🌷☕ ; e p í l o g o

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Estaba nervioso, y mucho. No dejaba de caminar de su habitación hasta la cocina de su departamento, y su madre estaba igual que él, arreglando su vestido y el de su hija. Todos estaban ansiosos por el importante evento que iba a suceder en tan sólo unos minutos. Se trataba de la graduación de Namjoon, obtendría la licenciatura y sería, finalmente, ingeniero en informática. Seokjin estaba emocionado, debía verse perfecto para poder celebrar junto a su ahora novio. Esperaba callarle los hocicos a todas esas personas que no creyeron en Namjoon y que lo discriminaron por ser la pareja de otro alfa. Es más, iba a subir a ese escenario e iba a dar un discurso del por qué todas esas personas eran mierdas de vaca. No importaba si lo echaban a patadas. 

Vio a su hermanita menor, quien vestía un hermoso vestido de girasoles, y en su lindo moño había un llamativo girasol. Se veía simplemente hermosa. 

—Hyesook, te ves increíble. —aseguró el alfa, tomando su mano y haciendo que diera una pequeña vuelta.

La niña soltó una risa—: Gracias, Oppa. Tú también te ves lindo. 

Su madre llegó en ese preciso momento para seguir perfeccionando la ropa de sus dos hijos y luego la de su esposo, quien después le pidió que se calmara, que parecía una loca. Esta le pisó el pie y luego dijo que limpiara su zapato que estaba sucio, haciendo reír a ambos hijos. 

Luego de unos minutos, el timbre del departamento sonó, haciendo que Seokjin se dirigiera a abrir esta. Un coche con dos mellizos fue lo primero que se pudo ver, luego a un alfa con cara de que no pudo dormir detrás de este, y por último un hermoso omega pasando al departamento y abrazando al mayor. Se trataban nada más y nada menos que Jimin y Yoongi, junto con su hija Yangmi y su hijo Jinseok —quien lo habían nombrado así por Seokjin. 

Luego de los saludos, abrazos y elogios, y claro, unos cuantos gritos de Yoongi por el miedo a que sus dos preciados cachorros se lastimaran con los juguetes, decidieron partir a la Universidad de Artes Informáticas y Cibernéticas de Seúl, ya preparados para ver a Namjoon recibir el diploma. 

Llegaron al lugar y fueron partícipes del hermoso evento de clase y lleno de personas que la pequeña Hyesook identificó como raritos y nerds. Claro que, para Seokjin, el más hermoso de todos era Namjoon. 

Pasaron muchas personas y personas, hasta que finalmente pasó Namjoon. La omega saltó de su asiento y gritó "¡Mi pequeño informático!" con euforia. Todos quedaron anonadados con el alarido de la mujer. Pero, en el momento que llegó el discurso de Namjoon, todos quedaron callados.

—He de comenzar con que, vidas hay muchas, pero estoy especialmente agradecido por haber vivido esta. —sonrió— Muchas personas que entraron a este tren no le dejaron paso a la melancolía, o a la cobardía, a pesar de que muchas veces lo fui. Algunas se encargaron de amargar lo que yo conocía como la paciencia y armonía diaria, mientras que otras sólo dejaron su grano de arena para construir a la persona que soy ahora. Agradezco de haber conocido aquellos individuos que quisieron expresar su opinión de manera ofensiva, porque gracias a ellos, me pude dar cuenta que no importa cómo me vea la gente, sino lo que soy en verdad, y lo que la gente que me importa piensa de mí. —miró el papel, apretando sus labios en una fina línea— Agradezco tanto muchas cosas. Las oportunidades que me dio la vida de emerger de un capullo que muchos creían perdido, las oportunidades que me dio la vida de... conocer a ese alguien que supe que iba a cambiar esta de manera exorbitante. Gracias a Kim Hyesook, gracias a Kim Jungseok, a Jyesook. A Jackson, individuo que me hizo la vida imposible, pero hey, es un amor. A Min Jimin, a Min Yoongi, incluso a Min Yangmi y Min Jinseok, lucecitas que nacieron no hace mucho. —soltó una risa— Le agradezco a mi novio, Kim Seokjin. Uno de los principales factores que me volvió la persona que soy ahora. ¡Gracias a todos! Ustedes hicieron que esta vida sea mi favorita entre todas, y una vida que, aunque quisiera, nunca voy a poder olvidar. 

¡Tú, idiota! 🌷  namjin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora