Rich Boy ; Yoonmin

031 ❝Háblame❞

Yoongi sostuvo con cansancio la bolsa de hielo que aliviaba su mandíbula. Escuchó refunfuñar a un molesto Hoseok mientras sus pasos fueron lejanos y finalmente inexistentes.

La puerta de entrada resonó y obligó a sus piernas a levantar su exhausto cuerpo. Cuando estuvo a medio pasillo, escuchó unos pequeños sollozos que lentamente fueron haciéndose intensos. Asomó discretamente la cabeza hacia la sala y de inmediato divisó a un pequeño cuerpo hecho bolita en uno de los grandes sillones.

Jimin cubría su boca para no llamar su atención. Pero eso no fue para nada útil. Sabía que el menor había llegado lo suficientemente alterado al departamento desde el caótico incidente en la fiesta. Yoongi le ofreció llevarlo al hospital, creyendo que la causa del infinito llanto de Jimin era por el dolor físico.

Pero el rubio se negó a ir.

Entonces se mantuvo recostado en el sillón por más de tres horas, sin querer hablar con alguien.

Incluso pasó por su mente el contactar a Jeon Jungkook para que intentara hablar con Jimin y lo alegrara al menos un poco. Pero esa idea era demasiado molesta.

Los pasos del mayor fueron lentos y silenciosos. El rubio a pocos metros suyo mantenía los ojos cerrados mientras dejaba salir una buena cantidad de lágrimas. Estaba seguro que Jimin ni siquiera había escuchado a Hoseok irse.

Cuando Yoongi estuvo lo suficientemente cerca de él, se sentó a su lado, dejando la bolsa de hielo en la mesa frente a ellos. Al sentir su presencia, Jimin abrió los ojos lentamente.

El corazón de Yoongi crujió.

Sus tristes ojos estaban completamente teñidos de rojo, cada vez, acumulando más y más lágrimas, su maquillaje estaba lo suficientemente corrido como para manchar los muebles y sus venas estaban apareciendo con fuerza en su cuello. El pelinegro sintió un fuerte coraje en el estómago cuando divisó las notables marcas que dejaron las uñas de aquel imbécil horas antes.

El menor mordió su labio, arrugando más el papel que tenía en sus manos y de pronto sorbió su nariz.

"¿Quieres hablar?" Yoongi se enderezó hacia él.

El menor le lanzó una mirada seria antes de desviar su vista hacia el suelo.

Por favor, vete. Pidió para sus adentros.

"Jimin, tienes que decirme si te duele algo." Le pidió. "Llevas horas llorando-" Se detuvo cuando el menor se giró hacia él, creyendo que estaría a punto de darle una respuesta. Pero no pasó. "Sólo te pido que... me digas qué es lo que te está mortificando tanto."

Entonces para cuando Yoongi posó una de sus manos en su espalda; Jimin rompió en llanto.

"Hey..." Sin pensarlo mucho, el mayor lo tomó en sus brazos, rodeándolo en un dulce y caluroso gesto de compasión.

Jimin hundió su triste rostro en el pecho del contrario, soltando fuertes gemidos cargados de sentimiento. Yoongi acarició la rubia cabellera de Jimin, sintiendo la presión de este en su brazo izquierdo.

Lo necesitaba.

"Tranquilo Jimin-ah."

"N-no puedo estar tranquilo." Sollozó casi inaudible. "Ellos-s ellos-"

"Ellos no van a hacerte daño de nuevo, ¿Sí?" Jugó con uno de sus mechones. "Contraté más seguridad, puse cámaras en-"

Jimin se separó bruscamente de él. Su pecho subía y bajaba con rapidez.

"Ellos pueden hacerte daño, Yoon. ¿No lo entiendes?" Sus cejas se juntaron y sus ojos celestes ahora estaban oscurecidos. "Lo que me está matando justo ahora es que ayer vi como tu trabajo puede terminar destruyéndote la vida. Ese idiota me lastimó el rostro, pero a ti casi te dejan inconsciente."

"Pero no lo hicieron." Dijo sin pensar.

Hubo un silencio intenso cuando dejó de hablar; Jimin estaba enojado.

De momento intentó ponerse de pie pero Yoongi fue más rápido y lo tomó de la muñeca.

"Déjame."

"Sólo estás asustado."

"Suéltame, Yoongi." No estaba mirándolo.

"No tienes por qué sentir miedo."

Jimin forcejeó contra él. "¡Me lastimas!" Gritó y Yoongi lo soltó de inmediato, Jimin tomó su muñeca y la frotó impaciente, manteniendo una mueca de dolor en el rostro.

"L-lo siento."

El menor le dedicó una mirada seria, se giró, ignorándolo pero Yoongi comenzó a hablar antes de que diera otro paso más lejos de él.

"Esa fue una de las razones por las que quería ocultar nuestra relación, Jimin." Le habló desde el sofá. "Sabía que podría ser algo muy peligroso para ti, porque estoy demasiado consciente de todo el maldito daño físico y mental que la fama puede causarle a alguien y yo no quería nada de eso para ti."

Jimin se mantenía parado frente a él, escuchando atento.

"Sé que dejaste que Sun-hee manipulara nuestra relación. Sé que creíste que era un idiota que no supo valorarte. Sé que justo ahora estás malditamente aterrado por mi seguridad gracias a que ayer no tomé precauciones." Se puso de pie, caminando hasta quedar detrás del menor. "Pero justo ahora que te miro, entiendo que te necesito más de lo que tú me necesitas a mí y que soy el hombre más arrogante y egoísta de este puto mundo porque prefiero vivir en este diminuto apartamento con un chico precioso aunque me saque de quicio seguido, que vivir en una inmensa mansión y alejarme de él para siempre y seguir siendo el tipo infeliz que manda a todo lo que esté a su paso a la mierda."

Entonces tomó su suave mano, y posó su muñeca en la cintura del menor, girando su cuerpo lentamente hasta quedar frente a frente. Los ojos verdes de Jimin reflejaban nerviosismo y dulzura, haciendo que el estómago de Yoongi diera un revuelco.

Relamió sus labios con deseo.

Tenía ganas de besarlo.

Pero el rubio rompió el silencio bruscamente.

"¿Realmente fui tu primera vez?"

El corazón de Yoongi se detuvo.