Capítulo 21 Cita en la cafetería

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Al día siguiente, Sakura comenzó el día con la misma rutina un poco angustiado por la visita de Sasuke en la madrugada. Falto poco por confesar sobre el fruto de ambos, pero el rencor no se lo permitió. Con bastantes pensamientos confusos tomó una decisión, le diría toda la verdad como acordaron aclarar muchas cosas, pero antes quería saber que tan cierto era que estaba prometido con alguien más.

En el Penthouse de Sasuke, Naruko estaba sentida por lo que pasó la noche anterior, así que optó por no cruzar palabras con su prometido, quien también aplicaba la ley de hielo. Terminando de almorzar, Sasuke se levantó de la mesa, tomó las llaves de su deportivo, y sin despedirse de su prometida, se marchó a sus deberes pensado en la cita con Sakura. Él anciaba saber quién era el idiota que robó el corazón de su chica de ojos jade, asimismo conocer a la niña en físico. Una vez más, Naruko sintió un vacío de desamor y estorbo por parte de su prometido. Cuando este abandonó el Penthouse, decidió otra vez salir a pasear por toda la cuidad, en compañía de Konohamaru, quien aceptó ser su guía.

Las tres de la tarde marcaba en el reloj de mano de mafioso al interior de la cafetería donde conocí a la mujer que había estado buscando por mucho tiempo, esperaba a la pelirosa en la misma mesa que dejó compartir Itachi y él, tres años atrás. No dejaba de ver la hora en su Rolex de oro blanco, de lo nervioso que se encontraba. Pasaron cinco minutos de la hora acordada cuando comenzó a perder la paciencia. Ordenó un té de siete flores para calmar sus nervios, a media taza la vio entrar por la puerta de la cafetería luciendo bella. Sakura llevaba el cabello suelto con una diadema de color rojo, una camisa de manga larga color blanco, una falda pegada al cuerpo arriba de las rodillas color vino y zapatillas de punta color negro. De tan solo verla suspiró y se puso de pie para recibirla.

Por otro lado, Sakura sentía el corazón abandonar su pecho porque ahí se encontraba él, parado por la misma mesa que dejaron compartir. Lucía atractivo y elegante, portaba en sí un traje negro con una camisa blanca y una corbata. El cabello lo lleva peinado hacia atrás. El Uchiha no perdió lo bien que lucía como la primera que lo conoció.

Pasos antes que Sakura llegara a la mesa, Sasuke se acercó a ella y la recibió con un beso en la mejilla. Su maldito orgullo cayó por los suelos, se dejo llevar por su corazón. Ella lo abrazo con mucho sentimiento, volvió a tenerlo entre sus brazos como la última vez que estuvieron juntos. Otra vez volvió a oler su fragancia que tanto hacía falta respirar. El silencio se apoderó de la escena, ambos sentían sus corazón latiendo a mil por hora, ambos se amaban.

—Déjame explicar todo, Sakura —susurró a su oído, después deshizo el abrazo y se vieron a los ojos.

Ambos tomaron asiento frente del otro. Sakura tomó una servilleta y limpió la lagrima que derramó por la gran felicidad que causó volver a abrazarlo.

—Soy toda oídos —dijo esbozando un media sonrisa. Puso toda la atención en él.

—Antes de empezar, ¿gustas tomar algo u comer? —Con delicadeza tomó sus manos sobre la mesa y apretó.

—No quiero nada. Me urge saber, ¿por qué no te despediste de mí?

Sasuke no perdió más el tiempo fue directo al grano.

—Mi familia se involucró en un gran problema y por ello tuve que irme de Japón, por orden de los superiores. Asimismo se me ordenó no revelar nada a nadie porqué me iba, afuera de la familia o organización si consideraba las vidas de esas personas. Todo eso me llevó a tomar la decisión de no despedirme de ti, lo siento — cuidaba sus palabras, aún era demasiado crítico hablar sobre el accidente en la casa de citas.

Sakura entendió el porqué no podía dar más detalles, así que siguió con otra pregunta:

—¿Sabes cuánto dañó causante en mí?

Fruto De Nuestro Amor [Corrigiendo/ANTI ROMÁNTICO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora