~𝕎𝕠𝕝𝕗 𝕠𝕗 𝕎𝕒𝕣 𝕀𝕀𝕀~[Completa]

~Cap. X~

Derek se dirigía a casa de Stiles en su Camaro negro de sexta generación, del año modelo 2016. Una vez allí entró a la casa de su mejor amigo, saludó al soldado y después abrazó a su amigo para luego decir:

— ¿Qué tal chicos, que hacíais?

— Jugar al ajedrez, vamos empate, ¡por fin alguien que sabe jugar! Y es digno de mis dotes, ¿Y tú?

— Bueno, bastante bien, vengo de la base militar de hablar con Daniels.

— ¿Y qué tal?, ¿Todo bien?

— Sí, muy bien, solo que al final la conversación se ha vuelto un tanto incómoda y extraña, temas turbios.

— ¿Y eso?

— Bueno, hemos estado hablando sobre la pérdida de familiares, le he estado preguntando un poco y cada vez respondía y se le veía más nervioso y extraño - dijo con un sonrisa despreocupada.

Zusmann que se encontraba mirando a Stiles giró su rostro bruscamente dirigiendo sus ojos hacia los de Derek, tenia una expresión seria aunque más que serio parecía estsr enfadado, cualquiera que lo viera juraría que había fuego en sus ojos, se levantó de su asiento y se acerco a él.

— ¿¡Qué qué!?, ¿Quién coño te crees que eres?, Tu... — le señala con el dedo tocándole el pecho y empujándole levemente —. Tu en que derecho te crees que estas para sacar temas asi a alguien que no conoces.

Derek cogió la muñeca de Zuss alejándolas de su pecho.

— No me tooooques Derek, no lo hagas de verdad no te lo recomiendo - Dijo mientras daba un tirón de su brazo soltabndose bruscamente del agarre de el moreno haciéndose daño en el hombro, pero solo lo demostró haciendo una pequeña mueca.

En eso Stiles al ver la tensión del asunto se puso entre los dos hombres.

— Calmaros ¿Vale?, Mi casa, mis normas, mis muebles susceptibles a romperse bajo peleas de machos. Derek no tenía malas intenciones Zuss, no se lo tengas en cuenta por favor , y tú — señaló a Derek —. no te metas tanto en la vida de los demás y menos en esos temas porque siempre te acabas metiendo en líos, y ahora...¿Quien quiere café? — dijo con una sonrisa en el rostro mientras bajaba corriendo lo mas rapido que podia a la cocina, Zusmann se acercó a Derek.

— Con todos mis respetos Derek, escúchame bien, no te vuelvas a meter en la vida de Daniels, nunca, y mucho menos en ese tema, porque a la próxima me la sudan Stiles, sus muebles y sus normas, y... ¡si por favor! — dijo gritando —. tráeme un café con leche.

— De acuerdo. — dijo Derek arrepentido sabiendo que el ojiverde solo buscaba lo mejor para su amigo.

Stiles desde la cocina gritó a Zusmann aún mas alto:

— ¿La leche entera o desnatada? ¡Derek, no me has dicho si quieres café! - se hizo el silencio por un momento hasta que volvió a gritar Stiles ahora con un tono eufórico:

— ¡Coño, si hay pastas! ¿Quien quiere? — Dijo sacando la cabeza por la puerta de la cocina.

— Entera por favor, y yo sí que quiero pastas. — dijo Zusmann con ironía.

Mientras tanto, Derek se limitaba a pensar en como había reaccionado Zussman ante ese tema, una reaccion tan exaltada, nada le cuadraba pero sabía que no debía molestar mas y olvidarse del tema.

Stiles salió de la cocina con una taza de café para el y otra para el soldado, junto con una bandeja enorme de todo tipo de pastas. Cuando llegó a la habitación Derek estiró la mano para coger una, pero antes de llegar a ella, Stiles le dio un manotazo mirandole con gesto ofendido:

— Tú no me has contestado, tú no tienes pastas.

Mientras Daniels en la base se dirigía a la habitacion de Prinston a intentar hablar con él ya que llevaba por lo menos un dia sin salir del habitáculo.

— ¡Hey!, ¿Qué haces? — dijo el rubio entrando lentamente.

— Ordenar mis cosas en la maleta, esta hecha un desastre.

— Yo ya la tengo hecha desde hace tiempo, gajes del oficio.

— Ya...pero no sé que me pasa esta vez, la hago y deshago sin motivo, no soy capaz de que quede perfecta - aunque realmente sabía el motivo de porque su maleta por primera vez no estaba ya lista.

— ¿Por qué no estás con tu crush tambien llamada Lydia?

— He peleado con ella, o no..., o no sé qué coño ha pasado la verdad, ha sido todo demasiado confuso para mi. Yo no soy de estas cosas ni las entiendo lleva mucho tiempo sin gustarme una mujer, de hecho en mi vida me ha gustado una mujer tanto como me ha gustado ella.

— Deberias guiarte por ese sentimiento, no puedes estar toda tu vida huyendo de ellos.

— ¿Por que no? Sabes lo que conlleva ser militar, es un sacrificio que debo hacer, se me pasara, me olvidaré de todo esto.

— Entonces... ¿No quieres venir esta noche a patinar con todos?

— No.

— Vengaaaa. — dijo suplicante.

— Nooo.

— La quieres ver, yo lo se.

— ... —

— Ves eso no es un no, vamos joder don Terminator, no puede haber sido tan mala la situación.

— Sin duda si lo ha sido, nos hemos besado joder, por cierto el mejor beso de mi vida, y luego me ha pedido que me quede para conocernos más, que no me vaya y he tenido que irme corriendo como un gallina sin mirarla a la cara. Sinceramente me da miedo quedarme y que esto vaya a más.

— ¿Y por qué no nos quedamos?

— Hay que trabajar Daniels, es nuestro...

— Deber. — respondió antes de que su jefe lo pudiese hacer.

— Sí.

— Tengo una increible idea, es un poco a largo plazo, un par de meses, aunque luego definitivamente no la importará que te vayas ven a la pista...y te lo cuento — finalmente Prinston asintió con mala gana, aunque en lo mas profundo de él una sonrisa se formaba en su rostro sabiendo que la iba a volver a ver.