganar en nuestra primera pelea de esgrima.

Por eso decía que el era increíble y debía enseñarme todo esos trucos para que nadie más me ganará.

–Ay...tienes razón, está bien, pero debemos poner un horario para cada una...

–¡Gracias! –lo abrace contentó, no podía sentirme mejor.

Y mientras más pasaba con él me sentía con más seguridad, la suficiente como para verdaderamente ir contra mis padres, y así estudiar lo que yo quería.

Ya que, hasta ahora, aun que siempre les respondía a mis padres y amenazaba con irme, nunca lo terminaba por hacer debido al miedo, además ¿Qué haría yo solo en las calles sin ayuda?, Pero ahora no, ya que Bon me daba aquella confianza que necesitaba.

Pero llegó el tiempo en el que mi corazón ya no solo latía de forma apresurada cuando me encontraba junto a él, sino que también me hacía sentir raras emociones, y no sabía que era lo que me sucedía.