Caperucita Feroz

29 de Noviembre: Presentación

6:15 A.M.

Bueno, después de dos años, finalmente he decidido volver a escribir mi diario. Han pasado muchas cosas y creo que he de dejar constancia de ellas. Voy a tratar de explicar las cosas que han sucedido por el orden correcto y con claridad. Primero haré un pequeño resumen de lo que sucedía en mi anterior diario por si alguien no hubiese podido leerlo o no hubiera querido hacerlo y luego seguiré explicando todas las cosas importantes que he aprendido en estos dos años:

Yo nací en Brisbane (Australia) y la única herencia que me dejaron mis padres fue la adicción al juego. Nunca llegué a trabajar dos semanas seguidas, así que tenía muchos problemas pero muy poco dinero. Un día encontré a un chico que, junto a sus amigos, consiguió que superase mi ludopatía, que me mudara a las Vegas, incluso que me convirtiese en cantante famosa. Pero lo malo resultó ser que eran licántropos y pretendieron comerme. Finalmente, conseguí salvarme, pero al cabo de un tiempo me salió cola y descubrí que yo misma era una mujer-lobo. ¿Cuándo me mordieron?, ¿por qué? Lo primero es decir que los hombres-lobo son muy estrictos con respecto a convertir a alguien, ya que ser un licántropo es algo muy exclusivo que no todo el mundo puede ser, además si van mordiendo y comiéndose a la gente todo el tiempo, habría superpoblación de hombre-lobo, por no hablar de que los humanos descubran su existencia, lo cual sería catastrófico. Incluso para alimentarse tienen que engañar a sus presas (como a mi) y, muy de vez en cuando, asesinar a alguien sin importancia para alimentarse, aunque solo las noches de luna llena en las que se pueden convertir en lobos completamente. Es cierto que en algunas historias salen lobos comiéndose a la gente una noche cualquiera, y no hay falsedad en esas leyendas, solo que en estos casos se trata de lobos de verdad, que están aliados firmemente con nosotros. Entonces, volviendo al tema, ¿por qué me mordieron? Bien, después de mucho tiempo, conseguí sonsacar a Naia que, cuando mis padres pidieron un préstamo a la Mafia Licantrópica y luego no pudieron pagarlo, el jefe de entonces, Velkan (el de ahora es mucho más joven y se llama Jairo), decidió súbitamente y sin motivo aparente, que la niña que mi madre llevaba dentro debía ser convertida. Nadie entendió su decisión en ese momento y ahora mismo tampoco. O quizás lo disimulen muy bien. La verdad es que un par de veces he pillado a algunos miembros poco conocidos de la Mafia mirándome de reojo con expresión concentrada e incluso a Jairo con un aire de superioridad tan característico suyo, pero con un brillo en la mirada que creo identificar como miedo, al supervisarme durante los engaños a futuras víctimas, qlgo que se me da realmente bien. También se me da bastante bien luchar cuerpo a cuerpo, sobretodo cuando estoy transformada en luna llena. Estoy contenta, porque he conseguido sorprender gratamente a Oscar y a Naia combatiendo contra enemigos de otros bandos (enseguida lo explico), pero la verdad es que ahora ya no parecen inmutarse cuando gano peleas difíciles. Me imagino que ya pasó la novedad... Bueno, ahora toca hablar de los diferentes grupos de hombres-lobo. Hay grupos minoritarios y débiles a los que no hay que prestar mayor atención. En cambio, es muy diferente el trato que hay que tener con los grupos importantes. Estos son cuatro: La Mafia Licantrópica, los Sicarios Lobeznos, las Oceánicas y el Clan de los Lobos Blancos. 

-La Mafia Licantrópica es el grupo liderado por Jairo y de donde pertenecemos Oscar, Naia y yo. Nos dedicamos a hacer préstamos a toda criatura viviente, pero nuestro jefe es demasiado estricto con respecto a las devoluciones y a las deudas. Si él mandara sobre el grupo cuando prestaron dinero a mis padres, seguramente yo no habría nacido. A parte de eso, no hacemos mucho más, solo nos defendemos de los otros grupos cuando dan demasiada guerra y, modestia a parte, no es habitual que perdamos. El color de nuestro pelaje es oscuro, de tonalidades negras claras y negras oscuras, aunque nuestros ojos son claros, de color azul o gris.

-Los Sicarios Lobeznos son unos licántropos poderosos cuyo jefe es Drake, un temerario hombre-lobo que arrolla todo lo que se cruza en su camino. No pone reparos en abusar de su poder si es necesario y usa habitualmente su fuerza bruta y sus duros dientes. Sé por experiencia que a nadie le conviene enemistarse con él y, aunque empatamos en nuestro primer y único combate (ocasionado porque, supuestamente, nuestra Mafia secuestró a uno de sus chicos para sonsacarle información y luego matarlo), casi no lo cuento. Lo peor fue que Jairo no permitió intervenir ni a Oscar ni a Naia para ayudarme. Su color de pelaje es marrón de diferentes tonos y sus ojos son de color miel.

-Las Oceánicas son un grupo de pacifistas en el que solo hay mujeres-lobo. Viven en algun punto del Oceáno Atlántico y solo sabemos que no han desaparecido por rumores que llegan del norte. Hace mucho que no se dejan ver y, por lo tanto todo lo que sé sobre su aspecto, lo he sacado de antiguas leyendas: que tienen el pelo gris perla y que brillan en la oscuridad. Que sus ojos eran violetas pero que, al volverse pacifistas, toda la sangre derramada de sus víctimas les había teñido los ojos de rojo. Que sus colmillos eran finos como agujas de hielo y que eran mortíferos como puñales envenenados. Todo cosas así. En algunas historias también dicen que tienen una jefa milenaria llamada Hela.

-El Clan de los Lobos Blancos es quizás el más peligroso de todos. Hace siglos que quieren borrar a todos lo demás clanes del mundo, pero nosotros somos los primeros en la lista, porque, en nuestros libros de historia escritos por el Gran Lupus (el creador de la Mafia Licantrópica), hay más de mil páginas que hablan sobre un salvador que acabará con los que se interpongan en su camino y establecerá una relación real y fructífera entre licántropos, humanos, vampiros (sí, también hay vampiros; luego hablaré de ellos) y todas las demás criaturas vivientes. Bueno, la cosa es que la gran mayoría de los hombres-lobo están totalmente seguros de la veracidad de esa profecía, especialmente los Lobos Blancos, pero a ellos no les interesa para nada que haya una relación igualitaria y justa entre todos los habitantes de la tierra, ya que quieren gobernar ellos completamente. Creen que si nos matan antes de que aparezca nuestro salvador, podrán conseguirlo. Sus jefes son Níniel y Legolas, quienes no parecen entender que no conviene que sus subordinados maten cada luna llena a tres presidentes, dos reyes y un primer ministro. Su pelaje es muy claro, en algunos, completamente blanco, al contrario de sus ojos, que son negros.

Bien, ya está todo explicado sobre los clanes importantes. Ahora tengo que hablar sobre nuestros aliados, enemigos e iguales, según las circunstáncias: vampiros. No hay mucho que decir sobre ellos. Se alimentan por las noches de vagabundos sin familia y si no chocas con ellos, no tienes problemas. No conviene demasiado hacerte sus amigos porque, si cambian de bando, pueden lanzarte una puñalada por la espalda, aunque hay gente que no lo tiene en cuenta. John, por ejemplo. Estuvo saliendo con una bonita vampira llamada Gabriella, que dejó de venir súbitamente a la base de La Mafia Licantrópica poco antes de morir John. Según Naia no pareció importarle mucho y por eso discutían tanto. A Naia no le gustaba que olvidase tan pronto a los que antes habían sido esenciales en su vida, aunque fuesen vampiros. Supongo que tenía miedo que la olvidara a ella. Bueno, me parece que es todo lo que tenía que escribir para que si alguien lee esto pueda entender las cuestiones que irán surgiendo en los días siguientes.

¡Hasta mañana!