—La señorita Mía Ayelen Lombardo García, ¿Estuvo comiendo bien? —preguntó el doctor mirándonos, miramos los tres a Camila haciendo que el doctor también la mire.
—No... Hace una semana que come poco o simplemente pasa de la rutina de como solía comer. —responde mirando al doctor y después mírarme a mi.
Me siento culpable.
—Es eso, esta media desnutrida y deshidratada, si pudieran controlar eso... Porque puede llegar a darle alguna enfermedad o será internada, acaba de despertar y le pregunte si había tomado alcohol o ingerido alguna sustancia como la droga, y también me dijo que si, en conclusión; tomó sin comer nada y eso podría hacerle mal. —nos explica mientras lee el cuaderno.
—Muchas gracias jefe. —agradece Duki. Después de que le preguntamos si podíamos pasar a verla se fue del lugar dejándonos en la habitación.
Mía:
Cuando desperté me comí el interrogatorio de mi vida, me preguntaron si tuve relaciones, si comí bien, si tomé, si me drogue entre otras.
Senti como abrieron la puerta dejándome en mi campo de visión a los 4.
—Mía... Tenes que comer bien, el doctor dijo que podrías hasta quedar internada por desnutrición. —me reta Duki.
—Perdón... No pensé que me iba a pasar semejante cosa. —me disculpe jugando con mis dedos. Él me sonrió y me dio un beso en la frente. Tuve entendido que estuvieron como casi 5 horas casi 6. —¿Ustedes no tenían que ir a grabar? —pregunte dirigiéndo mi mirada a los dos Mauro.
—Si, lo que pasa esque cuando íbamos vos te pusiste mal y ni modo que te dejemos hay viste. —responde Lit mientras da una bocanada a su hamburguesa con la que entró minutos antes.
—Ahora nos tenemos que ir. —comentó Duki, asenti. A todo esto, Paulo estaba espectante mirando todo, sin decir nada, pero podía ver en su mirada un poco de tristeza.
Los chicos se fueron junto con Camila que según ella tenía cosas importantes para hacer junto a Piero, siempre haciéndome la segunda.
—¿Estás bien? —me pregunta Paulo medio bajoneado, se lo escuchaba apagado.
—Si hermoso. —respondí acariciando su mejilla.
—Perdón. —se disculpa mientras apoya su mano encima de la mia. Negué varias veces, él no tenía la culpa—Si no hubiera armado quilombo.... —lo pare con un pico.
—Bebé... No fue tu culpa de encerio. —me sente bien, y le di un beso, cosa que me lo siguió.
Escuche que abrieron la puerta haciendo que me separe de él.
—Perdón por molestar... —entra el doctor de unos 50 años. —¿Se siente mejor? —Pregunta, asenti varias veces mientras le sonreía. —Bien, los análisis salieron bastante bien, solo que regules tu, alimentación y como tomas agua, y esas cosas para no estar donde estas. —sugiere y sonrió.
—Gracias... —sonríe Paulo mientras le agradece.
—No de nada, se pueden ir cuando quieran. —nos sonríe alegre. —No se olviden pasar para firmar. —nos sonríe nuevamente y sale de la habitación.
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Acá está, no está embarazada jsjsjs
Alto relleno:(.
No les va a gustar mucho porque se que querían mini Londra o mini Mía ajajajaja.
Bueeeno, capaz que mañana vuelva a actualizar jeje. Tengo tarea no se que hago acá Ajaja.
