Cortesana

Capítulo 5

─ ¿Mami porque lloras?

Sakura miró furiosa a Sasuke y giró, con su pequeña hija, estaba muy molesta. 

¿Cómo era posible que el haya estado besándose con la sobrina de Kushina?

Por el momento estaba, molesta, no quería hablar con él y aunque Sasuke la llamó para que parase y hablaran no le hizo ningún caso.

Sakura entró al cuarto junto con Sarada y la acostó dulcemente en su cama. Le dio un beso en la frente y se preparó para ir a la cena de la familia.

Caminaba hacia el comedor cuando un brazo la jaló hacia uno de los cuartos vacíos y de servicio de la mansión.

Al voltearse notó una cara demasiado conocida por ella que la observaba con ojos acusadores. Lo entendía y aunque estaba furiosa con él ya era hora de desenredar todo lo que estaba pasando.

─ Sakura, creo que tienes algo que decirme─ comunicó, molesto el pelinegro.

─ Primero explícame, lo que paso con Karin─ articuló la pelirosa con dolor, mientras cruzaba sus brazos alrededor de la cintura.

Sasuke suspiró, en el fondo, los años lo habían hecho madurar y sabía que actuar con impulsividad solo empeorarían las cosas, todo tenía un porque en la vida después de todo y aunque le dolía pensar que Sakura estuvo con muchos después de él y que la niña era de otro hombre se resignó a confesarle lo que realmente había pasado.

─ Karin, es mi prometida. ─ Reconoció, mientras bajaba la cabeza.

Sakura abrió los ojos sorprendida y le dio la espalda dispuesta a marcharse y olvidar todo lo que había pasado en la semana y la noche anterior. No lo hizo porque Sasuke la detuvo y continúo hablando.

─ Mis padres acordaron casarme con ella. Mi madre está muy enferma y lo que más quiere es tener un nieto, pues su muerte está cerca─ confesó, mientras una lagrima descendía por su mejilla.

─ ¿Por qué no me lo dijiste? ¿Porque te acercaste a mi si ya estabas con otra? ─ le reclamó, Sakura. Mientras lagrimas brotaban de sus ojos y no era capaz de sostenerle la mirada al pelinegro.

─ Porque te amo Sakura, siempre lo he hecho desde el día en que te conocí─  confesó, mientras sus mejillas se teñían de un lindo rosa.

─ No te creo, eres un mentiroso, solo me usaste─ contradijo, molesta Sakura.

─ Tú también me ocultaste cosas, como la niña que te llamo madre─ Sasuke también estaba molesto y el solo pensar que ella había estado con otro le oprimía el pecho.

─ Sarada, es mi hija.

─ ¿Quién es su padre? ─ preguntó, Sasuke.

─ ¿No es idéntica a él? por si lo has visto─ le dijo a Sasuke quien no entendía nada. Pronto dibujo mentalmente el rostro de la niña. Cabello negro, ojos negros, piel clara, la misma sonrisa. ¡Por dios era su hija! como fue tan estúpido.

─ ¿Es mía? –le preguntó a la pelirosa.

─ ¿Lo dudas?

Sasuke abrió los ojos sorprendido habían estado discutiendo por lo de Karin hacia unos instantes y ahora se encontraban hablando de la dulce Sarada quien descansaba en algún rincón de la casa.

─ No pensé que...─ Sasuke la calló en el acto.

─ Ella es la consecuencia de lo que paso hace años─ habló, Sakura.

─ Tengo una hija...─ Sasuke no salía aún del shock. Mikoto quería un nieto quien lo diría su nieta ya había nacido hacia mucho y tenía 5 años.