Relatos Paranormales

Necrofilia

Se que estoy mal, me dicen enfermo, desde que empecé a conocer el sexo, aún ahora no lo entiendo por qué cuando crecía y mi cuerpo cambiaba solo tenía una imagen en mi mente.
Si esa hermosa imagen de mi tía carolina, muerta y a Merced de mis más bajas pasiones.
Ella había muerto ,yo la había asesinado, tenía que ser mía antes que de mi padre. Les contaré la historia y el por qué me gusta tener sexo con cadáveres. Ella estaba enferma de su corazón.
Débil y siempre en cama tan hermosa blanca como la espuma del mar de ojos verdes y brillantes, que ya Lucian tristes y apagados toda ella era una diosa.
De cuerpo esbelto grandes pechos y caderas anchas, pero sus piernas eran una delicia largas y bien torneadas .
Para mí poca edad era muy despierto sabía lo que quería y lo que haría .
Ella murió una tarde bajo mis manos, lo mejor que puede hacer en mi vida. Solo esperaba ese momento, a mi padre lo escuché tantas veces hablarle cuando ella dormía bajo los sedantes médicos .
Carolina hermana mia si supieras cuánto te amo, quiero sentir tu cuerpo una sola vez y seré el hombre más feliz de la tierra , muere por favor hazlo ya .
Esas palabras quedaron grabadas en mi mente, por qué le deseaba que muriera? cosa que después descubrí, lo seguía sin que se diera cuenta, lo vigilaba ,quería saber su secreto , que muy pronto descubriría al verlo caminar con una bolsa negra y grande en dirección a la parte trasera de la casa, donde tenía un pequeño cuarto, donde guardaban las cosas viejas, herramientas y demás porquerías.
Lo ví entrar mirando a todos lados, sin que el se diera cuenta llegue a ese lugar y por una pequeña ventana lo observé cerraba la puerta con llave, llevo la bolsa a una gran mesa que mi madre había desechado ,como pudo subió la bolsa a la mesa , empezó a solo tocarse la cabeza y reír satisfecho de lo que contenía.
No podía imaginar lo que mis ojos verían .
Saco primero una pierna, después jalo la bolsa con más furia, desesperado quedando al descubierto un cadáver de mujer , pequeña tan inexpresiva y sin vida.
Era la sirvienta asiática de mis vecinos , como es que murió? no lo sé ,solo estaba ahí en esa mesa ,donde tantas veces comimos en familia.
Pero bueno ,ese hijo de puta la tocaba como loco ,mis ojos no podían apartar la mirada de aquella escena .
Reia, la insultaba, mordía sus pechos hasta que con asombro ,mire que se quitaba su ropa, acomodaba a la mujer bien en la mesa y comenzó a tener sexo con ella.
Estaba tan metido en lo que hacía que no se dió cuenta cuando resbale de una piedra que había puesto para subir y alcanzar a ver mejor por la ventana , el solo gritaba, gemía golpeaba al cadáver al tiempo que la penetraba absorto en su lujuria y desenfreno.
Su secreto ya era mío .
Ahora sabía por qué pedía que mi tía muriera quería hacer lo mismo que a la chica asiática .
Lo miré tantas veces seguir el mismo ritual, nunca supe que hacía con los cadáveres, pero no solo eran mujeres igual lo observé llevando cadáveres de hombres y animales , si que estaba enfermo ,su pasión por la muerte y el sexo iba más allá de lo imaginable .
Mi mente se asoció con la idea de que el verdadero placer estaba en tener sexo con cadáveres, exitante, sublime tenía que probarlo sentir lo que mi padre sentia, tenía que hacerlo .
El tiempo pasó yo crecí, mi padre seguía igual haciendo sus cosas en el cuarto trasero , mi madre vivía en su mundo nunca sospecho nada, y mi tía seguía así tan delicada y hermosa pero más enfema.
Se que soy un monstruo igual que mi padre pero no lo puedo controlar, pero me da igual que me digan desquiciado demente, mi locura llegó al máximo cuando no pude más ,mi cuerpo me exigía satisfacerlo, ya no me llenaba solo ver lo que hacía el viejo, y autocomplaciente tenía que experimentarlo yo mismo.
Y con quién mejor que la hermosa Carolina .
No sé la dejaría al viejo, jamás disfrutaría de ella,
Pero no esperaría a que muriera tenía que ser ya mismo no soportaba más la espera .
Al día siguiente fue mi oportunidad , mis padres salieron por víveres y tardarían, entre así al cuarto, ella dormía como siempre ,tome una almohada ,la puse en su hermoso rostro y solo apreté con fuerza, y más fuerza ella no se resistió estaba tan débil que solo murió enseguida.
Ahora sí ,ella era solo mía y lo mejor de todo solo era ya un cadáver.
La desvesti, bese todo su cuerpo cada milímetro de piel ,no deje nada sin poner mis manos y mi boca ,sensación jamás experimentada por mi.
Cuando entré en su cuerpo pensé que moriría de placer ,era virgen ,tan estrecha y húmeda ,solo la hice mía no sé cuántas veces extaciado con aquel precioso cuerpo sin vida .
Sin darme cuenta que el tiempo pasaba y de pronto mi padre entro ala habitación, había regresado antes, se lanzó furioso contra mi, golpeándome con puños y piernas pero yo era más fuerte y sabía que nunca me perdonaría quitarle lo que más cuidaba y amaba para el. Pero así es la vida ,el más inteligente siempre gana.
Tome lo primero que encontré y solo le di en la cabeza ,cayó y seguí golpeándolo hasta que murio .
Lo tome por los pies y lo arrastre hasta el cuarto trasero, lo puse en la mesa y como podrán imaginarse lo penetre sin pensarlo.
Solo me retorcía del placer de probar el cuerpo de quién me dió la vida y me enseñó lo que es el verdadero placer carnal .
Ahora solo esperaré a mí madre, sé que es un poco vieja pero tengo que probarla.