Nunca pude olvidarte.

Capítulo 24: 'La pequeña de Abby'

MULTIMEDIA.

Ahí os dejo la foto de Abby.

LEER AL FINAL DEL CAPÍTULO!

Capítulo 24.

ERICK.

Mi madre estaba molesta conmigo, entendió que fue por defender a una... ''Amiga'' pero lo que no entendía era el porque tuve que pegarle a Peter y entonces comerme yo todo el marrón. Así que terminó yéndose a su habitación muy enfadada.

-Espero que no haya una próxima vez Erick. -me dijo mi padre alzando una ceja.

-No eres el mas indicado para hablar, mantén la boca callada. -le contesté yendo hacia la puerta ya que habían tocado.

-¿Cuando vas a perdonarme? -preguntó con la voz ronca.

-Cuando te perdone mama. -le reproché.

Abrí la puerta.

-Coge la moto y vamos. -dice Will serio.

-¿Para que?

-Vamos esta Abby ahí, si quieres que entre a tu casa voy y la traigo. -miré de reojo al coche de Will y ahí estaba mi pequeña niña inocente, mordiéndose el labio inferior como solía hacer de costumbre y enrollándose un mechón de pelo en el dedo, estaba nerviosa.

Cerré la puerta en las narices de Will, cogí las llaves y baje al sótano a por la moto, 2 minutos después ya estabamos en la carretera.

Llegamos a una cafetería y baje de la moto mientras me quitaba el casco vi a Abby bajar del coche de Will. La mire con tristeza, con arrepentimiento, con ternura, con... No se una mezcla de todo

-Erick, yo... -comenzó a decir. La miré, joder estaba a punto de llorar, tenía los ojos llorosos.

-Shh.. -le hice callar. Me acerque a ella y la abracé fuerte como nunca antes había echo.

Solo ella sacaba esa parte sensible de mi.

Cogí entre mis manos su rostro y la miré detenidamente, fijándome en todas las facciones de su cara, el pequeño lunar que tiene debajo del ojo que apenas se puede apreciar. Unas poquitas de pecas que tiene por sus mejillas que hacen que ella me encante. La arrugitas que le salen cuando esta enfadada.

¿Que mierda me esta pasando? Acercó mas mi cara a la suya casi puedo rozar sus labios pero la voz de Will nos detiene.

-Eh chicos, vamos-decía Will acercándose a nosotros ya que había ido a aparcar bien el coche.

Se rompió nuestro momento, si es que se le podía llamar así.

Comenzamos a andar a la cafetería, Abby va callada pero mirándome y yo mirándola a ella, es algo que no puedo dejar de hacer.

-¿Que desean? -dice la camarera con un uniforme bastante corto al lado mío.

-Una coca cola. -contesté yo. -Agua. -dijo esta vez Abby. -Que sean dos Colas y un agua. -dijo por ultimo Will.

La camarera se fue y me mando un par de miradas de puta, por que vamos es la típica mirada de: 'ven y follamos.'

Mi sentido varonil, no fallaba.

A los pocos minutos volvió dejando los refrescos en la mesa volvió a mirarme y esta vez Abby la miró mal. No pude evitar sonreír.

Mi pequeña nena sale a la luz.

Eh chico, no es tuya, ¿recuerdas?

(...)

-Yo no quería darle tan fuerte. -dije bebiendo de la coca cola y mirando a Abby.