Relatos Paranormales

Un Perturbado Más (primera Parte)

Esa tarde tomé mis cosas para ir a la escuela como cualquier día normal, solo que esta vez llevaba algo más en mi mochila.
Era un día nublado, todo parecía la misma rutina de diario, llegar, escuchar los apodos de los demás las risas sentir las miradas que me menospreciaban, incluso uno que otro aventón y otros dándome golpes en la cabeza, yo siempre era la burla de todos, "el raro", el que tenía que ser humillado por ser diferente, normalmente los ignoraba agachando la cabeza, pero este día no, este día era diferente, para empezar me topé con esa perra de la que había estado enamorado por mucho tiempo, y el día que me atreví a decirle por mensaje lo linda que era, ella solo se burló de mi, le mostró el poema que le escribí a toda  la escuela, todos me humillaron por su culpa, haciendo memes de mi, como si yo no tuviera sentimientos, como si yo no fuera nada, así que ese día, al ver a esa perra pasar junto a mi, lo decidí, ella sería la primera.
Saque el arma que tenía en mochila, y le grite; hey golfa!!!, Cuando se giró a verme fue como en cámara lenta, presione el gatillo, se escuchó el fuerte ruido de mi arma acompañado de fuertes gritos, la pared quedo empapada en sangre, todos comenzaron a correr, a gritar por ayuda asustados, pero yo solo sentía placer de verlos así, tanto que empecé a reír a carcajadas, hace mucho que no sentía esa alegría, los próximos sería esos dos tipos que me golpeaban cada que querían, los seguí asta el baño, el par de idiotas empezó a suplicar por su vida, pero yo riéndome como nunca les dije: todo se paga y es su momentos hijos de perra, su sangre salpicó tanto que enunció mi cara, no me importó, al contrario, sentir esa sangre tibia en  mi cara me hacía sentir mucho más placer, tanto que mi carcajadas aumentaron, salí del baño y empecé a disparar al azar, no me importaba a quien le diera, yo solo quería que sintieran el mismo dolor que yo, quería que sufrieran, pronto llegaron unos hombres a detenerme, pero ya era tarde ya había cumplido con mi objetivo, al fin después de tanto tiempo me sentí relajado por fin pude dormir por las noches, no me importa estar en este cuarto blanco, con esos hombres vigilando me todo tiempo, es triste ver a mis padres llorar así, pero al final todo valió la pena.