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—Sí te gustaron las galletas, ¿no?—Gerard estaba parado detrás de un mueble de la cocina, Frank en una silla frente a la mesa.

—Sí, las de Bandit eran más ricas—El mayor se carcajeó por esa opinión.

—¡Eran de la misma mezcla!—Esta vez rió Frank, sólo lo había dicho para hacer un chiste, las galletas tenían todas el mismo sabor.—¿Querés saber por qué las hizo pequeñitas?—El castaño asintió.—Porque sos enano.

Frank le lanzó con la cuchara de su café, rieron un buen rato y cuando se tranquilizaron Gerard pudo contar el por qué verdadero.

—Es que a ella le gusta darle el té a sus muñecos, y tiene un dinosaurio de plastico, obviamente, que tiene la boca abierta, creo que es un Tiranosaurio Rex, la cosa es que le encajó una galleta entre los dientes—Lo recordó entre risas, Bandit lo había hecho de una forma muy graciosa y tierna.

El castañó también reía con él, Miles también hacía ese tipo de cosas.

Estaban ahí hace un rato, sólo pasando el tiempo, la casa de Gerard era bastante grande y ordenada. El pelirrojo tenía la casa para él sólo porque Mikey se quedaría en la casa de un amigo, y Donna había viajado con una amiga para tener unas mini vacaciones.

Aidan sí había aceptado el trabajo y en ese momento se encontraba con Miles en su casa.

—¿Queres que empezemos una serie?—Se habían movido a la habitación de Gee, el castaño estaba parado viendo en una de las paredes unas fotografías colgadas cuidadosamente.—¿Qué ves?

—Las fotos, ¿puedo acercarme?—Gerard respondió con un simple "ajá" mientras buscaba algo bueno en Netflix.

Había bastantes, algunas sólo colgadas y otras enmarcadas sobre el escritorio. En una de ellas estaba Gerard al lado de una mujer preciosa de cabello negro, los dos sonriendo.

—¿Ella es Lindsey?

—Sí—Frank asintió.

En otra de las fotos Gerard tenía el cabello negro, estaba junto a la que supuso era Bandit de bebé. También había otras donde aparecía con un chico castaño de lentes, y otras con una señora rubia.

—Qué bonitas fotos—A Gerard le pareció muy tierna la sonrisa de Frank, se sentó en la orilla de la cama con movimientos suaves, le resultaba tan pacífica su persona.—¿Cómo conociste a Lindsey?

—En la escuela, eramos mejores amigos, lo seguimos siendo.

—¿Y cómo fue lo de Bandit?

—Hoy estás curioso Francisco—El castaño rió por el apodo pero esperó una respuesta.—Yo tenía veintitrés, ella me lleva un año así que tenía veinticuatro, habíamos ido a una fiesta y estábamos tan borrachos que cuando nos ofrecieron droga la aceptamos. Y después recuerdo algunas cosas pero nada más. Al otro día nos despertamos desnudos en una cama que ni conociamos, casi nos morimos de un infarto—Gerard lo contaba con gracia, pero en ese momento estuvo por desmayarse.—Cuando supimos que estaba embarazada sus padres y mi madre nos decían que ya sospechaban que eramos pareja, y tuvimos que decir que sí eramos para no quedar mal, pero lo intentamos un tiempo y no funcionó, éramos casi como hermanos...se sentía raro besarla.

Frank rió por lo último, continuron comentando algunas cosas sobre ese tema pero Gerard terminó la conversación cuando lo arrastró a su lado para ver la serie.

El pelirrojo estaba apoyando su cabeza sobre el pecho de el tatuado, iban por el segundo capítulo cuando una salvaje escena de sexo apareció, Gerard aprovechó el ambiente para alzar su cabeza y comenzar a dejar pequeños besos en el cuello de el castaño.

El menor se removió un poco para girarse y quedar con Gerard cara a cara, picoteó sus labios para luego besarlo con ganas, tenía sabor a café.

Frank bajó con cortos besos por su mandíbula hasta llegar a su cuello, lamiendo y dejando pequeñas marcas. Las manos de el pelirrojo estaban metiendose por debajo de la camiseta a rayas de el castaño.

El avellana deslizó su mano por el pecho y vientre de Gerard, parando en el cinturón de el mismo, acariciando por encima de la ropa.

—Gerard no viste mi...¡ah, qué asco!—La puerta se abrió de par en par mostrando a un adolescente de anteojos con cara de asco, inmediatamente se tapó los ojos y cerró la puerta nuevamente.

—¿Por qué nos persiguen las interrumpiciones?—Preguntó el mayor en forma de broma, se levantó de la cama rápidamente y se encaminó a la puerta.

—V-volvé rápido—Le dijo el castaño tartamudeando un poco, estaba sonrojado y excitado, acostado sobre su espalda en la cama.

—Mejor no me voy—Giró la llave en la cerradura y volvió a el lado de el menor comenzando a besarlo nuevamente.

Con sus manos sacó la remera de Frank y dejó besos húmedos por todo su pecho, el menor se removía un poco. Acariciaba el cabello rojo y soltaba suspiros.

Desabrochó el pantalón de el contrario, lo bajó por sus piernas y comenzó a lamer la humedad en los bóxers de el castaño.

Clavando sus esmeraldas ojos en los de Frank, introdujo el miembro en su boca, causando interminables gemidos por parte de el contrario.

Lo metió tan profundo en su garganta que el tatuado sintió llegar a el cielo, dándole estocadas un poco fuertes a la boca de Gerard logró avisar que se correría. El pelirojo quitó el pene de su boca para masturbarlo y esperar el líquido blanco que después de unos segundos cayó en su cara, se tragó lo que había llegado a su lengua con gusto.

Se arrodilló frente a Frank mientras se tocaba rápidamente, llegando sobre el vientre de el mismo y recostandose a su lado.

Se dieron muchos besos por todo el rostro, diciéndose palabras bonitas, el menor jugando con el cabello teñido.

—Frank, ¿Queres ser mi novio?

—¡Sí!—Se sorprendió un poco por la repentina pregunta pero se sintió tan feliz que sus ojos se pusieron acuosos.

* * *

Mientras escribía esto estaba evadiendo mis responsabilidades como estudiante, nO HICE MI TAREA

Subí esto por el cumple de Gee y porque les amo, disculpen lo mala que fue la escena de sexo xd y que sea relleno

Dedicado a aamidk jeje tkm

Bonito. [Frerard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora