Enamorado De Un Ángel

Capítulo. 9

Después de haber dejado a Mike Zacharius cómodo y ahora si, listo para dormir en su habitación de hospital, Petra a decidido alejarse del hombre por unas horas.

Ahora se encuentra dispuesta a encontrarse con su amigo y compañero Marco quien seguramente ya le espera en la terraza del edificio donde acostumbran platicar antes de reunirse con los demás.

Justo cómo ella piensa aquel ser celestial está sentado justo a la orilla del edificio, dejando sus pies colgar al vacío.

- "No me iré de aquí, no sin ti". Fue lo que dijiste y después me dejaste por aquel humano en la primera oportunidad. - Menciona Marco llevándose una mano al pecho y finge indignidad, en cuanto siente la presencia de su amiga.

Al escuchar esto Petra pone una cara asustadiza por la impresión de haberlo olvidado por completo.

- Lo siento, enserio perdóname no fue mi intención. - Se disculpa la pelirroja reflejando toda la pena que siente.

- Ya me imagino lo que me harías si hubiese sido tu intención. - Bromea Marco, pero para su amiga eso no es suficiente para quitarse lo apenada y dejar eso en el olvido.

- Marco... Enserio lo siento. - Las palabras del pelirrojo ángel suenan en tono suave.

- Ya no te preocupes, te perdonó. - Sonríe Marco. - ¿Hoy si escribiste en la libreta?

- Aquí la tengo. - Responde al mismo tiempo que muestra el objeto a su compañero.

- ¿Entonces que esperas? - Pregunta él con una pizca de diversión.  - Vamos siéntate a mi lado.

Sin decir nada ella obedece y toma su cuadernillo con un poco de fuerza para liberar un poco alguna especie de energía que quiere sacar para sentarse aliviada.

- Yo comienzo. - Propone Marco rápidamente. - Espero no te moleste.

- Adelante. - Dice Petra cortamente sin mucho afán.

- Petra... - Interrumpe él la conversación. - No estás tan animada cómo sueles ser.

- ... - El ángel no sabe ni que decir, cuando quiere soltar una palabra al final no lo hace al creer que no es la correcta. - No sé porque... Sólo me quede así desde esta noche.

Es lo único que se escucha en ese momento, aún Petra se rompe la cabeza intentando responder ante su propia pregunta.

" ¿Porque me siento así? "

.

.

.

" Sentir "

Después de algunos minutos en que ambos se quedan en completo silencio, el ángel con apariencia de joven decide intervenir por el bien de su amiga.

- ¿Quieres escuchar lo que escribí?. - Es lo que suelta tratando de sonar alegre o animado.

- Sí, está bien. Adelante. - Trata de sonreír un poco, pero realmente no es sincera.

- Leví Ackerman... - Comienza a decir Marco y en cuanto su compañera escucha ese nombre inmediatamente dirige su mirada hacia su compañero. - Un doctor cardiovascular, está mañana fue a la biblioteca sin saber que ahí se encontraría a alguien, alguien que ha llamado su atención, a pesar de que parece que el se cierra ante todas las personas a su alrededor con ella se abre un poco más incluso cuando admite que no sabe todo cómo él creía cosa que no pasa amenudo, gracias a ella también se ha dado cuenta lo vulnerable que es.