𝓑𝒓𝒐𝒌𝒆𝒏 𝓓𝒐𝒍𝒍 [Buck-Tick] CORREGIDA

根

Nota

Las fechas, lugares y eventos fueron cambiados con el proposito de seguir la trama de la historia. 

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根 (Ne) 

Raíz

Bajó profundizando sobre todo lo que había pasado por su mente hace algunos minutos, los recuerdos de la despedida, su tío se encontraba en el estudio cómo siempre con los demás ensayando. 

— ¿Tío? — llamó con vergüenza en el rostro, no estaba contento con su actitud pasada pues su boca se había reducido al tamaño de una uva, además sus arrugas se marcaban un poco más. — ¿podemos hablar? — roló los ojos, poco comprendía de la relación que llevaba con Atsushi, pero siempre tuvo claro que ese hombre la protegería hasta de sí misma. 

— Mi nombre no es Atsushi Sakurai, se fue a casa, no creo que salga, tal vez lo veamos mañana cuando todo empiece— se refería al festival que tantos problemas estaba dando, fue una completa idiota, inclusive Anii le reprocho con la cabeza para seguir revisando los acordes de la nueva canción — puedes ir si quieres aun que ya no trabajes aquí— no podía perderlo todo, no ahora que su vida era un completo desastre. 

La humedad se apoderaba de sus ojos, el dolor en su garganta no la dejaba expresarme de manera correcta. — no sabía lo que decía, tío de verdad, quiero seguir aquí, no importa si no me pagas, no quiero volver a Finlandia— sus ojos cafés tan profundos y llenos de misterio se posaron en los demás miembros del grupo como buscando aprobación, aunque muchos no lo notasen, siempre tomaban las decisiones de esa forma, comunicándose a base de miradas. 

— está bien, pero debes hablar con Acchan, ese hombre te quiere cómo a nadie, eres como hija— ¿hija?, claro que más se podía esperar, todos esos episodios, ese enojo, era cómo un padre celoso cuando su hija comienza a ser asediada por los chicos del instituto o del vecindario.

— claro, hija— casi se traga las palabras que le había soltado, siempre la cuidaba y consentía, era muy claro que Atsushi simplemente le amaba como un padre, tal vez un hermano mayor. 

Uta le tomó de la mano con su ya sonrisa de siempre dándole a entender que debía a hablar con ella en privado — vamos necesito que firmes algunas cosas sobre el equipo que me dio Tanaka antes de irse a ver el lugar— salieron ante la mirada de Imai llena de dudas, Tanaka nunca dejaba ningún documento suelto, antes de eso, su pequeña barba de candado se quemaba. 

— Nami san, si no le dices lo que sientes ahora me temo que esto va a terminar mal— ese hombre era más pequeño que ella en estatura simplemente pues en cuanto a sabiduría le rebasaba por años luz, y eso se traducía en que ahora había adivinado cada uno de mis sentimientos.

— Uta, de verdad no sé qué voy a hacer, todo fue culpa de Tatsurou— tomó su rostro con las dos manos, no importaba cuanto creciera o madurara, para ellos iba a seguir siendo la misma niña que recogían afuera del colegio y la escoltaban por una calle llena de padres tradicionalistas que los miraban como si fuesen una banda de asesinos. 

— deja de buscar culpables y enfócate en las soluciones, anda por él— besó su mejilla con dulzura, por primera vez en su vida no se sentía sola, limpió sus lágrimas.

— está bien, nos vemos— casi salió corriendo del edificio para conseguir un taxi, pues Atsushi se había llevado el auto, trataba de marcarle pero no contestaba, llegó al edificio donde estaba su apartamento, ésta vez no había ni tarta, ni vino, sólo ella y sus estúpidas disculpas, además ya había pasado más de una hora entre sus recuerdo y el trafico muy típico de Tokio, las zapatillas le estaban matando, pensó en volver a casa a tomar rompa más cómoda, pues aun llevaba la ropa de la ex esposa, la cual olía a su perfume con una mezcla del suyo, estaba a punto de tocar de nuevo ese timbre que comenzaba a odiar, pues estúpidamente no le había pedido la nueva clave.