Un nuevo día comenzaba en Ciudad República, los rayos del sol empezaban a iluminar la habitación de un departamento en el cual una chica pelinegra se despertaba, levantó su cuerpo lentamente, las sábanas cayeron de su cuerpo dejando ver como la chica se encontraba desnuda, comenzó a tallar sus ojos tratando de quitar esa sensación adormilada de su cuerpo, se estiró aún sentada en la cama, sus pechos dieron un pequeño salto, un bostezo escapó de sus labios y después comenzó a tentar la cama en la que se encontraba, como buscando a alguien, sin embargo, solo pudo abrir bien sus ojos para después mostrar una mueca de decepción.
—Ese tonto, no puedo creer que siga dejándome así. —Hablaba la chica en voz alta para sí misma.
—Oye, solo quise prepararte el desayuno, creí que estarías agotada, —Kai se encontraba con una bandeja de comida en el marco de la puerta, Leah solo pudo sorprenderse de ver como el ojigris se encontraba con su torso desnudo y unos shorts.
Pronto, Kai se acercó a Leah, dejó la bandeja en la mesita de noche y se sentó al lado de su amiga de ojos verdes.
—Creí que, como siempre, desaparecerías después de pasar la noche juntos. —Tomaba las sabanas tapando su cuerpo y trataba de acomodar su largo cabello negro.
—Vamos, no ha sido siempre así. —Respondía mientras partía un poco los panqueques que había preparado.
—Si claro, bien sabes que esta es la primera vez que estamos en la misma habitación después de tener relaciones.
—No entiendo por qué te molesta.
—Lo sabes muy bien Kai. —Abrió su boca recibiendo el bocado de panqueques que Kai le ofrecía.
—Siento no poder corresponderte Leah, eres una chica increíble, pero...
—Mejor no digas mas Kai, me gustaría que mi desayuno no se arruine. —Comentaba mientras recibía una nueva cucharada de alimento, sin embargo, la voz de la chica parecía más débil, casi a punto de quebrarse.
—Entiendo. —Fue lo único que mencionó el cortando más los panqueques y ofreciéndole a la chica.
El desayuno de los jóvenes terminó, Leah ya se encontraba vestida, cepillaba su largo cabello negro recién lavado frente a un espejo en la habitación de Kai, el chico solo veía la elegancia de su amiga, la gracia que tenía con solo cepillar su cabellera.
Sus pensamientos estaban hechos un completo embrollo, sabía bien la razón por la que no soportaba la idea de que Mako y Korra se vieran tan bien juntos, y más con la relación de Amigos Sexuales que tenía con Leah, la chica se tomó su tiempo para tratar de enamorar a Kai, pero no había podido llegar a él, ambos, en una salida junto a otros compañeros de la academia de policías, terminaron borrachos y a la mañana siguiente, Kai se encontraba en la misma habitación que la hermosa chica de ojos verdes, lo único que pudo hacer fue dejar una pequeña nota en la mesita de noche de Leah y se retiró, ahora que lo pensaba bien, Leah tenía razón, en sus próximos encuentros, terminó dejándola sola en la habitación, esta era la primera vez que se quedaba con ella después de tener sexo, quizá por ello, se le hacía tan elegante el solo movimiento del cepillo entre la cabellera azabache de la ojiverde.
El hecho de sentir algo por Korra le hacía entrar en conflicto, la Avatar era una chica que apenas y conocía, mientras que Leah era una amiga de Kai de hace un par de años, así que no podía entender su atracción por Korra, pero era momento de tomar una decisión, además, Korra mostraba más interés en Mako, por no mencionar a Bolin, quien también tenía interés en la chica, definitivamente Kai no quería ser parte de un Harem inverso para Korra, tenía, literalmente, frente a él, a una chica maravillosa, la cual había hecho mucho para poder ganar su corazón, literal, de todo, tanto que llegó al punto que desde aquella fiesta, ambos tenían muchos encuentros sexuales.
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Avatar, The Legend of Dust. (Libro 1 Terminado)
FanfictionDISCLAIMER: Los personajes de Avatar, The Legend of Aang and Korra, Todos los derechos a sus respectivos creadores, la historia pertenece a sus escritores a excepción de los cambios que realice para la conveniencia del personaje nuevo. Todos los arc...