Capítulo 3: Lila

17.9K 1.1K 523
                                    


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


«Para la humildad.

Nuestras acciones pueden cambiar el mundo de los demás.»


_ _ _ _ __.__.__.__.__.__.__.__.__.__ _ _ _ _


— Erica levántate —decía Angelina desde la otra punta de la habitación.

— Si, ya voy... un minutito más —dijo la niña mientras giraba su cabeza para el otro lado. Tal vez podría dormir unos segundos más, el sueño le ganaba por completo esta vez.

— No, ahora —continuó Angelina— Alicia tú también despiértate.

Pero ninguna de las dos movió un dedo. Querían seguir durmiendo, en especial Erica.

Adoraba dormir allí, en una cama, en un colchón blandito, con montones de almohadas cómodas y con la cantidad necesaria de frazadas para no pasar frío. ¡Qué más podía pedir!

Pero sí, debía admitirlo, ya era hora de levantarse.

Resignada se destapó. Se calzó sus pantuflas mientras bostezaba y caminó hacia la cama de Alicia Spinnet, su otra compañera de cuarto, y le golpeó la cabeza con su almohada mientras le decía "despierta bella durmiente" para luego dirigirse al baño a darse una cálida ducha para sacarse el sueño y luego cambiarse.

— En serio Alicia —continuaba hablando Angelina— no quiero llegar tarde a las clases, que me pongan en detención y que luego no llegue a tiempo a las pruebas de quidditch. Y sino a partir de la semana que viene no pienso esperarte más, morsa.


Pocos minutos después, Erica salió del baño aún bostezando. Le costaba acostumbrarse a los nuevos ritmos siempre que comenzaba el año escolar.

— ¿Eran hoy las pruebas de quidditch? —preguntó ella desconcertada.

— ¡Sí, claro que son hoy! Siempre es la segunda semana de clases.

— ¿Ya pasó una semana? Desde cuándo... —dijo Alicia sorprendida mientras se levantaba de la cama de un salto y buscaba su ropa como podía, porque todavía se notaba que tenía sueño.

— Sí —contestaron las otras dos chicas al unísono.

— Mira que eres despistada Ali pero a veces no me lo creo —dijo Erica riéndose. La otra chica bufó y le frunció el ceño para luego correr hacia el baño. Angelina negó con la cabeza, sabiendo que no había remedio con ella.


Erica dejó a sus amigas y bajó las escaleras en forma de caracol hacia la sala común. Saludó a algunos de los alumnos que salían también de sus dormitorios y se dirigió camino al gran comedor para desayunar.

Desde la raíz ➳  George WeasleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora